Liderazgo, ética y conciencia social, competencias clave del gestor sanitario
Durante la segunda jornada del 21CNH se han dado a conocer proyecto ‘Validación Española del Directorio Internacional de Competencias en Gestión Sanitaria’, un informe elaborado por SEDISA que detalla las cualidades que tiene que tener todo directivo sanitario.
El liderazgo y la conducta ética y conciencia social son dos de las principales competencias que deben tener los directivos sanitarios para lograr una gestión de calidad. Así se extrae del proyecto `Validación Española del Directorio Internacional de Competencias en Gestión Sanitaria´, elaborado por la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA) en colaboración con Amgen, cuyos resultados fueron presentados este jueves en la segunda jornada del 21 Congreso Nacional de Hospitales y Gestión Sanitaria (21CNH). El estudio es un marco de referencia en el que se recoge la visión de los directivos de salud como punto de partida sobre el que diseñar el mapa de competencias profesionales del directivo de salud en España. "Queremos decirle a la sociedad qué tipo de cualidades debe tener un directivo o gestor sanitario, igual que, por ejemplo, la Sociedad de Cardiología establece cuáles debe tener un cardiólogo", explica Carlos Mur, coordinador del comité científico del proyecto, director gerente del Hospital Universitario de Fuenlabrada (Madrid) y vocal de la Junta Directiva de SEDISA.
Un panel de 85 directivos participó en los últimos meses en una encuesta para validar la pertinencia de las competencias del gestor. Entre las cualidades que alcanzaron un mayor consenso se encuentran la capacidad de articular y comunicar la misión, los objetivos y las prioridades de la organización; la capacidad de articular, analizar problemas, promover soluciones y alentar la toma de decisiones; y la de crear un clima organizacional basado en la confianza mutua, la transparencia y enfocado a una mejora del servicio. En cuanto a competencias de comunicación y gestión de relaciones, destacan las habilidades de escucha y comunicación y la capacidad para la resolución de problemas.
Los directivos también consideran importante el conocimiento de las propias asunciones, valores, fortalezas y limitaciones y que sean capaces de demostrar alta conducta ética, compromiso con la transparencia y responsabilidad con sus acciones. Por último, señalan las competencias empresariales como la disposición a cumplir con las leyes y normativas, la correcta gestión de la información o el compromiso con la mejora de la calidad del paciente.
Dependencia, vejez y gasto sanitario
El progresivo envejecimiento de la sociedad española plantea un reto para la gestión sanitaria y hospitalaria en los próximos años. Según el Ageing Report 2018, elaborado por la Comisión Europea, se prevé que el índice de dependencia de la vejez en la Unión Europea pase del 29,6% en 2016 al 51,2% en 2070. Itziar Alberdi, delegada española en Ageing Working Group del Consejo Europeo, explicó en el 21CNH que este aumento de la cronicidad podría incrementar el gasto sanitario en 0,5% del PIB en este periodo y del 1,3% en el caso de los cuidados de larga duración, un incremento que podría llegar a ser mayor bajo diferentes escenarios de riesgo.
El sistema sanitario español ha demostrado a lo largo de los últimos años su capacidad de producir buenos resultados pero, según el Joint Report on Health Care and Long-Term Care systems and Fiscal Sustainability 2016 de la Comisión Europea, todavía hay retos pendientes en el futuro. "Las reformas propuestas se dirigen a la mejora de la gestión de los sistemas y de la eficiencia de los mismos", indicó Itziar Alberdi. Por su parte, la coordinadora de la Estrategia en Salud Cardiovascular del Ministerio de Sanidad, Sonia Peláez Moya, expuso la importancia de considerar la calidad de vida de los mayores a la hora de elaborar estrategias de salud.
por IM Médico Publimas Digital s.l.
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