Expertos proponen generalizar el modelo MUFACE y cambiar el modelo sanitario para hacerlo más sostenible
Madrid (6/03/13) - Silvia C. Carpallo
El Círculo de la Sanidad presenta su último Libro Azul, en el que analiza la Sanidad actual y lo que podría ser en 2020. En busca de su sostenibilidad, algunos de sus autores apuestan por cambios graduales, mientras otros proponen un cambio radical como universalizar el modelo MUFACE para toda la población
"Mi visión de la Sanidad Pública es pesimista, es un modelo quebrado e insostenible, y no bastan pequeños ajustes", esta era la opinión que Gabriel Uguet Adrover, presidente de la Federación Nacional de Clínicas Privadas, aportaba en la presentación del Libro Azul del Círculo de la Sanidad "Sanidad 2020, un futuro incierto". Como coautor de este libro, aportaba la parte más económica y empresarial, pero también la más transgresora, y es que en este informe defiende un cambio de modelo radical de nuestro sistema sanitario, para universalizar el modelo MUFACE, de forma que aunque la financiación siguiera siendo pública, el usuario pudiera elegir una asistencia pública o privada, como hacen los funcionarios.
Según explicaba "la libre elección de centro y de médico es un paso importante para el ciudadano, y el sector privado no es un drama", argumentando que creaba una mejora de la competencia. Igualmente aportaba que este cambio supondría una reducción de la burocracia política y funcionarial, además de una mejora en los tiempos de las listas de espera, lo que disminuiría las bajas y "haría más competentes a nuestros trabajadores". Incluso aportaba cifras como ahorros de 13.000 a 16.000 millones de euro al año, a medio plazo, extrapolando las cifras actuales de gasto por afiliado a MUFACE al conjunto de la población española.
Sin embargo, los otros dos autores del texto se desmarcaban claramente de esta propuesta, ya que, en palabras de José Manuel Cabasés, catedrático de Economía Aplicada en la Universidad Pública de Navarra, "no hay tiempo para plantear un cambio totalmente drástico de nuestro sistema, podemos cambiar mucho sin cambiar la estructura fundamental".
Se mostraba de acuerdo con la idea de competencia, pero no con que necesariamente tuviera que involucrarse con la idea de la privatización de centros, sino más con la necesidad de "desarrollar en este país una cultura de evaluación económica en el ámbito sanitario", que pudiera hacer competir a los centros para hacerlos más eficientes. Igualmente, en el capítulo de recursos humanos, optaba más por "cambiar el esquema contractual y reequilibrar la organización", refiriéndose a que actualmente en España, "hay muchos médicos haciendo de enfermeras". Pero no sólo eso, y es que también resulta fundamental "invertir en el capital motivacional" de estos profesionales. En cuanto a la gestión de los centros, incidía en la imperante necesidad de profesionalizar la gestión sanitaria y conseguir una mayor estabilidad contractual.
Mirando también a Europa
El tercer autor de este libro en explicar sus propuestas era José María Martín Moreno, doctor en Medicina y doctor en Salud Pública. Moreno, en vez de realizar una fotografía más nacional, ampliaba el enfoque hacía la Unión Europea. En su opinión, "falta más cohesión y más trabajo conjunto, en un mundo globalizado necesitamos estar juntos, necesitamos a Europa". Más concretamente hablaba de la necesidad de "clarificar las reglas del juego" en el área de la atención transfronteriza, en el área de los medicamentos, y además de europeizar la formación y homologación de los profesionales de la salud.
Como valor añadido del documento, este libro se complementa con los comentarios de los exministros de Sanidad José Manuel Romay Beccaría y Julián García Vargas, los cuales se muestran de acuerdo en mantener todo aquello del sistema que sí funciona, pero comenzar a aceptar que también son necesarios los cambios y las reformas, marcando líneas como la de incrementar la provisión de sector privado y hacer más eficiente el sector público, o avanzar en prevención y educación sanitaria.
Según explicaba "la libre elección de centro y de médico es un paso importante para el ciudadano, y el sector privado no es un drama", argumentando que creaba una mejora de la competencia. Igualmente aportaba que este cambio supondría una reducción de la burocracia política y funcionarial, además de una mejora en los tiempos de las listas de espera, lo que disminuiría las bajas y "haría más competentes a nuestros trabajadores". Incluso aportaba cifras como ahorros de 13.000 a 16.000 millones de euro al año, a medio plazo, extrapolando las cifras actuales de gasto por afiliado a MUFACE al conjunto de la población española.
Sin embargo, los otros dos autores del texto se desmarcaban claramente de esta propuesta, ya que, en palabras de José Manuel Cabasés, catedrático de Economía Aplicada en la Universidad Pública de Navarra, "no hay tiempo para plantear un cambio totalmente drástico de nuestro sistema, podemos cambiar mucho sin cambiar la estructura fundamental".
Se mostraba de acuerdo con la idea de competencia, pero no con que necesariamente tuviera que involucrarse con la idea de la privatización de centros, sino más con la necesidad de "desarrollar en este país una cultura de evaluación económica en el ámbito sanitario", que pudiera hacer competir a los centros para hacerlos más eficientes. Igualmente, en el capítulo de recursos humanos, optaba más por "cambiar el esquema contractual y reequilibrar la organización", refiriéndose a que actualmente en España, "hay muchos médicos haciendo de enfermeras". Pero no sólo eso, y es que también resulta fundamental "invertir en el capital motivacional" de estos profesionales. En cuanto a la gestión de los centros, incidía en la imperante necesidad de profesionalizar la gestión sanitaria y conseguir una mayor estabilidad contractual.
Mirando también a Europa
El tercer autor de este libro en explicar sus propuestas era José María Martín Moreno, doctor en Medicina y doctor en Salud Pública. Moreno, en vez de realizar una fotografía más nacional, ampliaba el enfoque hacía la Unión Europea. En su opinión, "falta más cohesión y más trabajo conjunto, en un mundo globalizado necesitamos estar juntos, necesitamos a Europa". Más concretamente hablaba de la necesidad de "clarificar las reglas del juego" en el área de la atención transfronteriza, en el área de los medicamentos, y además de europeizar la formación y homologación de los profesionales de la salud.
Como valor añadido del documento, este libro se complementa con los comentarios de los exministros de Sanidad José Manuel Romay Beccaría y Julián García Vargas, los cuales se muestran de acuerdo en mantener todo aquello del sistema que sí funciona, pero comenzar a aceptar que también son necesarios los cambios y las reformas, marcando líneas como la de incrementar la provisión de sector privado y hacer más eficiente el sector público, o avanzar en prevención y educación sanitaria.
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