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ESPAÑA
EL PROBLEMA DE LA TRANSFERENCIA TECNOLÓGICA
La Fundación Botín apuesta por la biomedicina
En 2010 el esfuerzo en innovación biomédica de la Fundación Botín se concentrará en intentar resolver uno de los principales problemas de la ciencia en España: la falta de transferencia tecnológica. Y lo hará en su doble vertiente: la transformación de la innovación y el conocimiento en productos -fármacos e instrumentación-, y, en segundo lugar, su directa aplicación a la práctica médica diaria en los pacientes.

Santiago Rego. Santander - Jueves, 7 de Enero de 2010 - Actualizado a las 00:00h.

La Fundación Botín, que preside Emilio Botín, presidente del Banco Santander, ha creado un fondo de capital semilla, dotado inicialmente con un millón de euros, para apoyar a los mejores grupos de investigación biomédica de España cuando quieran dar el salto desde el laboratorio científico a un proyecto empresarial basado en sus descubrimientos. En cualquier caso, dedicará un total de nueve millones de euros en 2010 para investigación biomédica.

El director de la Fundación, Íñigo Sáenz de Miera, ha explicado que la iniciativa no pretende ser un fondo de capital riesgo, sino un apoyo a los investigadores para lanzar proyectos que todavía no cuentan con inversores privados porque aún no se ha percibido si son rentables. "Queremos cubrir el espacio que hay entre la empresa y la universidad. La primera no invierte en proyectos de base tecnológica hasta que no ve muy clara su rentabilidad, pero la universidad tampoco puede aportar el dinero suficiente para asegurarla en tiempos de crisis".

El primer paso de la fundación con el nuevo fondo ha sido contratar en Estados Unidos un análisis de mercado de una posible empresa de medición de telómeros
Sáenz de Miera ha explicado que el primer paso de la fundación con el nuevo fondo ha sido contratar en Estados Unidos un análisis de mercado de una posible empresa de medición de telómeros a partir de los trabajos del grupo liderado por María Blasco en el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO).

Este fondo de capital semilla se incorpora por primera vez al programa de transferencia tecnológica de la Fundación Marcelino Botín en materia de biomedicina, de apoyo a 21 de los grupos de investigación más importantes del país, en distintos centros y universidades.

El programa aborda toda la cadena de gestión del conocimiento, desde la identificación de las ideas innovadoras hasta su licencia a la empresa. La fundación selecciona anualmente distintos grupos de investigación de calidad contrastada en el área de las ciencias biomédicas, a los que se les facilita apoyo financiero y de gestión.

Compromiso
El compromiso de colaboración se establece por cinco años, aunque en aquellos casos en los que existan productos en vías de transferencia la fundación seguirá apoyando el proceso durante el tiempo que estime necesario. Asimismo, descarga al investigador de cualquier tipo de actuación administrativa y garantiza la eficiencia del proceso entre la academia y la empresa.

El compromiso de colaboración se establece por cinco años y descarga al investigador de cualquier actuación administrativa
En este área científica, tal y como ha reiterado Botín, se busca potenciar la transferencia tecnológica para conseguir que la investigación maximice el impacto social y económico de sus resultados. La fundación colabora con equipos líderes en España en ámbitos de investigación que van desde la terapia génica y la neurobiología, hasta vacunas contra el sida o tratamientos del virus de la gripe.

En el pasado ejercicio, la inversión de la Fundación Botín en ciencia alcanzó los 5,2 millones de euros, con 23 invenciones gestionadas, 12 solicitudes de patentes tramitadas y 6 acuerdos con empresas. En este sentido, han resaltado las distinciones conseguidas por tres de los científicos del Programa de Transferencia Tecnológica: el neurólogo Carlos Belmonte, el biólogo Carlos López Otín y el catedrático Ángel Carracedo Álvarez.

Para potenciar la transferencia tecnológica desde la academia a la empresa, pademás de su interrelación, y también profesionalizar su gestión, la fundación ha formado a un grupo de profesionales que, junto al equipo científico, aborda la cadena de gestión del conocimiento, ofreciendo un valor añadido al trabajo investigador de los científicos.

Gestión e investigación
La presencia de profesionales de la gestión transferencial en el trabajo diario de los científicos favorecerá, de manera natural, la creación de un ambiente en el que el valor añadido del trabajo conviva con los lícitos intereses meramente científicos de los investigadores. De hecho, se pretende que el deseo por publicar no choque con el interés por patentar.

En el último año la fundación también ha apoyado proyectos concretos de 16 universidades españolas, algunos de investigación biomédica y otros enfocados a la movilidad de estudiantes y profesores, por un total de 6,6 millones de euros.

Otra de las novedades para 2010 será la puesta en marcha de una bolsa de trabajo para recolocar en entidades sin ánimo de lucro a profesionales de alta cualificación que se hayan quedado en paro en los últimos meses. Se quiere recuperar el talento que ha abandonado el mundo de la empresa como consecuencia de la crisis.

21 GRUPOS DE INVESTIGACIÓN

En 2009 la Fundación Botín ha trabajado con 21 grupos de investigación, tras la incorporación en el segundo semestre de María Blasco y Ricard Solé:
1. Juan Bueren, del Ciemat (Madrid).
2. Eugenio Santos, del Centro de Investigación del Cáncer (Salamanca).
3. Carlos Belmonte, de la UMH-CSIC (Elche).
4. Jesús Ávila, de la Fundación Severo Ochoa (Madrid).
5. Joan Guinovart, del IRB (Barcelona).
6. Carlos López Otín, de la Universidad de Oviedo.
7. María Teresa Miras, de la UCM (Madrid).
8. José López Barneo, de la Universidad de Sevilla.
9. Laura Lechuga, del CSIC (Madrid-Barcelona).
10. Manuel Serrano, del CNIO (Madrid).
11. Luis Serrano, del Centro de Regulación Genómica (CRG) (Barcelona).
12. Juan Valcárcel, del CRG (Barcelona).
13. Modesto Orozco, del IRB (Barcelona).
14. Ángel Carracedo, de la Universidad de Santiago de Compostela.
15. Francesc Posasm, de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) (Barcelona).
16. Manel Esteller, del Idibell (Barcelona).
17. Juan Ortín, del CNB-CSIC (Madrid).
18. María Domínguez, de la UMH-IN-CSIC (Alicante).
19. Josep Samitier, del IBEC (Barcelona).
20. María Blasco, del CNIO (Madrid).
21. Ricard Solé, de la UPF (Barcelona).