jueves, 3 de marzo de 2011

El miedo de las 'telecom' a la Sanidad - DiarioMedico.com

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ESPAÑA
potencial tecnológico sin aprovechar
El miedo de las 'telecom' a la Sanidad
Cual explorador dispuesto a introducirse en una frondosa jungla, las compañías especializadas en telefonía móvil aguardan con temor para dar el primer paso en firme dentro del sector sanitario. Es cierto que ya existen algunas incursiones, pero el potencial de estas tecnologías dista mucho de haberse aprovechado. La consultora AT Kearney ha presentado un informe en el que establece una serie de pautas para que las telecom entiendan el mercado sanitario y le pierdan el miedo. Eso sí, la aplicación final dependerá de lo que al final quiera el médico.



David Rodríguez carenas - Jueves, 3 de Marzo de 2011 - Actualizado a las 00:00h.


El potencial de la telefonía móvil en Sanidad es muy grande.


En el Reino Unido hay más móviles que ciudadanos. Y estas tecnologías tienen un gran potencial en el seguimiento de pacientes con enfermedades crónicas. Pero extender su implantación en la Sanidad está siendo muy complicado, lo cual se constata con aspectos como que la Directiva de la Sociedad de la Información y los Medios de la Comisión Europea reconociera que no tiene política al respecto, según el informe Mobile Health, who pays?, presentado por la consultora AT Kearney, que lo ha llevado a cabo por encargo de la Asociación del Sistema Global para las Comunicaciones Móviles.

Las palabras del informe las ratifica y adapta a nuestro país Carlos Hernández Salvador, jefe de Proyectos en la Unidad de Investigación en Telemedicina y e-Salud del Instituto de Salud Carlos III, en Madrid: "La implantación de la tecnología móvil en la Sanidad española es baja o muy baja en comparación con otros campos de actividad".

Plantearse el retorno de la inversión a los doce meses es imposible; debe ser una estrategia más de largo plazo

Ante este panorama, las compañías de telefonía móvil aún andan a la espera de encontrar cómo hincar el diente a la industria sanitario, caracterizada en el informe como "extremadamente conservadora", a lo que se añade que "mientras en otras industrias la tecnología móvil ha reducido costes, en Sanidad aún no lo ha logrado". El responsable del estudio, Jonathan Anscombe, partner de AT Kearney, reconoce que "algunas compañías sí están asustadas, al menos en el aspecto más clínico".

Peculiaridades

Lo que se pretende con Mobile Health, who pays? es explicar las peculiaridades de los sistemas sanitarios (ver apoyo) y combinarlas con las propias de la tecnología móvil. El trabajo se ha llevado a cabo con textos existentes y entrevistas a operadores de Europa, Asia y Estados Unidos.

Para que el uso del móvil aumente hay que sacar parte de la asistencia fuera de los centros sanitarios

El informe enfatiza una y otra vez que hay que distinguir entre países desarrollados y en desarrollo, porque para abordar el sector sanitario primero hay que conocer los múltiples sistemas que lo pueblan. En los países desarrollados el reto es cumplir con las expectativas del ciudadano a la vez que se controlan costes, y en los que están en fase de desarrollo, donde la tecnología móvil puede contribuir a reducir la brecha social, basta con crear la estructura para una asistencia de calidad.

En España "los móviles no están implantados en la gran mayoría de hospitales, ni en los centros de atención primaria", lamenta Hernández Salvador. Para que esto cambie habrá que "adecuar los sistemas de información de las organizaciones sanitarias a las vías de comunicación de mayor uso social -email, sms, blogs, redes sociales, etc- y sacar parte de la asistencia fuera de los centros sanitarios". Si esto ocurre, "el crecimiento sería exponencial".

El informe plantea como campo de batalla un sector en el que, según Anscombe, "hay un gran número de estudios piloto, pero el futuro no está claro y no se sabe cómo hacer dinero. Algunos pilotos son muy pequeños y poco convincentes, y muchas veces quedan en la mesa en el mismo montón que otros trabajos anteriores".

Camino por recorrer

Por tanto, aún resta mucho camino para que la tecnología móvil en Sanidad sea una industria establecida. Antes de alcanzar su madurez quedan años de pilotos. Casi todos los operadores de telecomunicaciones contactados en el estudio tenían a la Sanidad como aspiración global, pero no habían construido aún su estrategia. Por eso se proponen seis puntos clave para establecer dicha estrategia, a los cuales Anscombe suma un séptimo: "Los objetivos deben ser realistas. Plantearse el retorno de la inversión a los doce meses es imposible; debe ser una estrategia más de largo plazo":
-Construir soluciones escalables. Las aplicaciones pueden ser múltiples, así como los modelos comerciales y los países, por lo que hay que conseguir proposiciones robustas para cada caso.
-Decidir el papel del operador. A veces es preferible proveer servicios de valor añadido que una proposición básica.
-Encontrar los partners adecuados. Los operadores móviles necesitan compañeros para su aventura sanitaria. Deben ser una mezcla de organizaciones locales y globales, entre las que figuren compañías de dispositivos médicos, compañías farmacéuticas...
-Desarrollar una distribución y un modelo comercial apropiados. Los operadores deben saber que difícilmente podrán ser vistos como proveedores de salud en mercados asentados.
-Construir la infraestructura adecuada. Aquí entran en juego el desarrollo de producto, su comercialización y su interfaz.
-Definir el camino correcto. De momento sería adecuado centrarse en el mundo desarrollado y en peticiones de los profesionales.

Las tecnologías que más opciones tienen de cumplir estos factores son las plataformas que permiten conectar varios dispositivos, según Anscombe, que apunta que en el futuro habrá que buscar que la historia clínica electrónica de los pacientes esté en sus móviles. "La tecnología para ello ya existe. Que sea una realidad dependerá de las Administraciones públicas y, sobre todo, de lo que decidan los médicos".

La conclusión del informe es clara: no se puede realizar un acercamiento ligero para entrar en un área como la sanitaria. La Sanidad es probablemente el sector que más retos plantea para los operadores, pero también el más atractivo, al menos en el largo plazo.



Mercado Sanitario

La tecnología móvil tiene peculiaridades, pero hay una serie de normas que deben servir para que cualquier industria entienda los factores que influyen en la posibilidad de financiación de una tecnología:
-Voluntad de pago.
-Limitación presupuestaria.
-Consideraciones de qué camino seguir.
-Valor de la innovación, lo cual obliga a producir resultados.
-Creación de valor tangible.
-Flujos de financiación y modelo de reembolso. Además, dos claves determinarán quién ganará con el beneficio potencial de una nueva tecnología: cómo se crea el valor y cómo reparte el riesgo el sistema de reembolso. Por lo general, el sistema más flexible es el que permite más extensión de las nuevas tecnologías. El ejemplo está en el sistema de salud de la Administración de Veteranos de Estados Unidos, que "tiene quizás el mayor y más integrado ejemplo de telemedicina, con 30.000 ciudadanos con enfermedades crónicas", según el informe Mobile Health, who pays?.

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