“ya no vale más de lo mismo para afrontar los retos demográficos y epidemiológicos del siglo XXI”

EL MÉDICO INTERACTIVO
ESPAÑA
El consejero vasco de Sanidad propone una reforma integral del sistema sanitario porque “ya no vale más de lo mismo para afrontar los retos demográficos y epidemiológicos del siglo XXI”

Redacción

Rafael Bengoa plantea diez líneas estratégicas para un “cambio de rumbo” en la Sanidad vasca


Vitoria-Gasteiz (25-6-09).- “Más de lo mismo ya no es solución. Hace falta un cambio de rumbo para que la Sanidad se adapte a las necesidades reales, para afrontar los retos demosgráficos y epidemiológicos del siglo XXI”. El consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, ha empleado estas palabras para sentar las bases de la reforma sanitaria que, junto a su equipo, pretende impulsar y que tiene en la atención al paciente crónico uno de sus pilares básicos. “Es el momento –dijo- de dar un cambio de rumbo para ampliar la cartera de servicios con nuevos programas de prevención y promoción de la salud; planes para la atención temprana, recuperación y mejora de la calidad de vida de los enfermos crónicos y una apuesta decidida por la investigación y la innovación sanitaria”.


Bengoa ha comparecido ante la comisión de Sanidad y Consumo del Gobierno vasco para ofrecer detalles sobre los planes y proyectos que su equipo pretende impulsar en los próximos cuatro años. En su intervención, ha defendido la necesidad de impulsar la modernización tecnológica de la red, dar un nuevo impulso a la salud pública y propiciar nuevos mecanismos que mejoren la participación de los profesionales, los pacientes y los ciudadanos. “Me preocupa asegurar una gestión eficiente, rigurosa y éticamente intachable de los numerosos recursos públicos que emplea nuestro Servicio Vasco de Salud, que se cifran en 3.500 millones de euros”, ha añadido.


El plan de actuación presentado en la Cámara de Vitoria se divide en diez áreas estratégicas de intervención, que contemplan la puesta en marcha de diferentes proyectos. “Nos encontramos en una situación financiera complicada”, ha reconocido. “Los recursos son limitados y, por lo tanto, el planteamiento que les hago responde a una necesidad de priorizar las acciones y de prudencia a la hora de comprometer objetivos y mejoras”.

Ante esta situación, el titular de Sanidad y Consumo ha defendido la necesidad de entender la inversión en salud como motor de desarrollo social y económico al considerar que esos fondos favorecen la productividad, competitividad y riqueza de un país. Ha abogado por incrementar en un 1 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) la inversion pública en salud, actualmente en el 5 por ciento, “para homologarnos con otros países europeos”, en la segunda mitad de la legislatura, “cuando se produzca una vuelta a la situación de crecimiento económico”. Ese dinero extra, dijo, “no se empleará en hacer más de lo mismo”, sino en poner en marcha los planes y proyectos que propiciarán el “cambio de rumbo” necesario en la Sanidad vasca.

El fomento de la prevención figura como una de las prioridades del Departamento, que se ha propuesto incidir proactivamente sobre los determinantes de salud, factores de riesgo y estilos de vida saludables. Sanidad impulsará, por ello, un nuevo Plan de Salud que analizará los factores de riesgo de la población vasca y las desigualdades que aún persisten; y creará una Agencia Vasca de Salud Pública para favorecer la colaboración institucional y el desarrollo en colaboración con los ayuntamientos de un programa de intervención en colectivos de personas de riesgo. Los fumadores serán uno de ellos. El nuevo equipo de Sanidad concibe la lucha contra el tabaco como un reto prioritario, por lo que estudiará el coste y la viabilidad de subvencionar los tratamientos para ayudar a dejar de fumar.

El grupo de Bengoa también se propone potenciar la autonomía del paciente. Para lograrlo, impulsará la formación de foros de afectados, pulsará periódicamente la opinion de los ciudadanos y ampliará el derecho a una segunda ópinión.

El auténtico eje de la acción de Sanidad será, sin embargo, la atención al paciente crónico, generador del 80 por ciento de las interacciones con el sistema de salud y consumidor del 77 por ciento del gasto sanitario. El departamento promoverá programas de apoyo y seguimiento de personas mayores a través del desarrollo de la enfemería comunitaria, la cooperación del departamento con los servicios sociales y el uso normalizado de las nuevas tecnologías.

En el ámbito asistencial, el consejero se ha comprometido a desarrollar organizaciones sanitarias integradas, mejorando la continuidad de los cuidados, lo que en la práctica supondrá una forma de trabajar más práctica y coordinada entre la Atención Primaria, los hospitales y los servicios sociales. El titular de Sanidad y Consumo también ha apostado por impulsar las tecnologías que faciliten y mejoren la práctica clínica y el autocuidado de los pacientes. En este sentido, uno de los planes más inmediatos es el Centro de Contacto y Servicios de Salud Multicanal (vía teléfono, Internet y televisión digital), que entrará en servicio a finales de este año. Las instalaciones brindarán al usuario información y consejo medico personalizado y servirán de apoyo a los programas de gestión de enfermedades crónicas.


Rafael Bengoa se ha comprometido a promocionar el liderazgo y la participación de los profesionales de la salud, impulsar la investigación y la innovación mediante la apertura en Bilbao y San Sebastián de sendos institutos de investigación biosanitaria, y defender los derechos de los consumidores, lo que incluye fortalecer su asociacionismo. Además, el nuevo Departamento de Sanidad y Consumo garantizará el buen gobierno en la gestión sanitaria pública mediante la promoción de la profesionalidad en los puestos directivos y la transparencia de las decisiones relevantes.