Estar un paso adelante de la adicción

Esa es la misión de la entidad que trabaja en la prevención de esta enfermedad, junto con pacientes y en escuelas

Por Teodelina Basavilbaso | LA NACION

El equipo de la Fundación Santa Catalina busca llegar antes de que el consumo nocivo se convierta en adicción. Justamente porque conocen el rostro de dolor y la desesperación de los adictos que atienden, aspiran a adelantarse a la enfermedad, reforzando la prevención entre los más jóvenes.

Por esto, además del abanico de programas que ponen a disposición de sus pacientes, como tratamientos ambulatorios, terapias grupales, familiares e individuales y grupos de autoayuda, ofrecen charlas informativas sobre el tema en colegios y en universidades. "Con este trabajo de concientización aspiramos a llenar el vacío que existe sobre la falta de programas de prevención en adicciones", explica Tomás Torre Solanet, coordinador del programa, y un convencido de que es necesaria la sistematización de políticas preventivas para la detención precoz de factores de riesgo entre los chicos.

En las escuelas, además, ofrecen capacitación a los gabinetes psicopedagógicos para la detención de conductas y comportamientos que presuman la posibilidad de adicciones. Si bien el programa comenzó hace un año, ya realizaron charlas en tres escuelas.

Alrededor de 100 personas ya fueron atendidas y escuchadas por el equipo de la fundación. "A uno le da una alegría enorme cuando se entera de que sus pacientes reconstruyeron su vida y están bien", dice el psiquiatra y cofundador, Javier Torassa.

Pacientes del grupo de autoayuda llegan a la sede y se sientan en forma de círculo en cómodos sillones. Entre ellos, se encuentra José, de 46 años, que valora el trato humano que recibió en la fundación. "Estuve internado siete días en coma por una cirrosis hepática y, sin embargo, al salir del hospital, seguí tomando alcohol. Luego de once internaciones, llegué a pedir ayuda acá y ahora soy otra persona", dice José, y agrega que es esencial el acompañamiento de un buen oído en esos momentos.

Los costos de los tratamientos para las rehabilitaciones son cubiertos por las obras sociales. No obstante, cuentan con un sistema de becas y ayudan a sus pacientes a realizar los trámites administrativos necesarios para conseguir respaldo del sistema de salud.

El equipo que conforma la fundación sueña con ampliar su programa de prevención en más escuelas públicas y privadas, fortalecer su programa de voluntariado, conseguir un espacio propio (alquilan el lugar actual) y, además, quieren trabajar tiempo completo en su pasión por brindar una mano a los adictos en los momentos de soledad y ansiedad.

Todos aquellos que quieran colaborar, ofrecerse como voluntarios, o conocer más sobre sus programas de prevención pueden hacerlo al: (011) 4952-3008, o sino vía e-mail a: iinfo@fsantacatalina.org.ar.