Fenin estima en unos 1.400 millones el coste del Plan Renove de Tecnología Sanitaria

La patronal de empresas de tecnología sanitaria (Fenin) estima que el futuro Plan Renove de Tecnología Sanitaria que se negocia con Sanidad y Hacienda, precisa una inversión anual de 350 millones de euros durante 4 años para que el parque tecnológico español deje de estar obsoleto.

Laura G. Ibañes | 31/10/2017 14:19

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Ángel Lanuza, coordinador de la Plataforma Española de Innovación en Tencología Sanitaria; Margarita Alfonsel, secretaria general de Fenin, y Pablo Crespo, director legal de Fenin, este martes en la sede de la patronal. ()

La Federación Española de Tecnología Sanitaria (Fenin) ha estimado este martes en 1.400 millones de euros (350 anuales durante 4 años consecutivos) el coste que podría tener el Plan Renove de Tecnologías Sanitarias que ha planteado al Ministerio de Sanidad para acabar con la obsolescencia actual que afecta al parque tecnológico sanitario español.

Según ha detallado la patronal, en un desayuno con la prensa con motivo del 40 aniversario de la entidad, con datos actualizados a diciembre de 2016, el 70 por ciento de los TAC, el 69 por ciento de los ecógrafos y el 81 por ciento de los equipos de soporte vital superan los 5 años de antigüedad, pese a que las recomendaciones internacionales apuntan a la necesidad de que al menos el 60 por ciento de los equipos tengan menos de cinco años. Las grandes cifras sobre la obsolescencia del parque tecnológico actual presentadas por Fenin coinciden en grandes rasgos con las denunciadas hace tan sólo unas semanas por la Sociedad Española de Radiología Médica (Seram).

La recomendación internacional es que al menos el 60% de equipos tengan menos de 5 años

Según ha detallado este martes la secretaria general de Fenin, Margarita Alfonsel, la patronal ha tenido ya varias reuniones con el Ministerio de Sanidad y "hemos dimensionado ya un plan a cuatro años" para renovar en ese plazo todo el equipamiento que se considera obsoleto y, a su vez, el Ministerio de Sanidad "está tratando el asunto con Hacienda y las Comunidades autónomas para ver cómo se articula". Alfonsel ha reconocido que todavía falta definir lo crucial "el cuándo y el cómo", pero se ha mostrado confiada sobre la voluntad del Gobierno de acometer cuanto antes el Plan Renove de tecnología sanitaria que, en cualquier caso, podría requerir algo menos de los 1.400 millones de euros estimados una vez se haya descontado el efecto de las donaciones realizadas por Amancio Ortega.

Alfonsel ha aclarado además que, pese a que en su momento se habló de la posibilidad de incorporar a Fenin en un acuerdo de sostenibilidad con el Gobierno semejante al firmado por los laboratorios farmacéuticos, "tras trasladar a Montoro las particularidades de nuestro sector se entendió que un techo de gasto (como el que se ha planteado para la factura farmacéutica, que no puede superar el crecimiento del PIB) no era viable para nuestro sector".

El 40 por ciento del sector de tecnologías sanitarias está asentado en Cataluña y "algunos se han ido"

Haciendo balance de los grandes hitos y retos que ha tenido que afrontar la patronal en sus 40 años de vida -desde la lucha contra la morosidad y puesta en marcha de los planes de pago a proveedores, o la negociación para suavizar la sentencia europea que obligaba a subir el IVA de los productos sanitarios- Alfonsel no ha podido evitar tener que responder a la crisis abierta por el conflicto catalán y cómo afectará este al sector. Con cautela, la secretaria general de Fenin ha explicado que cerca del 40 por ciento del sector de tecnologías sanitarias, que en España aglutina a unas 1.000 compañías -la mitad de ellas fabricantes- y factura unos 7.200 millones de euros, está asentada en Cataluña "y sí, algunas de ellas han decidido cambiar su sede", ha dicho Alfonsel sin aventurarse a cuantificarlas.

Invitaciones a congresos

Como retos de futuro más inminentes, la patronal se ha referido a la implantación a partir de 2018 del código ético de las empresas de tecnología sanitaria, que obligará a las compañías a canalizar a través de las sociedades científicas o entidades sanitarias todas las ayudas para formación que den y que les impedirá invitar directamente a un congreso a un médico concreto. Según ha detallado Pablo Crespo, director legal de la patronal, en adelante todas las ayudas para formación se harán a través de becas que ofrecerán sociedades científicas, instituciones y otras organizaciones sanitarias como hospitales públicos, privados o fundaciones de centros sanitarios y, aunque las compañías podrán definir de forma genérica a quién se dirigen esas becas (MIR, especialistas en un área, jefes de servicio, etc.) no podrán decidir el médico concreto que las disfrutará.

Este nuevo código ético parte del concepto, según Crespo, de que "la formación no debe gravarse" pero también de que "es necesaria transparencia y garantizar que no hay conflictos de intereses". Así, "en ningún caso implicará la publicación con nombres y apellidos de los médicos que reciben finalmente las ayudas, puesto que las empresas no lo decidirán ni lo sabrán". Lo que sí se hará será conceder un sello de acreditación a las entidades que gestionen esas becas conforme a los criterios fijados por las empresas y en consonancia con el código ético.

Por otra parte, la patronal pondrá en marcha, según ha anunciado estudios piloto en 2018 para conocer la aportación de las tecnologías sanitarias a partir del impacto social y sanitario de determinadas tecnologías sanitarias concretas.