Tribuna
Retos de las TIC en lo sanitario
Movilidad y gestión de datos en la nube serán los grandes retos de las tecnologías de la información en el ámbito sanitario, un sector especialmente sensible a las ventajas que estos desarrollos aportan.
Manuel Frowein. Director general de Carestream Health Iberia | 26/02/2013 00:00
Responder a la cuestión de cuáles son los retos de futuro de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) en el sector sanitario es clave para el futuro de la mayoría de las empresas de tecnología sanitaria que están inmersas en el desarrollo de nuevas tecnologías y dispositivos electrónicos. Hasta el momento, las empresas punteras del entorno han creado y potenciado softwares y herramientas de gestión que han permitido al sector de las imágenes médicas mejorar la productividad del personal médico, incrementar la velocidad y precisión diagnóstica, aumentar la satisfacción de los pacientes y la calidad del servicio que se presta. Ahora, nos encontramos a las puertas del futuro.
Para avanzar en esta materia y debatir los retos de futuro que afronta el mercado, Gartner (consultora de investigación y asesoría en TIC) ha esbozado algunas de las tendencias que los especialistas creen que tendrán un mayor impacto durante el periodo 2013-2015. Algunas de las ellas, hacen referencia a las medidas en las que actualmente la industria está centrando todos sus esfuerzos; sin embargo, las nuevas propuestas sugieren nuevos retos para el sector.
Sin duda, éste es un gran punto de partida para iniciar un debate y reflexión sobre las tendencias que se darán en el mercado durante los próximos años. Algunas de las líneas de trabajo sobre las que se ha debatido son las siguientes:
1. Nivel de consumo y tabletas: el creciente uso de las tabletas por parte de profesionales médicos exigirá a las empresas que intensifiquen y mejoren sus programas en temas de seguridad, perfiles de acceso y uso así como la integración planeada.
2. Centros de datos de capacidad infinita: su objetivo será alcanzar un crecimiento estable y manejar más datos con un menor coste.
3. Gestión de recursos: las organizaciones deberán hacer una gestión mucho más eficiente y aumentar el nivel de rigor empresarial si quieren optimizar sus beneficios.
4. Movilidad: el crecimiento del sector de los móviles impulsará un cambio de paradigma que ya se está dando con la existencia en el mercado de dispositivos móviles capaces de avanzar en el diagnóstico por imagen. La seguridad será una uno de los pilares sobre los que habrá que trabajar más.
5. Las nubes híbridas: las empresas ofrecen sus servicios sobre las soluciones basadas en la nube pero, en el futuro, deberán aprovechar los beneficios que les reportarán las nubes privadas e híbridas.
6. Fabric data centers: los centros de trabajo deberán integrar sus diferentes elementos TIC, lo que supondrá una optimización de los flujos de trabajo.
7. Complejidad TIC: las empresas tendrán que examinar con un mayor rigor sus presupuestos ya que la complejidad de los nuevos sistemas implicará unos mayores gastos para las entidades que deberán compensarse con incrementos de eficiencia.
8. Big data: los retos de la gestión y el uso de grandes cantidades de datos aumentará, haciendo del almacenamiento virtual una prioridad.
9. Fin de la era de los mostradores de servicio: una demanda de servicio cada vez más inmediata por parte de los usuarios que unida a la creciente necesidad de ofrecer un soporte real, hará posible la transición a equipos que aumenten la productividad empresarial.
10. Redes virtuales y software definido: la separación de hardware y software, el incremento de la automatización, la simplificación de los diseños y otros factores relacionados harán posible un cambio entre los sistemas, las personas y las relaciones entre ambos.
Estas tendencias, que hoy se escriben como futuro en un papel, quedarán reflejadas en poco tiempo en nuevos dispositivos y tecnologías que no sólo serán utilizadas por centros de salud para la realización de pruebas médicas o por el propio personal para evaluar un examen diagnóstico.
La realidad ya nos dice que pueden ser utilizadas por los pacientes para ver sus pruebas o para gestionar sus propios informes médicos.
Una realidad
El uso de esta tecnología no es algo de lo que se espere su evolución en el futuro sino que ya es una realidad. Hoy en día, los médicos ya pueden utilizar las tabletas y smartphones como herramientas de trabajo desde las que analizar un diagnóstico de forma eficiente o ver el resultado de una prueba médica. Un desarrollo que llega incluso al punto de que el paciente puede acceder a sus propios exámenes médicos en la nube y sin necesidad de pasar por la consulta del médico o especialista para verlos.
