Aspectos éticos del trasplante de útero entre personas vivas
28 julio
08:502014
Debería diferirse hasta que estuviera bien comprobada su utilidad clínica, que no existen efectos secundarios negativos y que éticamente está libre de problemas. El trasplante de útero es una novedosa técnica quirúrgica dirigida a restaurar la fertilidad en casos de infertilidad ocasionada por problemas uterinos (Fertility and Sterility; 102, 40-43, 2014). Los dos primeros casos de trasplante de útero entre personas vivas se realizaron hace y un cierto tiempo. El primero en Arabia Saudí, en el año 2000 y el otro en Turquía en 2011; pero sin que ambos tuvieran un final exitoso. De los realizados con garantas clínicas son 9 los que se constatan en la clínica quirúrgica hasta el momento (Ver Provida Press nº 439). Desde un punto de vista ético, como comentábamos en nuestro articulo anteriormente referido, con respecto al trasplante de útero entre vivos existen objetivos problemas éticos, que pueden estar relacionados con la donante del útero, con la que lo recibe, con el niño nacido, con la pareja de la mujer que recibe el trasplante de útero, e incluso con la sociedad, en función especialmente de los recursos económicos que se requieren para este tipo de trasplantes. En el artículo que comentamos de Fetility and Sterility, se analizan detenidamente estos problemas éticos y se concluye que en él en el momento actual no existen datos objetivos para poder proponer el trasplante de útero entre vivos como un tratamiento clínico habitual, pues según los autores, la aplicación clínica en diferentes sociedades de un nuevo tratamiento, como en este caso es el de trasplante de útero, debería diferirse hasta que estuviera bien comprobada su utilidad clínica, que no existen efectos secundarios negativos y que éticamente está libre de problemas.
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