Condena por demorar cinco días el diagnóstico de una colecistitis aguda

Un juez imputa al Sergas la responsabilidad derivada del fallecimiento de un paciente por un retraso de cinco días para diagnosticarle una colecistitis. El fallo censura que lo en principio era una prudente actitud conservadora se tornó en pasividad ante la mala situación clínica del enfermo.

Diego Carrasco. Madrid | 05/09/2016 14:51

Cipriano Castreje, abogado que colabora con El Defensor del Paciente. (DM)

El Juzgado Contencioso número 2 de Santiago de Compostela ha condenado al Servicio Gallego de Salud (Sergas) por demorar cinco días el diagnóstico de una colecistitis aguda perforada. La sentencia entiende que ese retraso vino provocado por una cierta pasividad del cuadro médico cuando empeoró la situación clínica del paciente.

Según la demanda presentada por Cipriano Castreje, abogado que colabora con El Defensor del Paciente, el enfermo ingresó el 4 de enero de 2008 en el Servicio de Medicina Interna de un hospital del Sergas por dolor abdominal y fiebre. Se pautó un tratamiento médico conservador, por lo que se le realizó una ecografía y una TC abdomino-pélvica. Se observó una vesícula distendida sin signos de colecistitis. No obstante, el paciente tenía fiebre intermitente y una analítica reveló unas cifras altas de bilirrubina, fosfatasa y GGT, por lo que comenzó a sospechar de una posible perforación.

El 10 de enero se le trasladó al Servicio de Cirugía y cinco días después se le realizó una resonancia magnética, que concluyó un diagnóstico de colecistitis aguda perforada con peritonitis biliar. Se le practicó una colecistectomía, lavado y drenaje. Tras una serie de complicaciones postoperatorias, el enfermo falleció el 3 de febrero.

Uno los informes periciales, avalados por el juzgado, apuntó que en la cirugía se apreció la existencia de una perforación de vesícula con peritonitis biliar, sin colelitiasis. Además, se confirmó que se trataba de una colecistitis aguda y crónica con metaplasia intestinal focal.

La sentencia considera que ha existido una "pérdida de oportunidad" al existir un daño antijurídico a consecuencia de un mal funcionamiento del Sergas, ya que basta "con cierta probabilidad de que la actuación médica pudiera evitar el daño, aunque no quepa afirmarlo con certeza, para que proceda la indemnización. Y es que "lo que en un principio constituía una prudente actitud conservadora se tornó en pasividad ante la mala situación clínica del enfermo, con una demora de cinco días para realizar una intervención quirúrgica", subraya el fallo.

El magistrado señala que no se ha justificado que fuera razón suficiente para tal demora el que se hubiera solicitado una resonancia hepática como consecuencia de un aumento de las cifras de bilirrubina y GGT.

El juzgado condena al Sergas a pagar a dos sobrinos del paciente una indemnización de 24.000 euros por la totalidad de los daños y perjuicios sufridos. El fallo puede ser recurrido ante la Audiencia Provincial de La Coruña.