CONGRESO ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES 2017
Los MIR de cardiología 'tratarán' a robots
En el congreso de la SEC se han presentado varias iniciativas tecnológicas, entre las que destacan un registro de desfibriladores y un programa de formación con robots.
Isabel Gallardo Ponce/ María Sánchez-Monge | 30/10/2017 00:00
Manuel Anguita, nuevo presidente de la SEC, en una simulación clínica. (Mauricio Skrycky)
La simulación del acto médico permite no sólo mejorar la formación del facultativo sino también la seguridad del paciente. Manuel Anguita, que asumió el cargo de presidente de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) en el Congreso de las Enfermedades Cardiovasculares SEC 2017, celebrado en Madrid, ha hecho una clara apuesta por la formación de los profesionales pero también en el grado y el posgrado. De ahí que a partir del primer trimestre de 2018 la SEC pondrá en marcha 16 cursos becados de simulación básicos y avanzados dirigidos a los residentes de segundo y quinto año de Cardiología y que se realizarán en la sede de la Fundación Pública Andaluza Progreso y Salud, en Granada.
"Los residentes pasarán una jornada de 8 horas en la que se enfrentarán a 6 casos clínicos". Se trata de que los alumnos, siempre acompañados, se enfrenten a diferentes situaciones clínicas y sepan realizar una exploración, un diagnóstico, pedir las pruebas pertinentes y aplicar el tratamiento según las necesidades del paciente-robot, siempre controlando las constantes vitales y trabajando junto a otros profesionales. El maniquí responderá tanto de forma hablada -la voz la pondrá el docente desde otra habitación- como con respuestas fisiológicas en función de si las acciones del alumno son correctas o no. Así se desarrollan conocimientos, habilidades de empatía, de comunicación y de trabajo en equipo. "Al realizar una simulación uno se mete tanto en el caso que te olvidas de que es un maniquí. Esta acción es una apuesta de la SEC por mejorar la formación y la seguridad del paciente. Si la experiencia es buena se aplicará a todos los residentes en formación y a los especialistas para la reactualización y la recertificación".
Registro de desfibriladores
Cada año la muerte súbita produce el fallecimiento de 30.000 personas en España. Según Ignacio Fernández Lozano, secretario general de la SEC, el Samur tarda un tiempo medio de 8 minutos en atender una urgencia de este tipo. La rapidez en abordar una parada cardiaca es fundamental y por cada minuto sin recibir una desfibrilación se reduce un 10 por ciento la supervivencia. "La probabilidad de sobrevivir con un buen estado neurológico tras 8 minutos de espera está por debajo del 20 por ciento. La muerte súbita es una de las cenicientas de la Medicina. De ella se habla, se investiga y se invierte poco".
Puesto que en España hay unos 2,6 desfibriladores por cada 10.000 habitantes y sólo el 3 por ciento de la población sabe cómo realizar una reanimación cardiopulmonar (RCP), la SEC se ha unido a la Cruz Roja para crear la aplicación Ariadna, un proyecto que geolocalizará la ubicación de todos los desfibriladores externos automáticos (DEA) y que reclutará a voluntarios para participar. "De los voluntarios de Cruz Roja 50.000 están preparados para realizar RCP básica", ha explicado Manuela Cabero, vicepresidenta de Cruz Roja.
La app permitirá localizar una parada cardiaca en la calle, avisar al voluntario más próximo y señalarle dónde se encuentra el DEA más cercano. Según Lozano, ante una llamada al 112, el operador tendrá toda esa información y podrá dar la voz de alarma. "Queremos sensibilizar y motivar a la sociedad civil. Hay pocas cosas que puedan salvar tantas vidas como una RCP realizada en la calle", ha añadido Cabero.
Lozano ha recordado que España se encuentra a la cola de Europa en el número de DEA y ha pedido la creación de un Plan Nacional de Muerte Súbita, así como la implantación de desfibriladores en todos los lugares públicos y privados posibles.
Mujeres cardiólogas
Según Luis Rodríguez Padial, vicepresidente de la SEC, el congreso ha querido poner en perspectiva la investigación española en Cardiología, así como el papel de la mujer en la especialidad. Según el estudio Diferencias de género en la carrera profesional de los cardiólogos en España, el 40 por ciento de los 2.213 cardiólogos son mujeres. No obstante, ellas pierden representatividad a medida que ascienden en la jerarquía asistencial y académica. De hecho, sólo ostenta el 19 por ciento de las jefaturas clínicas, y el 11 por ciento de las jefaturas de servicio. Además, se decantan por especialidades menos invasivas, lo que se refleja en que el 32 por ciento se dedican a la cardiología clínica, un 28 por ciento a imagen cardíaca y un 10 a hemodinámica.
- El 40% de los cardiólogos son mujeres, pero solo ocupan el 11% de las jefaturas de servicio de los hospitales españoles, según un nuevo estudio
Síndrome coronario agudo
En el congreso se han presentado diversos trabajos sobre el diagnóstico y el tratamiento del síndrome coronario agudo, como el estudio Sparta, que muestra que clopidogrel sigue siendo el fármaco más utilizado en España en la doble terapia de antiagregación plaquetaria, basada en aspirina junto con un inhibidor del P2Y12. Le sigue de cerca ticagrelor y, a mayor distancia, prasugrel.
Sparta es un registro que, en palabras de uno de sus coordinadores, Pedro Luis Sánchez, jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Universitario de Salamanca, pretende obtener "una fotografía de cómo se maneja el SCA en referencia al tratamiento antiagregante". Lo ha puesto en marcha la Fundación de Investigación en Red en Enfermedades Cardiovasculares (Fircava) y ha contado con la participación de 1.466 pacientes de 34 hospitales españoles. Se ha incluido SCA tanto con como sin elevación del ST.
