Incertidumbre laboral por la reversión de La Ribera

La Consejería de Sanidad de Valencia afirma que se respetarán las condiciones de los trabajadores de La Ribera. Portavoces del centro dicen que no se hará o se generará malestar respecto a otros departamentos.

Enrique Mezquita. Valencia | dmredaccion@diariomedico.com | 10/04/2017 00:00

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El proceso de reversión del Departamento de Salud de La Ribera, en Alzira (Valencia), a la gestión directa de la Consejería de Sanidad, planteó muchos problemas desde el anuncio y uno de gran calado es cuál será el futuro de los profesionales implicados y si podrán mantener las mismas condiciones.

El departamento cuenta con 632 médicos en plantilla (383 en el Hospital de la Ribera y 249 en los centros de atención primaria) y, de ellos, 551 son personal laboral -incluyendo 20 médicos con plaza en propiedad en otros centros- y 81 estatutarios.

El punto de partida de Sanidad es asumir al personal laboral como trabajadores indefinidos no fijos. Además, afirma que respetará las condiciones laborales que estén refrendadas y reflejadas en convenios y contratos vigentes. No obstante, este enfoque no convence a Ribera Salud, el Hospital de La Ribera y SanitatSolsUna, una asociación de profesionales y ciudadanos que defiende el modelo Alzira y sus ventajas para los profesionales (ver cuadro).

Javier Palau, gerente del Hospital de La Ribera, apunta que sus profesionales tienen un mayor salario que los estatutarios en todas las categorías. En el caso de los médicos, según el último convenio colectivo, en conceptos salariales fijos los de La Ribera cobran 44.7739,19 euros anuales, 403,25 euros más que los estatutarios.

Además, Ribera Salud UTE tiene un sistema de incentivación con un promedio en el 2016 para los facultativos de más de 9.000 euros anuales. Según fuentes de la concesionaria, "el sistema público tan sólo gratifica a sus profesionales con una productividad anual que está descendiendo: la media del personal estatutario del departamento es de 515 euros ".

En estas condiciones, según Palau, los profesionales perderán salario, o la Consejería tendrá que crear un sistema similar, suponiendo un mayor gasto.

Agravio comparativoAdemás, fuentes de Ribera Salud añaden que, si se mantienen las condiciones, se produciría un agravio comparativo con los demás departamentos. Asimismo, "no existe ningún tipo de incompatibilidad ni exclusividad en ningún puesto ", en contraste con la exclusividad en las jefaturas de servicio que ha instaurado Sanidad.

Fuentes de SanitatSolsUna insisten en que los profesionales de la Ribera "trabajamos mucho, pero también se nos paga mejor. Y además de los salarios, la concesionaria se compromete, por contrato, con la formación de sus profesionales". Asimismo, "se ha apostado por la carrera profesional y por los planes de igualdad, para facilitar la conciliación familiar".

Otro frente: la seguridad de los puestos

Los responsables del hospital y de SanitatSolsUna también dudan de la permanencia de los trabajadores actuales. El 92,81 por ciento de los empleados laborales de la Ribera son fijos, mientras que sólo lo son el 62,5 por ciento de los estatutarios en los demás centros públicos de la comunidad.

Con el cambio, Sanidad propone que la mayor parte de los trabajadores, los laborales, pasarán a ser personal indefinido no fijo, una figura que según la administración garantiza la continuidad indefinida de sus profesionales, una reivindicación sindical irrenunciable. Las plazas de nueva creación o vacantes "se cubrirán en primera instancia por la bolsa de trabajo del departamento, que ya está creada, y de forma definitiva a través de las ofertas públicas de empleo (OPE) que se vayan convocando".

Permanencia
Según Javier Palau, gerente del Departamento de Salud de la Ribera, la figura escogida "convierte a los trabajadores laborales del departamento de fijos a no fijos y les augura un futuro marcado por la inestabilidad e incertidumbre", apuntando que la figura de indefinido no fijo no se puede mantener sine die, ya que "obliga a la Administración a convocar oposiciones". En el caso de concurrir a OPE, "no habría ninguna ventaja por haber trabajado cerca de 20 años en La Ribera".

El sindicato CESM, satisfecho con la propuesta de Sanidad, insiste en que "la especificación de «no fijo» no cambia nada y es para diferenciarla del «laboral fijo», existente sólo en la Administración, y que implica que ha pasado también por un concurso y/u oposición. No existen contratos laborales «fijos» en una relación laboral privada sino «indefinidos». El personal podrá optar por estaturizarse a través de las OPE, pero Sanidad no plantea ningún plazo para forzar el cambio".