Science Europe o cómo progresa la política investigadora

El CSIC es el único centro español que forma parte del último proyecto científico europeo: Science Europe (ver DM del 18-XI-2011).

J. A. P. | 12/12/2011 00:00

Rodrigo ha explicado la historia de esta iniciativa, que aún está dando sus primeros pasos con la independencia por bandera.

Hace años había una agrupación, nada formal, de intereses mutuos entre diversas instituciones europeas, Eurohorc, que tenía como objetivo disponer de una voz común en investigación y homogeneizar políticas.

Por entonces ni siquiera existía el Consejo Europeo de Investigación. Cada vez llegaban más instituciones al seno de Eurohorc, crecía la necesidad de institucionalizarla y no bastaba con buenas intenciones; hacía falta estructurar.

El Instituto de Salud Carlos III y, si se crea, la Agencia Española de Financiación, serían candidatos a formar parte de esta iniciativa

De forma paralela, existía la European Science Foundation, más antigua aún, que también agrupaba a instituciones ligadas a la investigación, muchas de las cuales formaban parte de Eurohorc, cuyas atribuciones quedaron muy disminuidas con la creación del Consejo Europeo de Investigación.

Periodo de transición
Así, hace tres años, la lógica se impuso y se propuso una confluencia de Eurohorc y la European Science Foundation: nació Science Europe, una iniciativa legalizada y más estructurada.

Pero había que pulir más detalles. No era lógico tener dos iniciativas similares, European Science Foundation y Science Europe, por lo que se ha iniciado una transición, de recursos humanos y financiación, de la primera a la segunda. Es un proyecto en pañales, pero se pretende que, a partir de 2015, la European Science Foundation esté bajo mínimos y que toda su estructura y sus aportaciones se hagan a través de Science Europe.

Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y España han liderado todo este proceso, que, según Rodrigo, "no trata de crear un contrapoder al Consejo Europeo ni a los gobiernos, sino de dar voz a los científicos que ejecutan la ciencia y a las instituciones que la financian".

Futuras incorporaciones
Por el momento lo conforman 50 instituciones. La entrada de nuevos socios estará determinada por unos mínimos exigentes basados en capacidad y recursos. Rodrigo apunta que "si la Ley de la Ciencia se desarrolla correctamente y se crea una Agencia Española de Financiación", este organismo debería plantearse su incorporación. Como el Instituto de Salud Carlos III, que a su juicio también cumple los requisitos.

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