Más de 7 millones de niños menores de cinco años murieron en 2010 por enfermedades evitables, según un informe de la OMS
Nueva York (16/09/2011) - Redacción/E.P.
El documento pone de relieve que en África Subsahariana, la región con el mayor número de muertes de niños menores de cinco años, la tasa de mortalidad ha duplicado su ritmo de descenso, pasando de un descenso del 1,2 por ciento anual en la década 1990-2000 a uno del 2,4 por ciento en la década 2000-2010
UNICEF y la Organización Mundial de la Salud (OMS) han señalado en su último informe que 7,6 millones de niños menores de cinco años murieron en 2010 por causas evitables, lo que supone un descenso del 36,6 por ciento respecto a 1990, año en que fallecieron 12 millones de niños en este rango de edad.
El documento pone de relieve que en África Subsahariana, la región con el mayor número de muertes de niños menores de cinco años, la tasa de mortalidad ha duplicado su ritmo de descenso, pasando de un descenso del 1,2 por ciento anual en la década 1990-2000 a uno del 2,4 por ciento en la década 2000-2010.
"La reducción de la mortalidad infantil está relacionada con muchos factores, sobre todo el aumento del acceso a servicios sanitarios de los recién nacidos. También la prevención y el tratamiento de enfermedades infantiles, y mejoras de la nutrición, la cobertura de vacunación, el agua y el saneamiento", ha manifestado la directora general de la OMS, Margaret Chan. "Esta es una prueba de que invertir en la salud de los niños es usar bien el dinero, y una señal de que tenemos que incrementar estas inversiones en los próximos años", ha apostillado.
Además, ambas organizaciones han destacado que algunas de las mejoras se han producido en países donde los niños son más vulnerables. Los cinco países donde más bajaron las tasas de mortalidad infantil en 2010 fueron Níger, Malaui, Liberia, Timor Leste y Sierra Leona. Lake y Chan han indicado que "el compromiso de los gobiernos y la puesta en marcha de estrategias para facilitar el acceso y uso de servicios esenciales resultan factores de éxito esenciales".
Por otra parte, el informe señala que los recién nacidos y los bebés son los que presentan una mayor tasa de riesgo, y que es con este grupo con el que se han producido menos avances en este segmento de edad. Más del 40 por ciento de las muertes de niños menores de cinco años ocurren durante el primer mes de vida y más del 70 por ciento durante el primer año.
África Subsahariana sigue registrando las mayores tasas de mortalidad infantil, ya que uno de cada ocho niños muere antes de cumplir los cinco años. El sur de Asia es la segunda región con las tasas más altas, ya que fallece 1 de cada quince niños antes de los cinco años.
La OMS también hace referencia en su informe al total de defunciones por enfermedades no transmisibles (ENTs) en España a lo largo de 2010, que son 176.000 muertes en varones y 167.000 en mujeres.
El documento pone de relieve que en África Subsahariana, la región con el mayor número de muertes de niños menores de cinco años, la tasa de mortalidad ha duplicado su ritmo de descenso, pasando de un descenso del 1,2 por ciento anual en la década 1990-2000 a uno del 2,4 por ciento en la década 2000-2010.
"La reducción de la mortalidad infantil está relacionada con muchos factores, sobre todo el aumento del acceso a servicios sanitarios de los recién nacidos. También la prevención y el tratamiento de enfermedades infantiles, y mejoras de la nutrición, la cobertura de vacunación, el agua y el saneamiento", ha manifestado la directora general de la OMS, Margaret Chan. "Esta es una prueba de que invertir en la salud de los niños es usar bien el dinero, y una señal de que tenemos que incrementar estas inversiones en los próximos años", ha apostillado.
Además, ambas organizaciones han destacado que algunas de las mejoras se han producido en países donde los niños son más vulnerables. Los cinco países donde más bajaron las tasas de mortalidad infantil en 2010 fueron Níger, Malaui, Liberia, Timor Leste y Sierra Leona. Lake y Chan han indicado que "el compromiso de los gobiernos y la puesta en marcha de estrategias para facilitar el acceso y uso de servicios esenciales resultan factores de éxito esenciales".
Por otra parte, el informe señala que los recién nacidos y los bebés son los que presentan una mayor tasa de riesgo, y que es con este grupo con el que se han producido menos avances en este segmento de edad. Más del 40 por ciento de las muertes de niños menores de cinco años ocurren durante el primer mes de vida y más del 70 por ciento durante el primer año.
África Subsahariana sigue registrando las mayores tasas de mortalidad infantil, ya que uno de cada ocho niños muere antes de cumplir los cinco años. El sur de Asia es la segunda región con las tasas más altas, ya que fallece 1 de cada quince niños antes de los cinco años.
La OMS también hace referencia en su informe al total de defunciones por enfermedades no transmisibles (ENTs) en España a lo largo de 2010, que son 176.000 muertes en varones y 167.000 en mujeres.
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