Expertos en Telemedicina instan a la Administración a instaurar "sistemas amigables en escenarios útiles" que redunden en el beneficio sanitario para el paciente
Madrid (21/11/2012) - Mónica de Haro
La Fundación Salud 2000 presenta el informe "Telemedicina: Bases para la futura regulación de un mercado emergente", avalado por un grupo de expertos que asegura que con el ejercicio de la Medicina a distancia no sólo se contribuye a mantener el Sistema Nacional de Salud, mejorando la atención del paciente y reduciendo costes, sino que también se favorece la equidad de la asistencia sanitaria en cualquier parte del mundo
Según recoge el Informe "Telemedicina: Bases para la futura regulación de un mercado emergente" de la Fundación Salud 2000, que pretende hacer una aproximación a esta nueva forma de trabajo, la Telemedicina no está aún integrada en los sistemas de salud, entre otras cuestiones porque carece de una regulación apropiada. Por este motivo consideran que es necesario instar a la Administración sanitaria para que apueste por su pronta regulación.
La ausencia de instrumentos legales específicos en España que avalen la práctica de la Telemedicina puede constituir un lastre que frene o retrase la expansión de esta práctica en nuestro país.
"Resulta conveniente hacer una llamada de atención a la Administración sanitaria para que apueste por una pronta regulación de esta actividad que añade valor a la propia intervención médica al tiempo que mejora la adherencia al tratamiento del ciudadano al convertirse en gestor de su salud", explica Carmen González Madrid, presidenta de la Fundación Salud 2000.
Según el Dr. Fernando Abellán, autor del informe y jurista experto en Derecho Sanitario, "la sociedad está necesitada de estímulos al crecimiento, y en este sentido, la Telemedicina supone un impulso para reanimar el tejido económico ya que repercute en un ahorro muy sensible de los costes sanitarios". En concreto, según los especialistas, la Administración sanitaria ahorraría un 16 por ciento (sin contar las ambulancias), y hasta un 20 por ciento de su presupuesto.
En cuanto al coste-efectividad de este sistema, aunque todavía no hay estudios ni datos oficiales, el prof. Pablo Gil-Loyzaga, director de la Cátedra Extraordinaria Innovación y Salud F.G-UCM, confirma que "algunos de los proyectos actualmente en desarrollo se han amortizado a los seis primeros meses de implantación del sistema".
La Telemedicina se puede aplicar a todas las especialidades médicas y abarca desde la informatización de los historiales clínicos de los pacientes, las teleconsultas o el telediagnóstico, hasta las intervenciones robotizadas. Los servicios más extendidos son: telerradiología, telepatología, teledermatología, teleconsulta, televigilancia, telecirugía y teleoftalmología.
Los expertos recuerdan que su uso no aumenta la distancia entre el profesional y el paciente, sino que supone "un apoyo útil, práctico y real". De modo que se asegura el seguimiento continuado del paciente, incrementando algunas atenciones, mateniendo la atención presencial "cuando sea necesario", e incluso se puede prevenir la aparición de complicaciones en pacientes crónicos.
Asimismo, señalan que hay que aplicar la Telemedicina en los escenarios adecuados "con opciones de utilidad y reducción de costes, y pensando siempre en el beneficio sanitario del paciente", explica Gil-Loyzaga.
La televigilancia y telerradiología (los más consolidados según la Comisión Europea) supondrían la descongestión de los centros sanitarios, el seguimiento de los crónicos desde su domicilio, la reducción de listas de espera y desplazamientos, evitar la repetición de pruebas, mejorar la comunicación entre centros y profesionales sanitarios, etc.
La telefarmacia es, a juicio de los participantes, otro gran avance derivado de estas tecnologías porque permite al enfermo seguir su tratamiento sin necesidad de trasladarse continuamente a la consulta médica ya que gracias a las nuevas herramientas el farmacéutico puede seguir las pautas terapéuticas indicadas por el médico.
Hay muchas otras ventajas derivadas del buen uso de estas nuevas tecnologías cotidianas. Aparte de asegurar la equidad del sistema sanitario y permitir el acceso a los especialistas, hace posible la interacción hospitalaria y genera un archivo de imágenes a disposición de los profesionales. También favorece el intercambio de conocimientos y contribuye a la formación continuada de médicos, técnicos especialistas en radiodiagnóstico y enfermeras... pero, sobre todo, la Telemedicina puede salvar vidas.
"Mediante una tele-ecografía diagnostiqué a un paciente del Hospital la Fuenfría de Cercedilla un problema en la aorta. Inmediatamente le llevaron al Hospital Clínico de Madrid y le operaron de urgencia. Ese paciente salvó su vida por la inmediatez de la tele-ecografía al momento", explica el Dr. Ángel Domínguez, jefe de Servicio del Departamento de Radiodiagnóstico del Hospital de Torrejón.
Para el portavoz de la Fundación Comitas Telemedicina Solidaria, José Manuel Pena, que ha llevado a cabo proyectos para acercar la ayuda médica especializada a las zonas más desfavorecidas como Mauritania y la Selva de Colombia: "La Telemedicina es el único medio disponible para conseguir expandir la asistencia médica a todos los niveles, independientemente del status social y del lugar de residencia".
