#MiprioridadEnSanidad. Pedro Soriano: trabaja con personas, no por colores

Pedro Soriano, enfermero y creador de #FFpaciente, es la tercera firma en la serie de colaboraciones de 10 profesionales 2.0 para el especial #EleccionesDM previo al 26-J. Lea también los post de Enrique Gavilán y Pilar Barral.

Pedro Soriano. Enfermero y creador de #FFpaciente | 14/06/2016 11:00

Pedro Soriano, enfermero y creador de #FFpaciente, ha escrito #MiPrioridadEnSanidad para #EleccionesDM. (Pedro Soriano)

En una España donde las palabras tienen más poder que los hechos, hoy quiero rescatar un término que un día nos impulsó a mejorar nuestro sistema sanitario español: la motivación.

Sí, ese sentimiento que en reiteradas ocasiones nos impulsa a mejorar las cosas y que aún tengo la esperanza de que las personas con poder de decisión sobre las políticas sanitarias no hayan olvidado, dada la trascendencia que sus decisiones tienen sobre el estado de salud de los españoles.

Como ciudadano, y también como enfermero, no puedo obviar una serie de reflexiones, que deseo compartir tanto con vosotros, lectores, como con el gobierno que se forme tras las próximas elecciones y que evidentemente tendrá la facultad de influir notablemente en nuestro día a día.

En primer lugar deseo plantear al nuevo gobierno que se regularice de algún modo la situación de los derechos laborales de los profesionales de la salud. Soy consciente de que esa atribución corresponde a las diferentes autonomías. Pero deberían evitarse situaciones dispares e incluso de gran dificultad para conseguir trabajo dentro del Sistema Nacional de Salud, SNS, en función de cada comunidad.

Estamos hiperconectados fuera de nuestro sistema sanitario, pero no dentro de él

En la profesión enfermera existen múltiples diferencias en la baremación de las competencias que desarrollan las diferentes regiones. Unificar criterios y evaluar competencias personales y profesionales sería esencial para mantener un equipo profesional con aptitud y actitud para desarrollar proyectos que mejoren el Sistema Nacional de Salud.

Establecer unos criterios claros de evaluación y formación continuada de los profesionales de la salud para asegurar que los nuevos avances se lleven a cabo dentro de nuestro SNS.

¿Quizás una solución podría ser que el Consejo interterritorial tenga un papel ejecutivo y homogeneizador de la situación de los profesionales sanitarios dentro del SNS?

Unido al primer punto, no puede olvidarse mencionar la gestión sanitaria. Ésta debería desarrollarse por profesionales de la salud con independencia de la disciplina a la que pertenezcan, en base a criterios de capacidad y mérito y no tan solo de filiación política.

La atención primaria debe centrarse en la salud sin olvidar la atención a la enfermedad

La actual designación de gestores hace que sea difícil establecer medidas de mejora o proyectos a medio o largo plazo, dado que las decisiones quedan sujetas a los plazos electorales en los que se pretende sacar rédito político. La salud de la comunidad no debería estar condicionada por la política, sino que tendría que estar reforzada y apoyada por ella.

Otro tema clave que está regulado pero no contemplado en nuestra vida profesional diaria es la investigación. La investigación es sinónimo de desarrollo, no solo de crecimiento personal y profesional, sino de mejoría del SNS con base en la evidencia científica.

Con la investigación mejoramos la calidad de la atención prestada al ciudadano. Necesitamos un compromiso para que los profesionales de la salud que desarrollen su actividad en un Hospital Universitario o centro de salud, dediquen una parte de su tiempo de trabajo a la investigación para mejorar el servicio a la ciudadanía dentro de su lugar de trabajo.

Todo lo que podamos avanzar, repercutirá en el propio sistema y por tanto las personas y los cuidados que demandan/necesitan.

La incorporación progresiva de las Tecnologías de la Información de la Salud (TIC), a pesar de los esfuerzos realizados debe potenciarse más dados los extraordinarios beneficios que reportan. Estamos hiperconectados fuera de nuestro sistema sanitario, pero no dentro de él.

El Consejo interterritorial debe tener un papel más ejecutivo y homogeneizador

Hay que establecer una conexión con la comunidad mejorando la eficacia y eficiencia de nuestra cartera de servicios. Desarrollar programas de big data en salud puede proporcionar posibilidades en la mejora de salud pública, investigación, gestión de recursos sanitarios y por supuesto en avances científicos.

Por último, en cuanto a la atención primaria, me gustaría destacar la importancia que tendría recuperar su valor en el SNS, como eje fundamental del mismo a través de la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad.

Hay que dar el verdadero protagonismo a los profesionales de la salud configurados en equipos de salud que trabajen para lograr mantener sanos a los sanos, minimizando la medicalización y favoreciendo la interrelación con otros niveles de atención y con el resto de recursos sociosanitarios que faciliten una atención cercana a las necesidades y demandas reales de la comunidad a través de la participación activa de la población en la toma de decisiones.

Una atención primaria que se centre en la salud sin olvidar la atención a la enfermedad y en la que las TIC se incorporen como herramienta fundamental de comunicación.

Por todo lo anterior, pediría al gobierno que se forme tras las elecciones del 26 de junio que valoren el abordaje y cumplimiento de las reflexiones que aquí expongo. Ya que si se potencian éstos, se refuerza el SNS y, por tanto, los servicios prestados en prevención y mantenimiento de la salud