Una unidad de investigación clínica centrada en el médico

La Unidad Polivalente de Investigación Clínica del Hospital Universitario Germans Trias i Pujol de Badalona se puso en marcha el pasado febrero. Actualmente participa en siete ensayos independientes y 14 de la industria farmacéutica, con un concepto de unidad único en España.

Javier Granda Revilla. Barcelona | 02/11/2011 00:00

Joan Costa, responsable de la Unidad Polivalente de Investigación Clínica del Hospital Universitario Germans Trias i Pujol. (Rafa M. Marín)

La Unidad Polivalente de Investigación Clínica del Hospital Universitario Germans Trias i Pujol, que forma parte de la red Caiber, cuenta con una coordinadora, dos enfermeras y un administrativo, con el modelo de investigación clínica de Birmingham. Como ha explicado Joan Costa, responsable de la unidad, "básicamente, lo que pretendemos es dar servicio al investigador, porque en nuestro centro la investigación clínica es consustancial con la docencia, para mejorar la asistencia y progresar en el desarrollo de la medicina y, teóricamente, conseguir la traslación de las nuevas aportaciones e investigaciones a la asistencia", incluyendo desde aspectos básicos a nivel molecular hasta procesos intermedios como aspectos de proteómica o diagnósticos.

"Esta capacidad de experimentar todos los aspectos de investigación básica y clínica es la que nos faltaba. La unidad cierra el círculo y su propósito es tener un entorno que permita investigar en condiciones tanto en pacientes como en voluntarios sanos", ha añadido.

La infraestructura cuenta con consultas externas e instalaciones similares a un hospital de día y con una unidad de hospitalización.

La infraestructura, de 400 metros cuadrados, integra la investigación clínica en un único lugar. Cuenta con tres consultas externas e instalaciones similares a un hospital de día para extracción de muestras y realizar perfusiones breves de quimioterápicos antineoplásicos o biológicos. También dispone de una unidad de hospitalización con seis camas para estudios en fase I y para aquellos en fase II o III que requieran ingreso.
Otra de las características de la unidad es que todos los pacientes sometidos a tratamiento activo pueden seguirse con visión directa, así como los que se sitúan en una tercera sala en la que los pacientes ingresados pueden descansar o comer.

Entorno cómodo
"Es una instalación muy moderna, con todos los requerimientos de reanimación y gases que requieren los estudios fase I o las primeras administraciones de fármacos. Queremos ser una unidad que proporcione un entorno cómodo en el que el investigador que tiene comprometido un proyecto tenga una zona de administración en la que los encargados de la planificación puedan cumplimentar la agenda".

Cuando el investigador accede a la unidad, se encuentra al paciente y el cuaderno de recogida de datos del proyecto encima de la mesa y sólo tiene que preocuparse de visitar al paciente y escuchar sus comentarios sobre posibles efectos beneficiosos o indeseables del medicamento.

Posteriormente, el proceso está sincronizado con enfermería para que se realicen las extracciones y las muestras se guarden de manera correcta, con un control telemático de temperatura que posibilita que cada una de ellas pueda guardarse y remitirse al laboratorio central. Así, el investigador solamente tiene que preocuparse de supervisar al paciente y al proyecto y no de gestiones de tipo administrativo.

"Es un espacio optimizado al máximo, lo que facilita que la cadencia de los proyectos sea continua, sin tiempos muertos. Procuramos que la ocupación sea máxima, consiguiendo la mayor eficiencia y el menor consumo de tiempo y de servicios. Creo que no hemos alcanzado techo y, en un futuro, antes de crecer más, tendremos que plantearnos un crecimiento de la plantilla en función de las necesidades", ha advertido Costa.

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