Actualmente existe una red de transmisión de información, datos y conocimientos que engloba a unas 60 clínicas y hospitales entre los que destaca el Hospital Central de la Defensa, pionero en Telemedicina.
Finalmente desde Fundación Salud 2000 confían en que poco a poco se sigan introduciendo cambios en los modelos asistenciales que contribuyan a mantener estado de bienestar.
La ausencia de instrumentos legales específicos en España que avalen la práctica de la Telemedicina puede constituir un lastre que frene o retrase la expansión de esta práctica en nuestro país.
"Resulta conveniente hacer una llamada de atención a la Administración sanitaria para que apueste por una pronta regulación de esta actividad que añade valor a la propia intervención médica al tiempo que mejora la adherencia al tratamiento del ciudadano al convertirse en gestor de su salud", explica Carmen González Madrid, presidenta de la Fundación Salud 2000.
Según el Dr. Fernando Abellán, autor del informe y jurista experto en Derecho Sanitario, "la sociedad está necesitada de estímulos al crecimiento, y en este sentido, la Telemedicina supone un impulso para reanimar el tejido económico ya que repercute en un ahorro muy sensible de los costes sanitarios". En concreto, según los especialistas, la Administración sanitaria ahorraría un 16 por ciento (sin contar las ambulancias), y hasta un 20 por ciento de su presupuesto.
En cuanto al coste-efectividad de este sistema, aunque todavía no hay estudios ni datos oficiales, el prof. Pablo Gil-Loyzaga, director de la Cátedra Extraordinaria Innovación y Salud F.G-UCM, confirma que "algunos de los proyectos actualmente en desarrollo se han amortizado a los seis primeros meses de implantación del sistema".
La Telemedicina se puede aplicar a todas las especialidades médicas y abarca desde la informatización de los historiales clínicos de los pacientes, las teleconsultas o el telediagnóstico, hasta las intervenciones robotizadas. Los servicios más extendidos son: telerradiología, telepatología, teledermatología, teleconsulta, televigilancia, telecirugía y teleoftalmología.
Los expertos recuerdan que su uso no aumenta la distancia entre el profesional y el paciente, sino que supone "un apoyo útil, práctico y real". De modo que se asegura el seguimiento continuado del paciente, incrementando algunas atenciones, mateniendo la atención presencial "cuando sea necesario", e incluso se puede prevenir la aparición de complicaciones en pacientes crónicos.
Asimismo, señalan que hay que aplicar la Telemedicina en los escenarios adecuados "con opciones de utilidad y reducción de costes, y pensando siempre en el beneficio sanitario del paciente", explica Gil-Loyzaga.
La televigilancia y telerradiología (los más consolidados según la Comisión Europea) supondrían la descongestión de los centros sanitarios, el seguimiento de los crónicos desde su domicilio, la reducción de listas de espera y desplazamientos, evitar la repetición de pruebas, mejorar la comunicación entre centros y profesionales sanitarios, etc.
La telefarmacia es, a juicio de los participantes, otro gran avance derivado de estas tecnologías porque permite al enfermo seguir su tratamiento sin necesidad de trasladarse continuamente a la consulta médica ya que gracias a las nuevas herramientas el farmacéutico puede seguir las pautas terapéuticas indicadas por el médico.
Hay muchas otras ventajas derivadas del buen uso de estas nuevas tecnologías cotidianas. Aparte de asegurar la equidad del sistema sanitario y permitir el acceso a los especialistas, hace posible la interacción hospitalaria y genera un archivo de imágenes a disposición de los profesionales. También favorece el intercambio de conocimientos y contribuye a la formación continuada de médicos, técnicos especialistas en radiodiagnóstico y enfermeras... pero, sobre todo, la Telemedicina puede salvar vidas.
"Mediante una tele-ecografía diagnostiqué a un paciente del Hospital la Fuenfría de Cercedilla un problema en la aorta. Inmediatamente le llevaron al Hospital Clínico de Madrid y le operaron de urgencia. Ese paciente salvó su vida por la inmediatez de la tele-ecografía al momento", explica el Dr. Ángel Domínguez, jefe de Servicio del Departamento de Radiodiagnóstico del Hospital de Torrejón.
Para el portavoz de la Fundación Comitas Telemedicina Solidaria, José Manuel Pena, que ha llevado a cabo proyectos para acercar la ayuda médica especializada a las zonas más desfavorecidas como Mauritania y la Selva de Colombia: "La Telemedicina es el único medio disponible para conseguir expandir la asistencia médica a todos los niveles, independientemente del status social y del lugar de residencia".
Actualmente existe una red de transmisión de información, datos y conocimientos que engloba a unas 60 clínicas y hospitales entre los que destaca el Hospital Central de la Defensa, pionero en Telemedicina.
Finalmente desde Fundación Salud 2000 confían en que poco a poco se sigan introduciendo cambios en los modelos asistenciales que contribuyan a mantener estado de bienestar.
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