domingo, 23 de septiembre de 2012

Básica y clínica se alimentan mutuamente - DiarioMedico.com

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investigación traslacional

Básica y clínica se alimentan mutuamente

Las jornadas Cicerone nacieron con el objetivo de impulsar la investigación cardiovascular entre los que empiezan la especialidad.
Clara Simón Vázquez | 21/09/2012 00:00

Julián Pérez-Villacastín, Valentín Fuster, Carlos Macaya, José María Ordovás y Miguel Torres, durante las Jornadas de Investigación Cicerone.
Julián Pérez-Villacastín, Valentín Fuster, Carlos Macaya, José María Ordovás y Miguel Torres, durante las Jornadas de Investigación Cicerone. (DM)

Desde hace seis años se celebra en España la Jornada Cicerone, organizada por el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), el Instituto Cardiovascular del Hospital Clínico San Carlos, de Madrid, y la Fundación Interhospitalaria para Investigación Cardiovascular; anteriormente coincidía con la Reunión del Colegio Americano de Cardiología.

"El objetivo es despertar y provocar vocación de investigación en el área cardiovascular a los residentes que comienzan la especialidad. Queremos transmitirles ilusión: decirles que pueden hacer lo que quieran si se lo proponen, independientemente de dónde hagan la especialidad", ha explicado a Diario Médico Carlos Macaya, jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Clínico San Carlos.

Valores

Para intentar conseguir este objetivo, Valentín Fuster, director general del CNIC, se ha centrado en temas personales. "Animó a la audiencia diciendo que eran muy buenos profesionales, con ganas y con buen curriculum. Todo esto hace que puedan alcanzar los objetivos que se propongan, porque hoy en día no hay barreras geográficas".

Así, como ha resumido Macaya, las jornadas se han centrado en aspectos de comportamiento, de aptitudes y de actitudes, de generosidad, de trabajo; en fin, de valores.

José María Ordovás, director del Laboratorio de Nutrición y Genética de la Universidad de Tufts, en Estados Unidos, se ha referido a la genética y la epigenética de las enfermedades cardiovasculares. "Además de explicar hasta dónde se ha llegado, Ordovás les lanzó el guante a los nuevos especialistas y les dijo que quedan muchos aspectos por descubrir en este campo y que tienen que ser ellos los que sigan descifrando el genoma, del que aún queda un 90 por ciento por conocer".

Compatibles
Borja Ibáñez ha expuesto su experiencia. Trabaja a tiempo parcial en el Instituto Cardiovascular del Hospital Clínico San Carlos y es investigador del CNIC. De formación cardiológica, es experto en hemodinámica y está haciendo un estudio multicéntrico en sujetos con infarto de miocardio con elevación del segmento ST tratados con betabloqueantes. Participa todo el Samur y los servicios de ambulancias. En el estudio se selecciona a los pacientes de forma aleatoria al recibir propranolol frente a no tratamiento y además se comparan los pacientes sometidos a angioplastias y los que no. "Este estudio es fruto de investigaciones previas en animales, un ejemplo claro de investigación traslacional".

En la línea opuesta, de clínica a básica, está Julián Pérez-Villacastín, del Clínico San Carlos. Ha presentado trabajos con ratones en los que trasladan la patología que ven en la clínica. Y Antonio Bayés-Genis, del Hospital Germans Trias y Pujol, en Badalona, también hace traslacional sin olvidar la básica e intentando aplicar lo que ve cada día en la clínica.

las 'omicas'

La genómica, la epigenómica, la transcriptómica, la proteómica y la metabolómica permiten, por primera vez, investigar simultáneamente todos los aspectos de la biología de una célula, tejido u organismo y establecer las conexiones entre sus componentes.
De todas, la genómica, que estudia las mutaciones de nuestros genes, es la más avanzada y gracias a ella es posible detectar millones de variaciones genéticas en cada individuo y analizar su asociación con el riesgo cardiovascular.

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