miércoles, 29 de febrero de 2012

Luis Rosado, consejero valenciano, apuesta por ahorrar 440 millones en Sanidad "sin recortes" :: El Médico Interactivo, Diario Electrónico de la Sanidad

El Médico Interactivo, Diario Electrónico de la Sanidad Luis Rosado, consejero valenciano, apuesta por ahorrar 440 millones en Sanidad "sin recortes"


Luis Rosado, consejero valenciano, apuesta por ahorrar 440 millones en Sanidad "sin recortes"

 
Valencia (01/03/2012) - E.P.

Rosado ha enumerado en la Comisión de Sanidad y Consumo de la Generalitat las once medidas destinadas a contener el gasto

El consejero valenciano de Sanidad, Luis Rosado, ha destacado que su departamento pretende ahorrar 440 millones de euros al año "sin ningún tipo de recorte en la prestación sanitaria". Por su parte, diputados de la oposición le ha replicado que, "si todo esto es verdad, el PP ha despilfarrado el dinero público" durante 16 años y han asegurado que, además, "llama la atención" que estos ajustes "no se hayan aplicado antes".

Rosado, que ha realizado estas declaraciones en la Comisión de Sanidad y Consumo de la Generalitat, ha destacado "el importante reto" que supone mantener el sistema sanitario "más universal, con mayor cartera de servicios y con el elevado nivel de frecuentación más alto de todos los países de nuestro entorno", en un momento de crisis, en el que "hay que acometer medidas drásticas en el control del gasto".

El consejero ha enumerado las once medidas destinadas a contener el gasto, que fueron presentadas por el vicepresidente del Consejo, José Císcar, el mismo día que el Decreto 1/2012.

"La falta de una financiación adecuada ha puesto en riesgo la sostenibilidad de nuestro sistema sanitario, ya que aunque se destine el 40 por ciento del presupuesto global a la Sanidad, en 2011 se han destinado 200 euros menos por habitante que la media estatal y hasta 500 menos que otras comunidades autónomas", ha manifestado.

También ha comentado que la comunidad es destino de población foránea cada año, que en algún momento hace uso del sistema sanitario. Este gasto "raramente es compensado", por lo que se van a establecer "mecanismos para cobrar de forma directa a aquellos pacientes que no acrediten su derecho a la prestación sanitaria".

A partir del pasado mes de enero también se cobra unas tasas por renovación de tarjeta sanitaria en caso de rotura o pérdida y por acreditación de centros sanitarios, un trámite que era gratuito a pesar de los gastos en gestión que generaba. Además, el Decreto 1/2012 contempla una reducción del 50 por ciento de la cuantía de la carrera profesional. "Una medida excepcional que revertirá en cuanto mejore la situación económica", ha apuntado.


Críticas de la oposición

La diputada de EUPV Marina Albiol ha recalcado que la comparecencia llega "muy tarde" porque "los recortes se anunciaron hace dos meses" y, respecto a la falta de financiación, le ha recordado que "el PP pactó esta financiación en su momento y ahora tiene la posibilidad de pactarla de nuevo". Asimismo, le ha pedido que "no se base en criterios economicistas cuando hable de Sanidad".

Por su parte, el parlamentario socialista Ignacio Subías ha criticado que Rosado y el PP "no reconocen la realidad ni los problemas" y le ha preguntado "por qué están tan seguros de estar en posesión de la verdad" cuando los ciudadanos, los profesionales sanitarios, la oposición y la ciudadanía "están saliendo a la calle para protestar". "Cree que lo hacen por gusto", le ha cuestionado Subías, quien le ha pedido la derogación del decreto porque, de lo contrario, "van a hacer que se retroceda años".

Por parte de Compromís, el diputado Juan Ponce ha comentado que algunas de las once medidas expuestas por el consejero son "adecuadas" y ha afirmado que "llama la atención" que estos ajustes "no se hayan aplicado antes" si es que se pueden realizar, idea en la que han coincidido todos los miembros de la oposición, quienes también han insistido en la progresiva privatización de la Sanidad valenciana.


Debate sobre la privatización

El consejero ha replicado que, con los años que su partido lleva gobernando, "si hubieran querido privatizar, ya estaría todo privatizado". También ha hecho hincapié, en referencia a los 16 años de despilfarro del PP, según la oposición, en que él no ha causado esto. "Es posible que no lo haya causado nadie", ha ironizado.

Rosado ha recordado que a lo largo de enero y febrero se han puesto en marcha en los departamentos de salud diversas medidas enfocadas a la eficiencia. Se ha apostado por la economía de escala y centralización de servicios, como cocinas, suministros, mantenimiento, lavandería.

Otra forma de gestión va a suponer la optimización de los recursos de quirófanos de la red pública, ha explicado, y ha señalado que se va a reordenar la actividad en mañana y tarde, y para ello se ha propuesto evitar la derivación del plan de choque de cataratas a centros concertados para asumirlos en los centros públicos. Además, ha explicado que se va a revisar toda la actividad externalizada, con el objetivo de revisar contratos y unificar servicios para varios departamentos.

De estas once medidas, hay dos destinadas específicamente a la gestión de farmacia y productos sanitarios. El gasto en farmacia extrahospitalaria supone el 28 por ciento del presupuesto de la Consejería de Sanidad. El ahorro en este campo se va a conseguir introduciendo la central de compras en la adquisición de medicamentos para más de un centro sanitario. De otro lado, se van a implantar las guías de intercambio terapéutico en los hospitales para mejorar la prescripción.

También está previsto implantar una nueva gestión extrahospitalaria, que revertirá en los centros de Atención Primaria, Especializada y centros sociosanitarios privados. De este modo, se revisarán los historiales farmacoterapéuticos de pacientes crónicos y polimedicados, cerca de 22.000 en Hospitalaria, 300.000 en Primaria y 4.500 en centros privados sociosanitarios, lo que supondrá un ahorro de 200.000 euros por cada 1.000 pacientes.

En cuanto a las oficinas de farmacia se ha establecido la nueva figura de pronto-pago, que permitirá a las farmacias cobrar los primeros 150.000 euros facturados por cada oficina. Como última medida de farmacia, se va a estudiar la posibilidad de que grandes centros sociosanitarios privados accedan a las compras de fármacos y productos sanitarios a través de centrales de compras de la Consejería, en lugar de las oficinas de farmacia, para ahorrar costes en intermediarios.

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