mejor manejo del dolor y más medidas de prevención

EL MÉDICO INTERACTIVO
ESPAÑA
Expertos demandan un mejor manejo del dolor y más medidas de prevención para evitar que pacientes con dolor crónico se conviertan en dependientes

María Madrigal

El 60 por ciento de mayores de 65 años acude a consulta por dolor crónico, siendo las enfermedades reumáticas la principal causa del dolor. Así se ha puesto de manifiesto en una reunión organizada por la Fundación para la Investigación en Salud y la Fundación Grünenthal, coincidiendo con el Día Mundial del Dolor


Madrid (21-10-09).- Una mayor prevención y un mejor abordaje y manejo del dolor en pacientes con dolor crónico son los dos pilares fundamentales para disminuir el número de pacientes dependientes. En ello han coincidido los expertos reunidos en la II Reunión Nacional Dolor y Sociedad, que bajo el título “El Dolor y la Dependencia” se ha celebrado en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid. Organizada por la Fundación para la Investigación en Salud y la Fundación Grünenthal, la reunión coincide con el Día Mundial del Dolor, que se celebra el 20 de octubre, y este año quiere poner de manifiesto el importante vínculo que existe entre Dolor y Dependencia.

En la mesa “Dolor y Dependencia en la consulta”, expertos de distintos ámbitos de la medicina y el sistema sanitario han recalcado la importancia de un adecuado abordaje del dolor en pacientes con dolor crónico, así como la necesidad de contar con más programas de prevención para evitar o disminuir que esas patologías deriven en dependencia. Para situar la importancia que este síntoma tiene, Luis Aguilera, presidente de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (SemFYC), ha resaltado que “más del 60 por ciento de mayores de 65 años acude a consulta por dolor crónico, siendo las enfermedades reumáticas la principal causa de este dolor”.

Para Aguilera son dos los pilares fundamentales para disminuir la dependencia en este tipo de pacientes desde la Atención Primaria, “en primer lugar un control adecuado del dolor y en segundo más medidas de prevención”. Para el control del dolor el experto aseguró que “tenemos un arsenal terapéutico pero debe ir acompañado de otras medidas, como soporte emocional, atención a la familia y comunicación con el paciente, entre otras”. En cuanto a las medidas de prevención, Aguilera destacó que desde la consulta hay que tender a un envejecimiento saludable, donde la actividad es la clave, ya que “la mejor prevención del deterioro funcional es el ejercicio físico”, acompañado de “una nutrición equilibrada, evitar malos hábitos como el tabaquismo, etc.”.

El presidente de SemFYC señaló que “ante la complejidad del concepto de dependencia, para conseguir su prevención es necesario el desarrollo de políticas intersectoriales en base a salud e independencia” y recordó que “tenemos una oportunidad con el desarrollo de la Ley de Dependencia para hacerlo, insistiendo en las medidas de prevención. Hay que prevenir durante toda la vida porque siempre se está envejeciendo”.

El abordaje del dolor desde las unidades de Medicina Física y Rehabilitación también fue analizado por Lorenzo Jiménez, jefe del servicio de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital Ramón y Cajal de Madrid. En el caso de estos especialistas, tal y como reveló, “el dolor es un obstáculo muchas veces para hacer rehabilitación, por lo que es necesario contar con unidades del dolor que lo mitiguen para poder realizar el trabajo”. Este experto señaló la necesidad de distinguir entre dependencia temporal y permanente. “La temporal es importante, y nuestra labor es reducir al máximo ese periodo de dependencia, para lo cual tenemos que medir su dolor y su dependencia mediante un protocolo”, aseguró. Para concluir, Jiménez destacó que “la gestión asistencial de pacientes dependientes es un problema creciente, y la Medicina Física y Rehabilitación ayudan a conservar la autonomía de personas dependientes, pero para ello es necesario el trabajo multidisciplinar, un mayor esfuerzo en investigación sobre discapacidad y control del dolor y una mayor formación”.

Dependencia y tercera edad
Al ser la dependencia un término asociado a la tercera edad, Pedro Gil, presidente de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, destacó en su ponencia varios datos, como que dentro de 40 años, en el 2050, el 33 por ciento de la población será mayor de 65 años, que a partir de los 65 años se estima que se vive entre 18 y 20 años más y que de éstos, entre 6 y 8 años se viven en situación de dependencia, datos que en su opinión “deberían modificar nuestra forma de atención al paciente”. La prevención es la clave también para este experto, que denuncia que la ley no dedique nada a este aspecto, lo que en su opinión es destacable, “ya que se llama Ley de Promoción de la Autonomía Personal”. Respecto al abordaje del dolor en pacientes mayores, Gil incidió en que no se está realizando correctamente, en base al Informe del Imserso 2008 donde se indica que alrededor del 50 por ciento de personas entre 25 y 64 años tomaron fármacos contra el dolor en las dos últimas semanas, frente al 44 por ciento de mayores de 65 años, lo que puede ser consecuencia de que “hay pocas escalas de medición del dolor diseñadas para el anciano”.

En cuanto al coste económico de este dolor crónico, Julio López Bastida, del Servicio Canario de Salud, señaló que, aunque hay una gran escasez de estudios sobre este tema, se podría estimar que los costes totales en España, excluyendo los costes directos sanitarios, son en torno a los 13.400 millones de euros en el año 2005, costes que suponen el 1,5 por ciento del Producto Interior Bruto.
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