lunes, 3 de octubre de 2016

Perforar la cava al reimplantar un DAI es daño desproporcionado - DiarioMedico.com

Perforar la cava al reimplantar un DAI es daño desproporcionado - DiarioMedico.com



CONDENA AL SERGAS

Perforar la cava al reimplantar un DAI es daño desproporcionado

El TSJ de Galicia condena al Sergas a pagar una indemnización de más de 170.000 euros por causar una lesión clamorosa e inesperada en la recolocación del electrodo de un desfibrilador.
Diego Carrasco. Madrid | diego.carrasco@diariomedico.com   |  03/10/2016 00:00



El Tribunal Supremo tiene una jurisprudencia muy consolidada sobre la doctrina del daño desproporcionado, que consiste en un resultado "anormal" e "inusualmente grave" respecto a los riesgos que puede comportar una determinada intervención quirúrgica.
Esta doctrina ha sido asumida por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Galicia para condenar al Servicio Gallego de Salud (Sergas) a pagar a los familiares de un paciente unaindemnización de 170.000 euros, más los intereses legales, desde la fecha de la reclamación, febrero de 2012, por el óbito de un paciente al recolocarle un desfibrilador automático implantable (DAI).
La sentencia argumenta que el fallecimiento causado por la rotura de la vena cava superiorsupone un "resultado clamoroso" e "inesperado" y que no se produce normalmente o no guarda relación o proporcionalidad con la entidad de la cirugía.
La demanda presentada por Alfonso Iglesias, abogado de la Asociación de Errores Médicos, denuncia mala praxis del Servicio de Cirugía Cardiaca en la reimplantación de un DAI a un paciente porque se optó por una técnica percutánea y ciega. Dicha actuación provocó la rotura de la vena innominada y la vena cava superior hasta la unión cavo-arterial, lo que originó una rápida exanguinación del enfermo. En su opinión, el fallecimiento del paciente podía haberse evitado. También se alegó ausencia de consentimiento informado.

Tanto el Sergas como su aseguradora afirmaron que el cuadro médico actuó conforme a las reglas de la lex artis, pues se siguió la guía práctica de la Sociedad Española de Cardiologíasobre el DAI.
El tribunal autonómico deja claro que estaba indicado la reimplantación del dispositivo porque el enfermo acudió al Servicio de Electrofisiología porque se había encendido la alarma del generador y en el momento de la consulta presentaba cuatro descargas inapropiadas. Una vez examinado, se comprobó una posible ruptura del cable del DAI.
La Sala Contenciosa admite que, en principio, no existen motivos acreditados pericialmente para concluir que se empleó mal la técnica quirúrgica utilizada para la extracción del cable, pero lo cierto es que se produjo un "daño desproporcionado".
En este sentido, la resolución judicial aclara que "aunque se esté en presencia de un resultado probable de la intervención, que se cifra en el consentimiento informado del orden del 1-2 por ciento de las probabilidades de que se produzca, no puede negarse que el fallecimiento del paciente resulta desproporcionado".
Anormalidad

El TSJ, parafraseando al tribunal Supremo, subraya que "un daño es desproporcionado cuando respecto de lo esperable o previsible y hasta inevitable, la lesión efectivamente causada es de tal entidad que sólo es concebible si ha habido una anormalidad en el funcionamiento del servicio".
Respecto a la falta de consentimiento informado, el tribunal gallego señala que el paciente conocía los riesgos y complicaciones graves y poco frecuentes de la intervención quirúrgica, incluida la perforación cardiaca o vascular. También constaba que se podía producir la muerte del enfermo en un porcentaje en torno al 1-2 por ciento. Los magistrados gallegos no tienen duda de que la información existió porque consta que fue ofrecida por el mismo profesional que practicó la cirugía.
Ahora bien, el TSJ subraya que, siendo cierto que se trataba de un "riesgo típico" que estaba recogido en el consentimiento informado, ello "no excluye que merezca la calificación de desproporcionado en relación con el que razonablemente se esperaba" de la reimplantación del BAI.

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