La mediación puede evitar la judicialización del 50 por ciento de los siniestros médicos

Promede, que se acaba de inscribir en el Registro de Mediadores del Ministerio de Justicia como institución mediadora, considera que la mediación puede evitar la judicialización de la mitad de las reclamaciones que se producen en el ámbito sanitario.

Redacción. Madrid | 28/09/2016 13:50

Profesionales de la Medicina y del Derecho (Promede), compañía especializada en peritaciones médicas, ha incorporado a sus áreas de actuación un nuevo servicio de mediación sanitaria con el fin de impulsar y desarrollar la resolución de conflictos producidos en el ámbito sanitario. Y es que Promede es consciente de las numerosas reclamaciones que se producen por problemas de comunicación entre los médicos, los pacientes y sus familiares.

La mediación constituye un medio de solución de controversias en el que dos o más partes intentan voluntariamente alcanzar por sí mismas un acuerdo con la intervención de un mediador. La existencia de un mecanismo de mediación en el ámbito sanitario promueve el entendimiento entre las partes. Para Promede, la mediación puede llegar a evitar la judicialización del 50 por ciento de los siniestros sanitarios, evitando la penalización de los procesos, un ahorro de costes, la disminución del tiempo invertido en la resolución de los conflictos y la obtención de un acuerdo satisfactorio para las partes implicadas de forma rápida.

En este sentido, Juan Abarca Cidón, presidente de Promede, asegura que "la Ley 5/2012, de 6 de julio, de Mediación en Asuntos Civiles y Mercantiles, y la posterior aprobación del Real Decreto de 13 de diciembre de 2013, ha convertido la mediación en una herramienta imprescindible para nuestra sociedad". Además, "las fórmulas de resolución extrajudicial de conflictos y, en especial, la mediación son hoy fundamentales porque se muestra como un mecanismo de resolución de conflictos muy poderoso que evita el recurso a la demanda judicial, lo que en el sector sanitario cobra una especial importancia por la especial dificultad en la que se pueden encontrar los pacientes y el enorme sentimiento de frustración que estos conflictos crea en los profesionales".

Se trata de una fórmula de autorregulación en la que son las partes las que encuentran la solución a su conflicto con la ayuda del mediador. Por tanto, no es un tercero quien les impone la forma de solucionar sus controversias. "La mediación ayuda a las partes, porque gran parte de los conflictos se producen por falta de comunicación, ya que promueve el acercamiento, para alcanzar por sí mismas un acuerdo con el que queden razonablemente satisfechas. La mediación no implica renunciar a la vía judicial sino que sólo la paraliza temporalmente mientras dura el proceso de mediación", concluye Abarca.