Denuncian las medidas unilaterales impuestas
SMN y sociedades unen su voz contra la "grave crisis" de AP
El Sindicato Médico de Navarra y todas las sociedades médicas de primaria denuncian al unísono la imposición de recortes unilaterales en el nivel, que según ellos, afectarán a la asistencia que se presta. Sindicato y sociedades abogan por el diálogo para reconducir la situación.
Redacción | 05/12/2011 00:00
La primaria navarra está en pie de guerra, y lo está contra la imposición de una serie de medidas "que dificultan las condiciones laborales de los profesionales sanitarios que ejercen en este nivel, y que empeoran la calidad asistencial". El Sindicato Médico de Navarra, las tres sociedades científicas autonómicas que agrupan a los médicos de Familia (Semergen-Navarra, la Sociedad de Medicina Familiar y Comunitaria y SEMG-NA), y la Asociación Navarra de Pediatría (ANPE) han unido sus voces para denunciar los recortes que ha sufrido primaria, la "grave crisis" del nivel, y la "falta de diálogo" de la Administración.
En el primer caso, el sindicato profesional y las sociedades científicas afirman que "se han reducido drásticamente las sustituciones de bajas, vacaciones y otro tipo de ausencias, llegando incluso a suprimirse en algunos puestos de trabajo". En un comunicado conjunto que han elevado a la Administración (Consejería de Salud y Gerencia de Atención Primaria del Servicio Navarro de Salud), los representantes profesionales alertan de que estos recortes "repercuten en un notable aumento de la carga asistencial para el resto de los profesionales y en un perjuicio directo para el usuario, dado que, si un médico está ausente, los pacientes pueden llegar a ser vistos cada vez por un profesional diferente".
Con respecto a la prescripción por principio activo, que entró en vigor en el SNS el pasado 1 de noviembre, los denunciantes llaman la atención sobre el hecho de que "Navarra es la única comunidad en la que, al aplicar la legislación estatal, la Gerencia establece como falta grave no prescribir por principio activo". Es decir, que "un médico puede ser suspendido de empleo y sueldo por poner en una receta un nombre comercial, aunque tenga el mismo precio que un genérico".
Falta de diálogo
En este contexto, el Sindicato Médico y las sociedades científicas se quejan, además, de la postura de la Administración. Admiten que han mantenido varias reuniones con representantes del Departamento de Salud, pero añaden, a renglón seguido, que "no sólo no se ha hecho caso a nuestras propuestas, sino que se nos han impuesto una serie de medidas que dificultan nuestras condiciones laborales y empeoran la calidad asistencial". Entre esas medidas citan la "crónica falta de sustitutos", que implican una sobrecarga asistencial para los médicos titulares y la "obligación de aparcar muchas actividades de prevención". Aunque dicen ser conscientes de las crisis, matizan que ésta es también "una oportunidad de cambio, y el modelo de atención primaria actual debe evolucionar, contando más con los profesionales, gracias a los cuales se ha mantenido hasta ahora".
SMN y sociedades unen su voz contra la "grave crisis" de AP - DiarioMedico.com
- Los representantes profesionales denuncian que el Gobierno navarro es el único que considera falta grave no prescribir por principio activo
En el primer caso, el sindicato profesional y las sociedades científicas afirman que "se han reducido drásticamente las sustituciones de bajas, vacaciones y otro tipo de ausencias, llegando incluso a suprimirse en algunos puestos de trabajo". En un comunicado conjunto que han elevado a la Administración (Consejería de Salud y Gerencia de Atención Primaria del Servicio Navarro de Salud), los representantes profesionales alertan de que estos recortes "repercuten en un notable aumento de la carga asistencial para el resto de los profesionales y en un perjuicio directo para el usuario, dado que, si un médico está ausente, los pacientes pueden llegar a ser vistos cada vez por un profesional diferente".
Con respecto a la prescripción por principio activo, que entró en vigor en el SNS el pasado 1 de noviembre, los denunciantes llaman la atención sobre el hecho de que "Navarra es la única comunidad en la que, al aplicar la legislación estatal, la Gerencia establece como falta grave no prescribir por principio activo". Es decir, que "un médico puede ser suspendido de empleo y sueldo por poner en una receta un nombre comercial, aunque tenga el mismo precio que un genérico".
Falta de diálogo
En este contexto, el Sindicato Médico y las sociedades científicas se quejan, además, de la postura de la Administración. Admiten que han mantenido varias reuniones con representantes del Departamento de Salud, pero añaden, a renglón seguido, que "no sólo no se ha hecho caso a nuestras propuestas, sino que se nos han impuesto una serie de medidas que dificultan nuestras condiciones laborales y empeoran la calidad asistencial". Entre esas medidas citan la "crónica falta de sustitutos", que implican una sobrecarga asistencial para los médicos titulares y la "obligación de aparcar muchas actividades de prevención". Aunque dicen ser conscientes de las crisis, matizan que ésta es también "una oportunidad de cambio, y el modelo de atención primaria actual debe evolucionar, contando más con los profesionales, gracias a los cuales se ha mantenido hasta ahora".
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