Osakidetza recauda 22 millones al año por facturas a usuarios obligados al pago de la atención prestada
Vitoria (23/01/2014) - Nerea Garay
• El 80% procede de las compañías de seguros y mutuas
• En algunos casos, Osakidetza ha llevado los impagos por la vía judicial, ganando las reclamaciones
El Servicio Vasco de Salud-Osakidetza recauda anualmente cerca de 22 millones de euros por facturas a pacientes que están obligados al pago de la atención que se le presta en alguno de los centros sanitarios vascos.
Los centros públicos, las urgencias y hospitales de Osakidetza asisten a todos los pacientes que lo demanden, sin embargo, no obvian quién dispone de cobertura con cargo a la Sanidad pública o quién no la tiene para emitirle la factura al garante correspondiente.
A pesar de que el paciente no tiene que pagar nada al acudir al médico, todas las prestaciones son facturadas. La mayoría del gasto se imputa a la Consejería de Sanidad, a quien se le cobra a través del contrato-programa las prestaciones de las personas que cuenten con tarjeta sanitaria y derecho a la cobertura pública. Y es que uno de cada tres euros de los presupuestos del País Vasco se dedica a cubrir gastos del Departamento que dirige Jon Darpón. En concreto, 3.351 millones de euros, de los cuales 2.463 irán a Osakidetza, lo que supone un gasto al día de 6,7 millones de euros.
Las mutuas por accidentes laborales y las compañías de seguros, en el caso de accidentes de tráfico, entre otros, son a los que factura Osakidetza y por los que recibe al año 22 millones de euros.
Una de las partidas más abultadas corresponde a las asistencias relacionadas con actividades que cuentan con algún tipo de seguro obligatorio, como el escolar o de una federación deportiva o caza; a las mutuas, por su parte, les corresponden los gastos de accidentes de trabajo o enfermedades profesionales atendidas en la red pública sanitaria. Los ingresos que se obtienen de los avalistas suponen el 80 por ciento de la facturación total.
Extranjeros de la UE
Osakidetza también repercute la factura de la atención sanitaria a los países de los ciudadanos extranjeros de la Unión Europea (UE) y con convenios específicos. Si el paciente no presenta los datos necesarios para reclamarle la factura a quien corresponda, su servicio de salud en el país, una aseguradora, etc., será el propio usuario el que deberá hacerse cargo del abono por las prestaciones recibidas.
El Servicio Vasco de Salud asiste siempre al paciente, aunque finalmente no se acabe cobrando por el servicio ofrecido. En los últimos cinco años la facturación a terceros ha sido muy similar, oscilando entre los 21,7 a los 22,9 millones de euros. Osakidetza ha emprendido distintos procedimientos para hacer frente a los impagados contra las entidades que no abonan las facturas que los gestores sanitarios consideran una pérdida considerable para la Sanidad vasca. En algunos casos, Osakidetza lo ha llevado a la vía judicial, que los gana sistemáticamente.
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