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Equilibrio entre buenos resultados en salud y balance económico, claves de la gestión sanitaria de éxito

Santander (31-2/06/2014) - Redacción

Se celebran las jornadas "La Gestión en Tiempos de Incertidumbre: 18 experiencias de éxito", organizadas por SEDISA, en las que se ha puesto de manifiesto que  la eficiencia en Sanidad no depende de la titularidad de los centros sanitarios sino de una gestión eficiente y profesionalizada

Aportar soluciones, tomar medidas apoyados en una gestión profesional e innovadora, conseguir los mejores resultados en salud, en un entorno de contención del gasto, buscando máxima eficiencia, implicar a los profesionales sanitarios y conseguir la satisfacción de los ciudadanos son los retos principales a los que se enfrentan los directivos de la salud a diario. En este marco, centros de toda España y muy diferentes, como el Hospital Reina Sofía de Córdoba, el Hospital Universitario Clínico San Carlos de Madrid, el Hospital Universitario de Cruces de Bilbao, el Consorci Sanitari de Terrassa y el Hospital Moncloa de Madrid tienen en común la eficiencia y la calidad asistencial, a lo que solo es posible llegar a través de la profesionalización de los directivos de la salud y gerentes de hospital.

"La gestión sanitaria de éxito es consecuencia del equilibrio entre buenos resultados en salud y balance económico y esto es posible pese a la situacion económica y la incertidumbre del sector", explica César Pascual Fernández, vicepresidente de SEDISA y director gerente del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. "En esta línea, la titularidad, pública o privada, de los centros sanitarios no es lo que principalmente condiciona los resultados en eficiencia de la gestión, siendo imprescindible una correcta supervisión por parte del financiador".

Experiencias en gestión llevadas a cabo en centros de todo el país y contadas por sus directores gerentes, es el contenido principal de las II Jornadas de Gestión Sanitaria, que, bajo el título La Gestión en Tiempos de Incertidumbre: 18 experiencias de éxito, se estaban celebrando al cierre de esta edición en el Palacio de Congresos de Santander. Organizadas por la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA) y la Fundación SEDISA, con el apoyo del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, la Universidad de Cantabria y el Máster Universitario en Dirección y Gestión Servicios Sanitarios y Sociales, en ellas se están dando cita alrededor de 250 directivos de la salud de toda España.

En el contexto económico actual, con una deuda pública total alta, un gasto sistemático de más de lo que se ingresa por el Estado y las comunidades autónomas, la falta de liquidez y una baja I+D+i, en palabras de Joaquín Estévez Lucas, presidente de SEDISA, "es necesario realizar más gestión clínica y de procesos para el uso adecuado de la tecnología y de medicamentos, pero también más promoción de la salud y de la prevención de la enfermedad y más atención a la cronicidad".

A este respecto, César Pascual, coordinador de las Jornadas, hace hincapié en la necesidad de que "la actividad asistencial sea transparente, de forma que, además de los resultados económicos, los resultados en salud de cada centro sean públicos".

Según se explica en una nota de prensa, en el caso del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, su director gerente explica que se trata de un centro de gestión pública directa tradicional. "El centro no ha sufrido recortes presupuestarios en estos años de crisis, sino que se ha realizado un saneamiento financiero eliminando completamente la deuda (200 millones) e incrementando el presupuesto (en más de 60 millones de euros) para paliar el déficit, de forma que dispone de presupuesto real", señala. "Ello nos ha permitido introducir mecanismos de gestión dirigidos a aumentar la eficiencia al mismo tiempo que la calidad, ya que nos ha situado a salvo de la presión insoportable de la deuda y los recortes y dedicarnos a lo importante: la mejora de los procesos, reduciendo actividad innecesaria". Así el director gerente del Hospital Marqués de Valdecilla destaca que se han reordenado camas ajustándolas con el hospital de Liencres y redefinido recursos que no aportaban utilidad, se ha aprovechado la consolidación de la plantilla sanitaria y se están redistribuyendo y ajustando las funciones de la misma, de forma que "los hechos demuestran lo acertado de nuestra apuesta".

Además del modelo de gestión pública directa, existen otros modelos, como la gestión pública indirecta (mediante empresas privadas con o sin ánimo de lucro, a través de concesiones administrativas o prestación de servicios), la gestión privada mediante la externalización y la gestión privada realizada a través de aseguradoras.

