Hacia un equilibrio entre coste y riesgo

Diego de la Torre, director general adjunto de Willis Towers Watson, explica la situación de incertidumbre por la que atraviesan las aseguradoras tras la aprobación del nuevo baremo de accidentes de tráfico.

Diego de la Torre, director general adjunto de Willis Towers Watson | 13/02/2017 00:00

Transcurrido un año desde la entrada en vigor del nuevo baremo de accidentes de tráfico se ha podido percibir que está afectando a las primas de las pólizas de responsabilidad sanitaria con un incremento considerable, como mínimo en un 20 por ciento. Ello implica que en el mercado exista todavía cierta incertidumbre porque percibe el lado más negativo del baremo, por haber aumentado muy significativamente los importes de indemnización en las lesiones muy graves, y no tanto los aspectos positivos que ofrece un sistema de valoración de daños corporales que sigue siendo un referente en nuestro entorno europeo. La incertidumbre se refleja en subir primas o en no aceptar riesgos.

En determinados periodos temporales las aseguradoras buscan una mayor rentabilidad de sus productos dependiendo de sus ratios técnicos. En el ramo de la responsabilidad sanitaria la fiabilidad de los datos no se produce hasta los cinco años de la vida de una póliza, sobre todo en el sector público. Es en ese momento donde pueden saltar las alarmas. En España hemos estado en una situación muy competitiva durante más de 10 años, lo que ha sido muy importante para los compradores de seguros de responsabilidad profesional sanitaria. Lamentablemente ahora el panorama es muy distinto. Se están retirando compañías porque sus resultados han sido francamente malos, unido también a que se les está requiriendo por las autoridades reguladoras garantías de solvencia más altas, que implican incrementar sus reservas. No obstante, esta retirada también favorece la entrada de otros operadores que suscriben el riesgo con precios más elevados que en el pasado, pero esta entrada es muy selectiva, pues hay más demanda de compra de seguros que ofertas.

Aprender de los errores
Los servicios de salud buscan ante todo seguir transmitiendo tranquilidad a sus profesionales. Por eso es muy importante que el mercado siga ofreciendo condiciones equilibradas entre el coste del seguro y la exposición del riesgo que se asume. Las entidades gestoras requieren ese equilibrio para justificar/autorizar el correspondiente importe presupuestario. Esta es la condición más discutida, pues las coberturas o garantías son muy amplias y no han experimentado ningún cambio. No hay problema de riesgos excluidos ni tampoco de falta de capacidad para los límites de indemnización que ahora se recomienda elevar con el nuevo baremo.

Los sistemas de gestión del riesgo/prevención siempre se han incorporado en los contratos de seguros, pero lamentablemente pocas veces se materializan. Es un aspecto cultural que acabará imponiéndose, pues la siniestralidad sólo baja con la prevención y con la gestión de riesgos. Con los errores se aprende y se forma a los profesionales con el objeto de que se eviten. La comunicación es vital; lo es con el paciente y también con los gestores.

La labor de un asesor de riesgos sanitarios no debe ser sólo colocar un contrato en el mercado de seguros. Exige innovar en productos y en soluciones a medida de las necesidades cambiantes.