En este terreno, la tendencia del sector dirige sus esfuerzos para los próximos años centrada en avanzar en estas dos líneas: la movilidad, fundamental si se quiere afrontar con éxito el uso de las nuevas tecnologías en el sector sanitario, ya que los dispositivos móviles serán capaces de avanzar en el diagnóstico por imagen aunque su gran problema será la seguridad, uno de los aspectos sobre los que habrá que trabajar más, y la nube, que constituirá la otra línea de actuación dado que una adecuada gestión de los datos de los pacientes y una optimización de los recursos será clave si se quiere asegurar el futuro de esta tecnología.
Para avanzar en esta materia y debatir los retos de futuro que afronta el mercado, Gartner (consultora de investigación y asesoría en TIC) ha esbozado algunas de las tendencias que los especialistas creen que tendrán un mayor impacto durante el periodo 2013-2015. Algunas de las ellas, hacen referencia a las medidas en las que actualmente la industria está centrando todos sus esfuerzos; sin embargo, las nuevas propuestas sugieren nuevos retos para el sector.
Sin duda, éste es un gran punto de partida para iniciar un debate y reflexión sobre las tendencias que se darán en el mercado durante los próximos años. Algunas de las líneas de trabajo sobre las que se ha debatido son las siguientes:
1. Nivel de consumo y tabletas: el creciente uso de las tabletas por parte de profesionales médicos exigirá a las empresas que intensifiquen y mejoren sus programas en temas de seguridad, perfiles de acceso y uso así como la integración planeada.
2. Centros de datos de capacidad infinita: su objetivo será alcanzar un crecimiento estable y manejar más datos con un menor coste.
3. Gestión de recursos: las organizaciones deberán hacer una gestión mucho más eficiente y aumentar el nivel de rigor empresarial si quieren optimizar sus beneficios.
4. Movilidad: el crecimiento del sector de los móviles impulsará un cambio de paradigma que ya se está dando con la existencia en el mercado de dispositivos móviles capaces de avanzar en el diagnóstico por imagen. La seguridad será una uno de los pilares sobre los que habrá que trabajar más.
5. Las nubes híbridas: las empresas ofrecen sus servicios sobre las soluciones basadas en la nube pero, en el futuro, deberán aprovechar los beneficios que les reportarán las nubes privadas e híbridas.
6. Fabric data centers: los centros de trabajo deberán integrar sus diferentes elementos TIC, lo que supondrá una optimización de los flujos de trabajo.
7. Complejidad TIC: las empresas tendrán que examinar con un mayor rigor sus presupuestos ya que la complejidad de los nuevos sistemas implicará unos mayores gastos para las entidades que deberán compensarse con incrementos de eficiencia.
8. Big data: los retos de la gestión y el uso de grandes cantidades de datos aumentará, haciendo del almacenamiento virtual una prioridad.
9. Fin de la era de los mostradores de servicio: una demanda de servicio cada vez más inmediata por parte de los usuarios que unida a la creciente necesidad de ofrecer un soporte real, hará posible la transición a equipos que aumenten la productividad empresarial.
10. Redes virtuales y software definido: la separación de hardware y software, el incremento de la automatización, la simplificación de los diseños y otros factores relacionados harán posible un cambio entre los sistemas, las personas y las relaciones entre ambos.
Estas tendencias, que hoy se escriben como futuro en un papel, quedarán reflejadas en poco tiempo en nuevos dispositivos y tecnologías que no sólo serán utilizadas por centros de salud para la realización de pruebas médicas o por el propio personal para evaluar un examen diagnóstico.
La realidad ya nos dice que pueden ser utilizadas por los pacientes para ver sus pruebas o para gestionar sus propios informes médicos.
Una realidad
El uso de esta tecnología no es algo de lo que se espere su evolución en el futuro sino que ya es una realidad. Hoy en día, los médicos ya pueden utilizar las tabletas y smartphones como herramientas de trabajo desde las que analizar un diagnóstico de forma eficiente o ver el resultado de una prueba médica. Un desarrollo que llega incluso al punto de que el paciente puede acceder a sus propios exámenes médicos en la nube y sin necesidad de pasar por la consulta del médico o especialista para verlos.
En este terreno, la tendencia del sector dirige sus esfuerzos para los próximos años centrada en avanzar en estas dos líneas: la movilidad, fundamental si se quiere afrontar con éxito el uso de las nuevas tecnologías en el sector sanitario, ya que los dispositivos móviles serán capaces de avanzar en el diagnóstico por imagen aunque su gran problema será la seguridad, uno de los aspectos sobre los que habrá que trabajar más, y la nube, que constituirá la otra línea de actuación dado que una adecuada gestión de los datos de los pacientes y una optimización de los recursos será clave si se quiere asegurar el futuro de esta tecnología.
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