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La consejera de Salud de Andalucía afirma que la gestión tradicional “ha tocado techo” y apuesta por la innovación organizativa como pilar de sostenibilidad

Ana Montero

Mª Jesús Montero ha cifrado la deuda sanitaria de la comunidad autónoma de Andalucía en 809 millones de euros, asegurando que están terminando varias operaciones de saneamiento


Madrid (31-3-11).- En tribuna informativa organizada por la ANIS (Asociación Nacional de Informadores de la Salud), la consejera de Salud de Andalucía, Mª Jesús Montero, responsable de la Sanidad de 8,4 millones de andaluces, ha analizado la sostenibilidad del SNS en general, y del andaluz en particular, desde la óptica de la innovación organizativa y tecnológica y haciendo también especial hincapié en la investigación biomédica.

Para la consejera andaluza la sostenibilidad del sistema no depende de fórmulas que se ha demostrado que no funcionan, “depende de nuestra capacidad de innovación”, tal y como ha sentenciado, asegurando que los mecanismos tradicionales de gestión, a pesar de ser calificados como excelentes, “han tocado techo”.

Por esta razón, Montero ha insistido en que hay que caminar hacia un modelo organizativo definido por la asimetría, al estilo de “una red de pescador”, donde el trabajo en equipo sea una de las piezas fundamentales y donde sea posible contar con las potencialidades de todos los expertos para dejar fluir la innovación, “sin encorsetamientos”, añade.

En definitiva, un modelo donde la comparabilidad en lo distinto sea el reto, como ha manifestado la consejera, y que ha de estar acompañado de “decisiones valientes capaces de romper esquemas”, como la implantación del modelo de incentivos, donde el variable está ligado a la productividad y al rendimiento, o la reivindicación de la carrera profesional, que en Andalucía, por ejemplo, es reversible y se hace por acreditación de competencias.

Por otra parte, Mª Jesús Montero ha sostenido que si la innovación organizativa es el reto, “es necesaria la existencia de directivos que acompañen a ese nuevo modelo”. Un papel, el de director de centros sanitarios, que se está redefiniendo puesto que ahora debe primar su capacidad negociadora, de motivación y de evaluación profesional, siendo el propio modelo el que genere la libertad de gestión, de manera que “no hay nada escrito”, tal y como ha asegurado la consejera.

Otro de los temas que ha abordado la consejera es el despliegue de las nuevas tecnologías, con el ejemplo andaluz de “Salud Responde”, como herramienta multicanal disponible 24 horas al día, los 365 días del año, que elimina las trabas administrativas y que jugó un papel fundamental en el manejo de la gripe A, ya que a través de este sistema se resolvieron dudas e incluso existió prescripción enfermera. También la receta XXI, que tal y como ha comentado la consejera ha reducido en un 20 por ciento las consultas en AP; la estrategia digital Diraya; la teleasistencia y el telecuidado.

También ha insistido en la importancia de la investigación biomédica como uno de los pilares de la economía sostenible, asegurando que “hablar de riqueza y recursos es hablar de investigación y viceversa” y poniendo sobre la mesa la necesidad de “romper la barrera” para que el sector sanitario se vea como un sector de inversión y no de gasto.

Al hilo de este tema, Mª Jesús Montero ha señalado que la tarea asistencial y la investigadora “han de ser indisolubles”, asegurando que además de la necesidad de crear una red de grandes centros de excelencia e institutos de investigación, “hay que caminar a un trabajo de investigación, ligado a incentivos, para generar talento”.

Una investigación que tiene su principal “brecha”, como ha definido la consejera, en las alianzas con el capital privado, calificándolas de “tímidas, por el momento”. En este sentido, la responsable de Sanidad ha asegurado que “Andalucía es una oportunidad para salir de la crisis y merece la pena hacer una apuesta por ella”.

Ya en turno de debate, la consejera ha abordado temas como la Ley de muerte digna, asegurando que “la ley es un paso adelante” pero que el debate va a estar presente en la opinión pública durante mucho tiempo; también el modelo de prescripción enfermera, asegurando que “es más sencillo el de Andalucía que el que propone el Ministerio”; la acreditación, que pivotada sobre las comunidades autónomas; y la prescripción por principio activo y su generación de 1.000 millones de euros de ahorro, afirmando, en referencia a lo que se ha dado a conocer como “subasta” de medicamentos, que sólo trata de aprovechar el medicamento que es menos gravoso para las arcas públicas, dentro de un marco establecido, y añadiendo que están trabajando para llegar a un acuerdo con los colegios farmacéuticos.

Otro de los temas ha sido la colegiación voluntaria y su deseo para que se adopte en toda España, insistiendo en que “el garante de la seguridad del ciudadano debe ser la Administración”; también la deuda sanitaria de la comunidad, estimada en unos 809 millones de euros, y para lo que están terminando operaciones de saneamiento de deuda y de confirming; o el impacto que la obesidad infantil tiene en la Sanidad, alcanzando el 33 por ciento en Andalucía, “uno de los porcentajes más elevados de España”, tal y como ha indicado la consejera, por lo que ha hecho hincapié en la necesidad de tomar “decisiones inteligentes” que vayan en la línea de la alianza con la industria privada.

Preguntada por su opinión sobre la viabilidad económica del sistema, María Jesús Montero ha mostrado su rotunda confianza en la sostenibilidad del SNS. Asimismo, ha discrepado de quienes plantean un modelo de financiación sanitaria con fondos finalistas. En su opinión, las Comunidades Autónomas deben tener libertad para decidir la cantidad que destinan a Sanidad, siendo los ciudadanos los que luego pidan responsabilidades. Por otro lado, “el sistema de financiación finalista no ha logrado garantizar la sostenibilidad del modelo”, según ha comentado.

Al acto también han asistido Emilio Moraleda, ex presidente de Farmaindustria, quien ha asegurado que la accesibilidad de Mª Jesús Montero “abrió una etapa”, puesto que como ha comentado la comunicación con la consejería hasta su llegada “era prácticamente nula”; también Francisco Cañizares, presidente de ANIS, y José Miguel Ramil, consejero delegado de CITRE (Celgene Institute of Traslational Research Europe).


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