APARICIÓN DE UNA TROMBOSIS
Pago de 50.000 € por no realizar una eco-Doppler
El Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana ha dictado que se deberá indemnizar con 50.000 euros a una paciente cuya artroscopia derivó en una trombosis.
Europa Press. Valencia | 20/09/2012 00:00
La paciente fue operada por una rotura de menisco en su pierna derecha. Ante las continuas molestias, tres meses después le hicieron unas pruebas y le detectaron varios trombos a la altura del gemelo y en la parte posterior de la rodilla y cara anterior del muslo hasta la zona inguinal. Se le acabó diagnosticando trombosis crónica y solicitó como indemnización 200.000 euros.
El expediente administrativo constata que la operación se realizó sin incidencias y que en el consentimiento informado (CI) figuraba la posible producción de trombos. No obstante, el forense de parte indica en su informe que durante las revisiones no se ordenó la práctica de una eco-Doppler, que se mandó realizar a los tres meses de la intervención; una técnica "muy sencilla, que debió practicarse al principio, nada más ver la desfavorable evolución del proceso". Otros informes que no ven mala praxis también apuntan que debió solicitarse antes.
El TSJ rebaja la indemnización a 50.000 euros porque las secuelas estaban recogidas en el CI, pero considera que eso no exonera al médico de adoptar desde el principio las medidas necesarias para evitarlas.
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