Condenado el Sermas por la muerte de una paciente a la que no detectaron un cáncer
El TSJM aprecia mala praxis al no haberle realizado las pruebas necesarias y lo condenan a pagar 127.000 eurosa los familiares de la mujer
F. J. BARROSO - Madrid - 29/11/2011
El Servicio Madrileño de Salud (Sermas) ha sido condenado por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid al pago de 127.000 euros en concepto de indemnización a los familiares de la paciente S.A.C., de 50 años, que falleció en 2006 tras no habérsele detectado un cáncer en la cavidad abdominal, según ha informado esta mañana la Asociación el Defensor del Paciente. Los magistrados han apreciado mala praxis al no haberle realizado las pruebas necesarias para haber detectado el cáncer que sufría.
La paciente ingresó el 11 de septiembre de 2006, tras sufrir un carcinoma epidermoide y haber sufrido un segundo trasplante renal. Estuvo durante un mes con la evolución de los dolores y con fiebre. Fue dada de alta el 27 de septiembre de 2006. El día 10 de octubre de ese mismo año volvió a ingresar en el hospital Gregorio Marañón y no fue dada de alta hasta seis días más tarde, pese a lo cual su estado no mejoró.
Llegaron a decir incluso los médicos, según el Defensor del Paciente, que todos los problemas que tenía la enferma eran de carácter psiquiátrico. El día 18, cuando se dirigía en una ambulancia al servicio de urgencias del hospital Gregorio Marañón, sufrió una parada cardiorrespiratoria, de la que ya no fue recuperada. El análisis posterior determinó que sufría un cáncer expandido y con metástasis por toda la cavidad abdominal.
Los jueces entienden que si se le hubiesen practicado las pruebas necesarias se podría haber evitado el padecimiento de la paciente y haber iniciado algún tratamiento para su recuperación.
Llegaron a decir incluso los médicos, según el Defensor del Paciente, que todos los problemas que tenía la enferma eran de carácter psiquiátrico. El día 18, cuando se dirigía en una ambulancia al servicio de urgencias del hospital Gregorio Marañón, sufrió una parada cardiorrespiratoria, de la que ya no fue recuperada. El análisis posterior determinó que sufría un cáncer expandido y con metástasis por toda la cavidad abdominal.
Los jueces entienden que si se le hubiesen practicado las pruebas necesarias se podría haber evitado el padecimiento de la paciente y haber iniciado algún tratamiento para su recuperación.
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