"No es ético establecer un registro de objetores"

La objeción de conciencia fue uno de los temas del Congreso Nacional de Deontología celebrado en Bilbao.

Marcelo Curto. Bilbao | dmredaccion@diariomedico.com | 26/05/2014 00:00

El Colegio de Médicos de Vizcaya ha acogido la pasada semana la celebración del I Congreso Nacional de Deontología Médica. Enrique Villanueva Cañadas, ex miembro de la Comisión Central de Deontología de la Organización Médica Colegial (OMC), expuso en una ponencia, que moderó Fabián Goitia, miembro de la Deontológica de Vizcaya, los aspectos prácticos de la objeción de conciencia.

Dentro de este aspecto, y en lo referente a la reforma de la ley del aborto, distinguió "en la ley que actualmente se encuentra en vigor, entre la objeción de conciencia legalizada, para aquellos médicos que intervienen directamente en el proceso, y la no legalizada, en la que intervienen de manera colateral o indirecta y que es la verdadera objeción de conciencia".

En lo relativo a la información del médico a la paciente, "el código deontológico de la OMC establece que el médico no puede intervenir en las convicciones morales del paciente y, por lo tanto, no puede objetar en la información de los derechos y alternativas que tiene la mujer. Todo ello sin ser proabortivo ni al revés".

El nuevo proyecto de reforma de la ley del aborto "apunta a la objeción de los médicos que intervienen de una manera indirecta. Por ejemplo, países como Noruega han legislado para ampliar el derecho de los médicos generales a la objeción de conciencia en estos casos. Otros países, como Francia, en cambio, se proponen castigar a aquellos médicos que interfieran en el proceso de desarrollo del aborto de una mujer".

El código de la OMC establece que "el médico debe dar información a la mujer sobre los derechos que la asisten, de una manera objetiva". Según su opinión personal, la reforma de la ley del aborto "debería atender lo que el código deontológico ha establecido, ya que para su elaboración se ha llevado a cabo un debate amplio y consolidado, y se puede decir que cuenta con un grado importante de consenso".

Desde su punto de vista, "no debería haber regulación de la objeción de conciencia de los profesionales que intervienen indirectamente en el aborto".
Para el experto, "no es legítimo éticamente poner en marcha un registro de objetores, ya que ninguna persona tienen obligación de manifestar sus creencias políticas y religiosas y, por lo tanto, tampoco se concibe un registro donde se haga constar el carácter objetor". Por otro lado, "el médico sí debe tener el deber de informar a su jefe de servicio de su carácter objetor".

Paliativista y presidente de la Deontológica

Con motivo del Congreso, a cuya cabeza del comité científico ha estado el facultativo Jacinto Bátiz, médico paliativista y presidente de la Comisión de Deontología del Colegio de Médicos de Vicaya, comentó a Diario Médico la objeción en la atención al final de la vida: "No cabe hablar de objeción en la sedación paliativa, dado que la buena práctica médica obliga a realizarla cuando está indicada y, por tanto, no llevarla a cabo cuando se debe es una vulneración de la lex artis".