Se recogen variables medidas en el ingreso en el hospital, en el momento del alta, a los 30 días del episodio, a los 12 y a los 18 meses. Se han recabado datos de antecedentes personales, factores de riesgo cardiovascular, tratamientos previos incluyendo los antitrombóticos, evaluación de la gravedad del paciente al ingreso, tipo de SCA, procedimientos diagnósticos y terapéuticos realizados, complicaciones y el diagnóstico de alta. Los datos que se acaban de difundir corresponden a los resultados a los 30 días y muestran que el riesgo de hemorragia en los pacientes que siguen esta terapia se sitúa por debajo del 1 por ciento y, por lo tanto, es bajo.
- Un aumento de la quimiocina SDF-1 en sangre podría constituir un marcador de mal pronóstico en pacientes con SCA
También se ha observado un riesgo reducido de eventos cardiovasculares -entre el 5 y el 6 por ciento- en el periodo del análisis. En cuanto al perfil típico de los afectados, Sánchez explica que sigue siendo el mismo de hace años: "Varón, de edad avanzada, hipertenso y dislipémico".
Otro dato interesante es que, transcurrido un mes del episodio, la mayoría de los pacientes siguen con la doble antiagregación. "Hemos observado una buena adherencia", aprecia Sánchez. Respecto al mayor uso de clopidogrel, el cardiólogo puntualiza que las guías recomiendan, en general, "ticagrelor y prasugrel por encima de clopidogrel". El hecho de que se emplee de forma preferente este último podría deberse, entre otras cuestiones, "a que las recomendaciones de las guías tardan en trasladarse a la práctica clínica".
Las guías de práctica clínica para el tratamiento del SCA recomiendan el uso de una estrategia invasiva y otra farmacológica. En lo que afecta a esta última, aconsejan mantener la doble antiagregación durante un año. Los estudios publicados hasta la fecha no muestran grandes ventajas derivadas de una prolongación de esta terapia. "Los resultados son neutros", comenta Sánchez, quien, no obstante, agrega que "podría haber un subgrupo de pacientes que se beneficiasen de una mayor duración de la doble antiagregación". De ahí que este cardiólogo anuncie que los datos más interesantes de Sparta llegarán, probablemente, cuando se conozcan los resultados a 18 meses. En ese momento se sabrá en cuántos pacientes con SCA se ha optado por prolongar la terapia por encima de lo que recomiendan las guías y cuáles han sido las consecuencias.
Biomarcadores
Entre los estudios sobre biomarcadores de SCA se encuentra el presentado por el grupo de Alfredo Bardají, jefe del Servicio de Cardiología del Hospital Joan XXIII, de Tarragona, que da cuenta de la implicación pronóstica del factor 1 derivado de células estromales (SDF-1). Se trata de una quimiocina que se expresa en una amplia variedad de tejidos y que se ha asociado a reparación tisular. "Partimos de la hipótesis de que una elevación de esta molécula se relacionaría con una mayor reparación celular", explica el cardiólogo. Sin embargo, no fue así, y los investigadores constataron con sorpresa que, en realidad, se asocia a un mal pronóstico.
El estudio se realizó con las muestras sanguíneas de 276 pacientes obtenidas en el momento de realizar la coronariografía y recogidas en un biobanco. En la fase aguda -el segundo o tercer día de hospitalización- el análisis en cuartiles mostró que "cuanto más elevado estaba SDF-1, peor era el pronóstico; y, de forma significativa, el cuartil 4 se asoció a muy mal pronóstico". El análisis de regresión reveló que podría convertirse, en el futuro, en un marcador pronóstico independiente.
Tras la huella de la muerte súbita
Durante el congreso de la SEC también se han presentado dos estudios firmados por Óscar Campuzano Larrea, que dan nuevas pistas sobre el componente genético de la muerte súbita. Uno de los grandes enigmas de la Medicina es la aparición de la muerte súbita en lactantes. Según uno de los trabajos, la realización de un electrocardiograma (ECG) en neonatos es una medida simple, no invasiva y de bajo coste económico que permite identificar precozmente a aquellos bebés de alto riesgo. Campuzano presentó el trabajo titulado Detección precoz de muerte súbita infantil: ECG neonatal sistemático, estudio genético y traslación familiar, para identificar de forma temprana las alteraciones cardíacas.
En el primer año del proyecto se realizaron 426 ECG en neonatos durante las primeras 72 horas de vida en un hospital de tercer nivel. Según los resultados, un 3,12 por ciento de las madres estaban en tratamiento con un fármaco alargador de QT y un 9,57 por ciento de las madres mostraron patología durante el embarazo: el 4,25 por ciento hipotiroidismo, el 2,12 depresión, el 2,24 diabetes gestacional y un 1,06 alteraciones congénitas cardiacas.
Se observó que en el 2,1 por ciento de casos había antecedentes familiares de muerte súbita y se identificaron 14 casos que presentaban prolongación del intervalo QTc. El estudio genético reveló al menos una variante rara potencialmente causante del síndrome de QT largo en el 35,71 por ciento. Se realizó ECG a padres y hermanos de los 14 casos, hallando alteraciones en 4 familiares.
En jóvenes
En el segundo trabajo, Muerte súbita juvenil. Estudio genético post mortem y traslación familiar, se trató de identificar la variante genética causante de la muerte súbita en una cohorte post mortem de 75 casos fallecidos antes de los 18 años. “Un 40 por ciento de los casos analizados eran portadores de variantes genéticas que podrían ser responsables del fallecimiento repentino. De estos, el 28 por ciento mostró correlación familiar, reforzando el papel patogénico de la mutación identificada”, ha explicado Campuzano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario