EEUU: piden reformar la responsabilidad para los errores diagnósticos

Un entorno organizativo y legal que posibilite la transparencia en el análisis de errores es una de las medidas imprescindibles para reducir los errores de diagnóstico.

28/09/2015 00:00

Un entorno organizativo y legal que posibilite la transparencia en el análisis de errores es una de las medidas imprescindibles para reducir los errores de diagnóstico, según afirma un informe emitido por el Instituto de Medicina, perteneciente a las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina de Estados Unidos. El informe, titulado Mejorando en diagnóstico en la asistencia sanitaria, es el cuarto de una serie que comenzó en el año 2000 con Errar es humano: construyendo un sistema sanitario más seguro y continuó con Cruzando el abismo de la calidad: un nuevo sistema sanitario para el siglo XXI y La prevención de errores de medicación.

Los expertos afirman que "la mayoría de los usuarios del sistema sanitario sufrirá al menos un error de diagnóstico en su vida". Entre el catálogo de medidas que consideran básicas para abordar un problema elusivo figura "una cultura organizativa que promueva la revelación no punible, la discusión y la comunicación entre profesionales sobre problemas de diagnóstico".

Pero esta medida no estaría completa sin el respaldo jurídico. Por eso, abogan por "una reforma legal en el sistema de responsabilidad médica que haga más seguro el sistema sanitario al facilitar la transparencia y revelación de los errores de diagnóstico "sin la amenaza de que esa información pueda acabar utilizándose en juicio o en un procedimiento disciplinario".

causa de reclamación
Esta medida es tanto más importante por cuanto, subraya el informe, "los errores de diagnóstico son una de las causas principales de reclamación" contra los profesionales sanitarios. Los autores proponen la aplicación simultánea de tres medidas. Por un lado, la implantación de Programas de Comunicación y Resolución, donde clínicos, dirección del centro y aseguradoras de la responsabilidad se alían para una revelación pronta del incidente con el fin de aprender, evitar su repetición, comunicárselo al paciente y facilitar una compensación económica adecuada en el caso de que proceda.
En segundo término, reforzar el valor jurídico de los protocolos y guías clínicas, que otorgarían presunción de inocencia al clínico que las haya seguido. Y, finalmente, un sistema administrativo ágil de compensación de daños externo al sistema judicial, pero dirigido por magistrados especialistas en responsabilidad sanitaria.