¿Tengo que pagar por mis recetas si salgo de Madrid? | Noticias | elmundo.es

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MADRID | Tasa del euro por receta

¿Tengo que pagar por mis recetas si salgo de Madrid?

Pago del euro por receta. | Domenec Umbert

• Un madrileño que vaya a otra comunidad con sus recetas estará exento de pago
• Alguien que llegue a Madrid desde otra comunidad con sus recetas, también...
• ... Pero si le atienden en un hospital y luego compra las recetas en Madrid, paga

Silvia R. Taberné | Madrid

Actualizado jueves 03/01/2013 15:16 horas

 

Comienza el año con nueva tasa y muchas dudas para los madrileños. El famoso euro por receta impuesto por la Comunidad de Madrid a imagen y semejanza de lo que existe en Cataluña desde el 23 de junio de 2012 está generando muchas preguntas no sólo a los farmacéuticos, que dan la cara cobrando esta tasa, si no también a muchos usuarios.

Una de las dudas frecuentes se refiere a las diferencias que existen entre Comunidades Autónomas: ¿Tendrá un madrileño que pagar dicho euro si compra sus medicamentos en una comunidad sin esta tasa? ¿Y un andaluz que llegue a la capital y necesite pasar por la farmacia?

 

Madrileño por la España sin tasa

Imagínese el caso. Un madrileño es atendido por el Servicio Madrileño de Salud el cual le prescribe X recetas. Si nuestro madrileño no está afectado por síndrome tóxico, no recibe pensiones no contributivas o no es un parado de larga duración entre otras excepciones, al ir a la farmacia del barrio tendrá que pagar un euro por cada receta si los fármacos superan el precio de 1,67 euros.

Pero si este madrileño se desplaza a otra Comunidad Autónoma y allí se acuerda de los medicamentos que tiene que comprar y pasa por una farmacia, entonces no tendrá que pagar esta tasa del euro.

"El euro por receta es la tasa que deben abonar los usuarios cuando se les dispensa un producto a través de una receta oficial del Servicio Madrileño de Salud en una farmacia de nuestra comunidad", recitan de carrerilla desde la Consejería de Sanidad de Madrid para ELMUNDO.es. Y todo lo que quede fuera de estas líneas se salva del pago, asumen.

Es decir, tendrá que pagar el que vaya a una farmacia madrileña con una receta dispensada por un hospital o centro de salud de la capital, exactamente de la misma forma que pasa en Cataluña; pero si usted se tiene que desplazar a otra comunidad y allí compra sus fármacos, queda exento del pago.
En ese sentido, varios farmacéuticos consultados han señalado que sería "imposible" cobrar esta tasa en otras comunidades, ya que ellas no cuentan con el sistema para hacerlo y no se podría devolver el exceso en caso de superar los 72 euros al año.

 

Andaluces que pasan por una farmacia madrileña

Andaluces, extremeños, valencianos y demás españoles que pasen por Madrid y necesiten los servicios farmacéuticos madrileños podrán pagar o no, dependiendo del caso.

Pongamos un ejemplo. Un señor de Córdoba, atendido por los servicios de salud andaluces, viene a Madrid a pasar unos días y decide ir a una farmacia para comprar los medicamentos que le han recetado en su Córdoba natal. En este caso, nuestro señor andaluz no tendría que pagar el euro por receta.

"Hay que tener en cuenta que estamos hablando de una tasa impuesta por las competencias de la comunidad y no de una ley estatal. Esto no es el copago, es una tasa como las que existen en algunos sitios para la recogida de basuras o el turismo", explica con símiles Isabel Vallejo, presidenta de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (Fefe). "Así, dichas comunidades, como Cataluña o Madrid, son responsables de marcar las normas y las salvedades y posiblemente lo que no quieran es luchar contra las quejas de otras comunidades por pedir a sus ciudadanos el pago de esta tasa", explica Vallejo.

Pero hay una salvedad. Si este señor cordobés tiene que ser atendido en algún hospital o centro de salud madrileño y luego va con su receta a una farmacia de la capital entonces sí que tendrá que pagar el euro por receta.

En este caso, y para contabilizar el pago, no se les podrá computar el pago máximo de 72 euros al no tener sus datos en el sistema, por lo que si exceden de este tope, tendrán que solicitar el exceso abonado a través de los canales establecidos por la Consejería de Sanidad de Madrid.

"Ahora nos hemos convertido en recaudadores de impuestos", se queja Jaime Acosta, Vocal de Oficina de Farmacia del Colegio Oficial de Farmacéuticos. "Nosotros tenemos que cobrar este euro de las recetas estipuladas que vengan del servicio de salud madrileño, porque luego nos lo descuentan a nosotros", explica.

 

¿Miedo a la picaresca?

Desde la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid se asegura que "esta es una medida disuasoria que promueve un mejor uso de los recursos, los medicamentos y los productos sanitarios para evitar el abuso de los fármacos", insisten.

Por ello, no temen aquello de 'hecha la ley, hecha la trampa', y que ciudadanos que tengan que desplazarse normalmente a otras comunidades puedan aprovechar para hacerse con los medicamentos que necesiten. "Esto no es una medida recaudatoria en sí, es disuasoria, no creemos que haya este tipo de picarescas", explican desde la Consejería.

En el caso de Cataluña, donde la medida está en marcha desde el pasado mes de junio, tampoco han encontrado problemas de este tipo.

 

Farmacéuticos ante la tasa

Los farmacéuticos se quejan de que "somos los que tenemos que dar la cara y escuchar las quejas de los ciudadanos, mientras que hacemos todo lo humanamente posible para explicar a cada usuario su caso particular y lo que tiene que pagar", explica Acosta.

"El problema real que existe es que somos los farmacéuticos los que estamos realizando un trabajo de información que no nos corresponde, pero que hacemos por el bien de nuestros usuarios. Pero son las autoridades las que nos tienen que facilitar por lo menos esto. Por ejemplo todavía no existen suficientes justificantes en todas las farmacias para aquellos que no quieren pagar este euro", indica.

"En nuestra opinión las medidas catalana y madrileña del euro por receta son un ejemplo de discriminación entre ciudadanos. Todo lo que afecte a la salud de las personas tienen que regularse en todo caso a través de medidas gubernamentales, no autonómicas, porque entonces grava a unos ciudadanos y a otros no por estar en un lugar determinado. Además, perjudica una vez más el trabajo de los farmacéuticos, que en estos casos se suma al copago, a las excepciones y demás", afirma, por su parte, Isabel Vallejo.