viernes, 12 de diciembre de 2014

Comunidades y hospitales siguen sin ver claro cómo será el reparto de presupuestos en la fijación de techos de gasto por medicamentos :: El Médico Interactivo :: Comunidades y hospitales siguen sin ver claro cómo será el reparto de presupuestos en la fijación de techos de gasto por medicamentos

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Comunidades y hospitales siguen sin ver claro cómo será el reparto de presupuestos en la fijación de techos de gasto por medicamentos



Madrid (12/12/2014) - Silvia C. Carpallo

El Ministerio insiste en que los acuerdos de techo de gasto máximo serán exclusivamente a nivel nacional, aunque no descarta que las autonomías, dentro de los límites del mismo, puedan realizar sus propias negociaciones. Por su parte las CC.AA insisten en la necesidad de que los acuerdos sean por patología y no por principio activo y por la incertidumbre que genera no saber qué pasará si cada territorio llega a los techos de forma desacompasada

"El techo de gasto es para la totalidad del territorio nacional, y lo que se hace es un desglose orientativo por Comunidades Autónomas". Esa es la idea de Carlos Lens, subdirector general de Calidad de Medicamentos y Productos Sanitarios del Ministerio de Sanidad, ha repetido una y otra vez en la LIX Jornada FUINSA centrada en los acuerdos de riesgo compartido de techos máximo de gasto en Farmacia. La cuestión es que este acuerdo a nivel nacional sigue dejando dudas tanto a las Comunidades Autónomas como a los propios hospitales sobre cómo les afectará a un nivel más micro de su gestión,  "una de las cosas que se establece en los comités que siguen estos acuerdos son las distribuciones orientativas de estos techos por CC.AA, si bien el techo funciona a nivel nacional, es lógico a que nivel autonómico los gestores quieran saber a qué se enfrentan". Pese a ello, Lens adelantaba que algunas autonomías han tomado esta referencia para hacer negociaciones propias, aunque en su opinión, mientras las mismas no afecten los límites del techo nacional, pueden ser legítimas.
El representante ministerial explicaba además que la idea es que estos acuerdos tengan una duración de dos o tres años y después fenezcan, "porque ya sabremos todo lo que se paga y lo que se consume, por lo que podremos entrar en otros mecanismos una vez dada por superada esa fase del acuerdo, aunque a algunos les auguro más tiempo".  Y es que Lens, en sus reflexiones sobre estos casi dos años de nuevos acuerdos de riesgo compartido añadía que  "el primer acuerdo riesgo compartido en febrero 2013 demostró que las  empresas tienen cierta sensibilidad por conservar el modelo del SNS, y no estaríamos aquí hablando de esto si cada uno mirase por sus intereses, aunque a algunas les queda mucho camino por recorrer y ya me gustaría que tomasen ejemplo".
En contraprestación a esta idea, Carolina González-Criado, subdirectora general de Farmacia del Servicio Gallego de Salud, señalaba que si bien estos acuerdos suponen ventajas como el crear registros de pacientes para tener más información sobre la prevalencia real, así como el impacto concreto en los presupuestos, se sigue desconociendo qué va a pasar cuando finalice el mismo, así como falta información sobre qué pasará cuando las CC.AA lleguen a dicho techo de forma descompasada. Igualmente apuntaba a que "los abonos no se revierten en los servicios de Salud, sino en nuestras consejería de Hacienda y no los vamos de ver", y que la propuesta de muchas autonomías pasaba por "un techo de gasto por patología, o incluso dirigido a ciertos grupos poblacionales", más que a techos por principios activos que reducen más la oferta y la competencia.
Los detalles de los acuerdos ya existentes
Carmen del Castillo, jefa de área en la subdirección general de Calidad de Medicamentos y Productos Sanitarios del Ministerio de Sanidad, era la encargada de realizar una explicación técnica de en qué consisten estos acuerdos. Si bien su objetivo es el de conseguir que todos los pacientes accedan a tratamientos innovadores, la clave estaría en que el acuerdo establece que una vez rebasado el techo de gasto establecido, la empresa asume el precio de ese tratamiento, desde ese punto,  a coste cero.   Más concretamente del Castillo explicaba que estos acuerdos "pueden explicitarse  por número de envases o por precio de medicamento". Así  se llega a un consenso entre laboratorio y Ministerio, según datos como el número de pacientes diana al que se prevé iría dirigido el fármaco,  y una vez calculado ese techo se consensua, y se pone una cláusula de revisión, de forma que al cabo de un año se revisa si el acuerdo ha ido como se esperaba o no.  Asimismo, todos los acuerdos  llevan un comité se seguimiento donde participa la dirección general de cartera de servicios, la comunidad autónoma que haya estado en la Comisión interministerial en el momento de la fijación del precio, mutualidades, así como por supuesto la Industria
Hasta ahora estos acuerdos se realizan  por principio activo o por grupos de principios activos, y es que  "ya tenemos el caso de una misma empresa tiene dos principios activos distintos para la misma patología, en el que primer medicamento entró en financiación con un techo, y luego se incorporó el siguiente medicamento al mismo techo".  En este caso concreto se centraba Isabel Pineros, jefa de servicio de esta misma subdirección del MSSSI, que matizaba que "el techo máximo se ha fijado porque uno de los medicamentos ya se encontraba financiado, pero tiene una previsión de ampliación en el número de pacientes y además la misma compañía tiene otro medicamento que pidió financiación para la misma patología,  y que aporta ciertas ventajas respecto al anterior. De esta manera se decidió llegar a un acuerdo de techo de gasto para estos dos medicamentos".
Actualmente ya existen 6 principios activos financiados con acuerdos de techo compartido como son abiraterona, pertuzumab, telaprevir, simeprevir, pirfenidona, ivacaftor, en el entorno de enfermedades oncológicas, hepatitis C y enfermedades raras.  Si bien el Ministerio ya se haya negociando otros dos, se prevé que este número aumente a lo largo del 2015.

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