Directrices para tratar a los niños con Ébola
Cuando el virus hizo su aparición en el oeste de África en 2014, los niños infectados se encontraban en riesgo de muerte. Un grupo de investigadores involucrados en su tratamiento, han desarrollado una serie de directrices para mejorar el método de tratamiento.
Cuando la epidemia se encontraba en su punto más alto, los profesionales de la salud que cuidaban a los enfermos se quedaban con pocas opciones de cuidado para los afligidos. Los pacientes con Ébola debían tomar grandes cantidades de líquido para contrarrestar los efectos deshidratantes de la diarrea y el vómito. En muchas ocasiones, esto es todo lo que se podía hacer por ellos.
Aunque el brote epidémica desistió en el invierno del 2015, un nuevo grupo de cuidadores de la unidad de tratamiento contra el Ébola más grande de Port Loko, Sierra Leone, comenzó a estudiar las mejores vías posibles para tratar a los niños con Ébola. Su objetivo era establecer un protocolo de tratamiento para estos niños.
Las directrices se han publicado en la revista The Journal of Pediatrics. Sugieren un abordaje terapéutico agresivo como la administración de líquidos por vía intravenosa, la administración de alimentos enriquecidos y el aumento del tiempo pasado en la cama.
“Sabemos que el Ébola volverá”, afirma el autor del estudio, Indi Trehan, “pero la próxima vez habrá una unidad de tratamiento del Ébola y los profesionales de la salud no tendrán que comenzar desde cero”.
Directrices para tratar a los niños con Ébola
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