Aprueban un controvertido fármaco para "prevenir" el VIH

Es un antirretroviral indicado para los grupos de alto riesgo; no reemplaza el uso del preservativo

Mientras avanza la cuenta regresiva para el inicio de la XIX Conferencia Mundial sobre el Sida, las autoridades sanitarias del país anfitrión, Estados Unidos, aprobaron lo que se considera el primer fármaco "preventivo" de la infección con el VIH.

La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) informó ayer a través de un comunicado que autorizó la comercialización del antirretroviral Truvada "para reducir el riesgo de transmisión del virus del sida en individuos sanos con alto riesgo de ser infectados", luego de que un panel de expertos lo recomendara hace dos meses.

Además, la FDA insistió en que el medicamento "no puede sustituir las prácticas sexuales seguras", como el uso del preservativo, ni los controles de rutina y el tratamiento de las enfermedades venéreas.
Inmediatamente, la noticia se amplificó con la ayuda de las redes sociales. "Es un hito en nuestra lucha contra el VIH", dijo Margaret Hamburg, directora de la FDA.

Sin embargo, los expertos consultados por LA NACION recomendaron cautela. "Este fármaco sólo estaría indicado para casos muy puntuales y para ciertas poblaciones que tienen una alta tasa de transmisión viral", indicó el doctor Pedro Cahn, presidente de la Fundación Huésped.

Consideró que, por ejemplo, podría ser "una estrategia para la población trans , en la que la prevalencia de la infección con VIH es del 34%, comparado con el 0,4% de la población general. También podría ser útil para las trabajadoras sexuales o quienes tienen dificultad para usar el preservativo (por ejemplo, cuando su pareja se niega). Son todas circunstancias muy particulares. No es algo que debería ganar la tapa de los diarios".

En todo caso, según insistió, "el mensaje es: chicos, no hay que salir a la farmacia de la esquina a comprar Truvada. No es la idea".

Por su parte, la doctora Mabel Bianco, que preside la Fundación para el Estudio y la Investigación de la Mujer (FEIM), advirtió que no se trata de un medicamento inocuo. De hecho, es una píldora que combina dos antivirales (emtricitabina y tenofovir disoproxil fumarato). "Su uso tiene un impacto en la salud. No es como tomar un analgésico común, por lo que no debería promoverse su uso indiscriminado", sentenció Bianco, que también es representante de las ONG de América latina y el Caribe en el Cuerpo Directivo de Onusida.

La demostración de la utilidad preventiva de este antirretroviral surgió de dos estudios. En ambos, los participantes combinaron el uso del medicamento o de un placebo (grupo control) con el preservativo.
En un estudio sobre 2499 hombres que tienen sexo con hombres que no tenían anticuerpos contra el VIH en el organismo (seronegativos) de seis países, el fármaco redujo un 44% el riesgo de infección versus el grupo que había recibido un placebo. En el segundo ensayo clínico, esta vez con 4875 parejas heterosexuales, en las que ninguno de los dos era portador del VIH, el riesgo de infección disminuyó hasta un 75% con respecto del grupo de comparación.

"La noticia es que la utilización de esta medicación en varios estudios clínicos demostró una eficacia que varía entre el 44 y el 73%, según el ensayo. Es una herramienta que en todo caso puede considerarse adicional al uso del preservativo y a las prácticas de sexo seguro -dijo Cahn-. Ahora, si vamos a hablar de una medicación para prevenir, ¿por qué en lugar de plantearnos administrarles un fármaco como éste, que no elimina totalmente el riesgo, a cientos de millones de personas sexualmente activas, no les damos la medicación probada a los 34 millones de personas que ya viven con VIH?"
Y Bianco consideró que sería importante conocer, por ejemplo, qué pasaría con quienes tomen este fármaco estando sanos y que, por cualquier motivo, se infecten con el VIH. "Me pregunto: ¿podría ser un factor que ayude a desarrollar resistencia a los antirretrovirales? Aquí, ya tenemos bastante problema con esto por la interrupción de los tratamientos o el cambio de los fármacos. No considero que su uso deba promoverse masivamente. Podría ser un arma de doble filo."Representantes de varias ONG manifestaron ayer su preocupación de que la aprobación sea un retroceso en las estrategias de prevención de todos estos años.

Claves

Los efectos adversos
más comunes son diarrea, náuseas, dolor abdominal, pérdida de peso y cefaleas, mientras que los más graves afectan a los riñones y los huesos.
El costo del medicamento
en el país es de unos 4060 pesos por cada frasco de 30 comprimidos. Su uso diario se traduce en un costo anual de 48.720 pesos.