Detectan riesgos en la autonomía de gestión

La Sedap pide formación para los directivos sanitarios

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ESPAÑA
PUEDEN ENTORPECER LA EXPERIENCIA DEL ICS
Detectan riesgos en la autonomía de gestión

El proyecto de autonomía de gestión que ha comenzado a desarrollarse este año en centros de primaria del Instituto Catalán de la Salud avanza a buen ritmo, pero ya se han detectado riesgos que pueden entorpecerlo.

Carmen Fernández. Barcelona - Lunes, 2 de Noviembre de 2009 - Actualizado a las 00:00h.

La experiencia de autonomía de gestión que se está desarrollando en diez equipos de atención primaria del Instituto Catalán de la Salud (ICS), gracias a la conversión del ente en empresa pública, ya ha permitido vislumbrar algunos riesgos: la tensión entre la buena práctica clínica y la buena gestión; la excesiva prudencia en la mejora de las remuneraciones, y la falta de recursos para responder a iniciativas asistenciales de calidad, según ha revelado María Antonia Llauger, directora del Equipo de Encantes de Barcelona en el XII Congreso de la Sociedad Española de Directivos de Atención Primaria (Sedap), celebrado en la capital catalana.

El proyecto de autonomía de gestión del ICS, que comenzará a extenderse por toda la red del primer nivel a partir de 2011 y que es diferente de la fórmula de autogestión de las entidades de base asociativa (EBAs), pretende implantar un nuevo modelo organizativo orientado a la mejora de los resultados asistenciales y económicos y al aumento de la satisfacción y compromiso de los profesionales, mediante el incremento de la capacidad de decisión sobre la organización y la gestión de la actividad y sobre los resultados del grupo e individuales (con corresponsabilización).

El proyecto, según ha asegurado Llauger, sigue requisitos imprescindibles para garantizar su viabilidad: transparencia, participación activa de los profesionales en su elaboración, aplicación voluntaria, existencia de un plan piloto y evaluación del modelo para determinar sus inconvenientes y sus necesidades de mejora. Los equipos implicados, además, han recibido formación específica y han participado, junto con otros profesionales y miembros de la organización, en cinco grupos de trabajo: acuerdo de gestión y objetivos, gestión de recursos humanos, procesos de gestión económica e infraestructuras, sistemas de información y plan funcional.

Durante el 2009 los equipos han desarrollado un acuerdo de gestión específico, han trabajado con presupuesto y cuenta de resultados, han dispuesto de un fondo de maniobra económico y han aumentado "de forma notable" la información sobre indicadores y sobre la gestión económica; todo eso se traduce en mayor capacidad de decisión sobre sus recursos (posibilidad de traspasar recursos entre conceptos y partidas presupuestarias).

El aspecto mas destacable (y sensible) de la experiencia es el sistema de incentivos, sobre el que Llauger ha informado que el principal avance ha sido la posibilidad de fijar de forma autónoma un 80 por ciento de los objetivos de los profesionales desde las direcciones de los equipos implicados, y están colaborando en diseñar objetivos asistenciales más próximos a la realidad del profesional y a la calidad. Igualmente se ha establecido un incentivo económico grupal ligado al cumplimiento del acuerdo de gestión del año anterior, que ha permitido, a juicio de Llauger, cierto avance en la contratación de personal de refuerzo, mejoras en formación y compra de material para los equipos. Un 80 por ciento de los objetivos de los profesionales pueden ser fijados de forma autónoma por las direcciones de los propios equipos.