Los expertos advierten que estamos "sobreajustando" el presupuesto en Sanidad

Barcelona (26-28/10/2013) - Silvia C. Carpallo

La Economía Sanitaria se convierte en una de las protagonistas del 35º Congreso Nacional de SEMERGEN, donde diversos expertos afirman que tanto la Atención Primaria como el presupuesto farmacéutico no admiten más ajustes, y que es necesario hacer reformas del modelo para alcanzar una verdadera sostenibilidad

"Si la Sanidad fuera un paciente estaría en la UVI, especialmente lo que es la Atención Primaria", así se pronunciaba José Luis Llisterri, presidente de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN), en una de las primeras mesas del 35º Congreso Nacional de la Sociedad, en la que la Economía Sanitaria era una de las protagonistas.
Llisterri no podía dejar de recordar que si bien el Ministerio de Sanidad ha hecho una apuesta por la cronicidad, esta no se ve respaldada económicamente cuando se siguen disminuyendo los presupuestos de la Atención Primaria a favor de la Atención Especializada, "hay que ser coherentes", reclamaba, afirmando que "se está resolviendo la solvencia económica en contra de la Atención Primaria, cuando solventar la cronicidad está en manos de los médicos de familia". En este sentido, Jaume Puig, profesor titular del departamento de Economía y Empresa de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, explicaba que, si bien era necesario hacer un reajuste del gasto ante la disminución de los ingresos públicos, "nos estamos sobreajustando en Sanidad", sobre todo si se tiene en cuenta que es uno de los servicios públicos más valorados por los ciudadanos, y que es el que se está llevando gran parte de los recortes. Igualmente recordaba que si bien se está trabajando en la sostenibilidad a corto plazo, se olvidan de los problemas a medio y largo, como es "la transición a la longevidad", para lo cual es básico buscar el modo de "sobrevivir con una mayor calidad de vida, lo que será clave para la propia supervivencia del SNS". Es decir, es necesario reorientar el modelo.
Pero la Atención Primaria no es el único ámbito perjudicado por los recortes, y es que los expertos no olvidaban que gran parte del reajuste se lo ha llevado el gasto en Farmacia. Entre las últimas medidas adoptadas en este sentido, Jaume Puig consideraba que, por ejemplo, "el debate del copago se ha introducido tarde y mal", recordando que se trata de una de las medidas con mayor impacto social, y que aún no se ha hecho ninguna evaluación al respecto de la misma.
Sobre el copago y sobre las políticas de financiación de innovación, Puig opinaba que España actúa con mucho retraso con respecto a Europa, donde todas las evaluaciones se realizan en torno a criterios de coste-efectividad, tanto para la aportación de copago, como en criterios de financiación por valor, y contratos de riesgo compartido, para la inclusión de fármacos innovadores.
Benchmarking y formación frente a la variabilidad clínica
Los expertos de la mesa acusaban, como en tantos foros, que otro de los grandes problemas de la Sanidad española reside en la variabilidad de las políticas aplicadas en cada una de las 17 comunidades autónomas, especialmente en lo que a política farmacéutica se refiere.
En este sentido, el presidente de SEMERGEN señalaba que estamos pasando de una etapa en la que se hipermedicalizaba, a un proceso de "desmedicalización", que traerá consecuencias a medio y largo plazo en la salud de muchos pacientes. Todo ello debido a las medidas de algunas CC.AA. en cuanto a poner trabas a la prescripción de fármacos, "si realmente el sistema no puede asumir el coste de un fármaco no debería de financiarlo", pero no es lógico que una vez aprobado el médico no tenga libertad para prescribir el mismo.
Sólo Jaume Puig se descartaba de esta postura, aportando que "aquí el problema es el Ministerio de Sanidad, que no ejerce bien sus funciones de coordinación".
José Luis Llisterrí le rebatía recordando grandes debates entre las autonomías como el que versa aún a día de hoy sobre el calendario vacunal único, "falta ponerse de acuerdo, pero falta sobre todo conseguir una despolitización de la Sanidad, comenzando por los propios gestores". Como propuesta alternativa, el presidente de SEMERGEN insistía en la importancia de realizar benchmarking para disminuir la variabilidad clínica y apostar por la eficiencia, incluyendo además programas de formación continuada para los médicos, en aspectos tan relevantes como la cronicidad, durante su jornada laboral, y una evaluación que acredite estos conocimientos.