Innovación en gestión

La innovación es, sin duda, una "aliada" para el éxito en la gestión sanitaria, "pero tiene que ser transformadora, desde visiones diferentes para orientar a buenos resultados, de forma que no debe ser un objetivo, sino una forma de trabajar", tal y como explica Manuel González Suárez, director gerente de los Hospitales Universitarios Virgen Macarena- Virgen del Rocío de Sevilla. Este profesional lidera, en este sentido, un caso de éxito en el marco de los modelos de gestión sanitaria pública directa, probablemente, con la integración de ambos centros, el hospital de este tipo más grande de toda Europa.

Con la centralización de compras de sendos hospitales, González Suárez pone de manifiesto haber conseguido "no solo más eficiencia económica, con una repercusión directa en disminución del gasto en farmacia y en organización, sino también una mayor homologación de procesos clínicos y sanitarios que se traduce en una mayor calidad asistencial".

En Andalucía, según González Suárez, "el modelo de gestión más utilizado es la gestión pública directa dentro del marco estatutario, de forma que no hay concesiones y los conciertos externos son mínimos. Éstos no llegan al 0,3 por ciento en los Hospitales Universitarios Virgen Macarena- Virgen del Rocío". Asimismo, añade que "Andalucía está entre las cuatro comunidades autónomas con un menor gasto sanitario por habitante, menos de 1.000 euros, y con unos excelentes resultados en salud, lo que demuestra la elevada eficiencia de la Sanidad pública andaluza".

El éxito de la gestión sanitaria depende, en cualquier caso, "del equipo directivo, que debe innovar y poner en marcha experiencias de otros hospitales o incluso de otros sectores, como el automovilismo y la Fórmula 1, en cuanto al funcionamiento en equipo", explica César Pascual. En esta línea, en los últimos años, el término Gestión Clínica ha cobrado un gran papel en el objetivo de combinar eficiencia y calidad asistencial en pro de ofrecer a los ciudadanos la mejor atención sanitaria. "La gestión clínica implica a políticos, directivos y profesionales de la Sanidad. Se trata de establecer un sistema que facilite la participación de los clínicos en la mejora sistemática de la eficiencia, mediante el desarrollo de prácticas de gestión adecuadas", explica Joaquín Estévez. Respecto a los profesionales sanitarios, el presidente de SEDISA destaca que se debe incorporar un sistema de retribución equitativa, con incentivos ligados al esfuerzo realizado y la mejora de la eficiencia.

Profesionalización de los directivos

Independientemente del modelo de gestión, los expertos abogan por que el perfil de directivo o gestor sanitario se establezca como el de un profesional de la gestión y no como un cargo político, "con una selección basada en el explícito diseño del puesto de trabajo, estando sometido a una evaluación objetiva basada en resultados asistenciales, económicos, de participación profesional y de liderazgo social, dentro de un código de buena gestión directiva", hace hincapié Joaquín Estévez.

Sin embargo, según el Informe Profesionalización de los Directivos de la Salud, realizado por SEDISA, siete de cada 10 directivos de la salud cree que la selección del directivo sanitario depende de su afinidad política en mayor medida que de su experiencia en gestión, gerencial y/ o clínica, y solo el 53 por ciento afirma haber dedicado tiempo a la formación en habilidades directivas durante el último año (siendo entre 0 y el 15 por ciento el tiempo dedicado a formación a lo largo de un año) y más del 44 por ciento hace más de cinco años que no se ha formado en esta área. Los datos se complican aún más si se tiene en cuenta que sólo el 17 por ciento de los directivos de la salud en España manifiesta tener autonomía en la toma de decisiones estratégicas.

En la misma línea, es fundamental que las Autoridades Sanitarias con competencias en la formación apoyen los proyectos de profesionalización de los directivos sanitarios, tanto en el establecimiento de una Carrera Profesional, como de un diccionario de competencias y habilidades que sirva de guía en este sentido. "En el seno del desarrollo de la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias  de 2003 y en el Foro Profesional del Sistema Nacional de Salud debe estudiarse la posibilidad de que la Gestión Sanitaria sea considerada como un área de Capacitación Profesional y que SEDISA ejerza el asesoramiento adecuado, a través de una comisión de acreditación en el seno de la Sociedad", explica Joaquín Estévez. Ésta fue, de hecho, una de las propuestas que SEDISA realizó durante su comparecencia en la Subcomisión de Sanidad del Congreso de los Diputados el pasado mes de junio.