El trastorno mental grave entra en el baremo de la Ley de Dependencia

La Ley de la Dependencia no recoge adecuadamente las limitaciones de pacientes con trastornos mentales graves, pero esto va a cambiar a partir de enero de 2012. José Giner, catedrático de la Universidad de Sevilla, ha incidido en el XV Congreso Nacionald de Psiquiatría en la importancia de la conciencia del especialista.

C.D. Oviedo | 08/11/2011 00:00

La ley de promoción de la autonomía personal y atención a las personas en situación de dependencia no recoge adecuadamente las limitaciones de las personas con algún trastorno mental grave, por lo que estos enfermos no se benefician de dicha normativa en su justa medida. A partir de 2012 la situación se corregirá dada la obligación de que los psiquiatras emitan un informe valorativo, pero es necesario que los especialistas adquieran conciencia sobre la importancia de dicho informe.

Así lo ha indicado José Giner, catedrático de Psiquiatría de la Universidad de Sevilla y del Servicio de Psiquiatría del Hospital Virgen Macarena, en el XV Congreso Nacional de Psiquiatría, que se está celebrando en Oviedo, quien ha advertido sobre la necesidad de que la reforma de la ley tenga en cuenta una serie de criterios "con el fin de proporcionar mejor atención a los trastorno mentales".

Es importante la conciencia de los especialistas sobre la importancia del informe para que los pacientes estén adecuadamente valorados

El especialista ha recordado que añadir un ítem más a los diez previstos inicialmente "no ha sido suficiente para valorar la capacidad de un enfermo mental, y el baremo actual continúa siendo insuficiente. Una persona puede no tener físicamente ningún impedimento para beber, pero si está convencido de que el agua está envenenada puede morirse de sed". Y tal discapacidad no está suficientemente ponderada.

Guía posterior
La elaboración de una guía posterior de aplicación del baremo ha paliado en parte las carencias de la ley. Sin embargo, Giner considera necesario mejorar las competencias de las personas encargadas de aplicar el baremo con formación especializada.

La presión de la Sociedad Española de Psiquiatría Biológica, junto con la Sociedad Española de Psiquiatría y la Fundación Española de Psiquiatría y Salud Mental, ha sido clave para solventar las carencias iniciales de la mencionada ley. A partir de enero de 2012 será obligatoria la emisión de un informe psiquiátrico sobre la dependencia de los pacientes con un trastorno mental.

Giner ha llamado la atención de que los especialistas adquieran "conciencia adecuada de la importancia de dicho informe para que los enfermos estén adecuadamente valorados y puedan acceder a una serie de recursos que puedan repercutir de forma positiva en la evolución de su enfermedad".

Ha resaltado que es clave que el psiquiatra proceda a "una etiqueta precisa" de la dependencia del paciente, "aunque no sea la burocracia que implica la realización de estos informes lo que más nos atrae a los médicos, pero para los pacientes será vital para acceder a los recursos que contempla la ley en condiciones de equidad".

Otro motivo de preocupación es "la gran desigualdad y heterogeneidad en la atención a las personas con diagnóstico de enfermedad mental, que está perjudicando notablemente a los pacientes y sus familias".

Propuestas
El psiquiatra ha resumido sus propuestas para corregir los desequilibrios en el panorama actual: "Adopción de nuevos baremos que recojan de manera expresa la situación de las personas con patología mental, una toma de conciencia en las autonomías para aplicar la ley de manera homogénea, mejora en la formación de los profesionales encargados de aplicar el baremo y una participación más activa de los psiquiatras en la clasificación de los pacientes".

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