domingo, 16 de septiembre de 2012

bioetica & debat - Artículos ► Paradojas éticas inherentes a las publicaciones tecnocientificas

texto completo ►
bioetica & debat - Artículos

Artículos

Page (1) 2 3 4 »
Ética de la gestión clínica : Paradojas éticas inherentes a las publicaciones tecnocientificas
Enviado por cesierra48 on 4/9/2012 9:58:00 
PARADOJAS ÉTICAS INHERENTES A LAS PUBLICACIONES TECNOCIENTÍFICAS

Carlos Eduardo de Jesús Sierra Cuartas
Profesor Asociado, Universidad Nacional de Colombia
Miembro del Comité de Ética de la Investigación, Universidad Nacional de Colombia, Medellín

Más allá de la mitomanía

La ciencia moderna pasa por ser el paradigma por antonomasia para comprender el mundo tanto natural como humano. En principio, esto puede ser así a condición que se apuren al máximo tres principios epistemológicos que le son consustanciales, a saber: el principio de inteligibilidad, el principio de objetividad y el principio dialéctico. Sin embargo, ¿qué sucede cuando la práctica de estos tres principios esenciales deja que desear? En pocas palabras, las paradojas éticas saltan como liebres por doquier.


En la civilización actual, cabe captar todo un frenesí para adjetivar como “científico”, o cosa parecida, todo aquello que trate de hacerse pasar por dizque objetivo, pero, advirtámoslo, suele tratarse de una curiosa acepción de objetividad que tiende a convertirse en sinónimo de infalibilidad e incuestionabilidad cuando el tinte ideológico no queda a un lado, perdiendo así de vista el carácter provisorio de las verdades científicas. Botón de muestra, las contrarreformas neoliberales en materias como salud, educación y economía en general adolecen de este talón de Aquiles. De forma más general, políticos, administradores y burócratas abusan las más de las veces del lenguaje científico sacado de contexto. De facto, el modelo económico aún en boga ilustra bastante bien a este respecto.

En efecto, según destaca Jeremy Rifkin, los padres de la economía clásica, como Adam Smith y Jean-Baptiste Say, usaron la física newtoniana como inspiración a fin de estructurar en forma metafórica la naciente ciencia económica. Así, el equivalente económico clásico de la ley de acción y reacción es la ley de oferta y demanda. Del mismo modo, el principio que sostiene que la oferta genera su propia demanda es la versión económica de una máquina de movimiento perpetuo, una violación flagrante del segundo principio de la termodinámica. En otras palabras, la economía clásica y neoclásica no toma en consideración las restricciones al crecimiento económico impuestas por las leyes de la termodinámica, lo que hace del grueso de los economistas unos malos epistemólogos. Además, cuando una disciplina se apoya en el uso de analogías y metáforas para su estructuración, el rigor científico correspondiente es muy laxo.

Y, claro está, lo que la economía vigente y otras disciplinas producen entra a nutrir, para bien o para mal, las publicaciones tecnocientíficas en sentido amplio. Pero, preguntémonos: ¿Qué tan valioso es tal conocimiento para el momento actual, correspondiente al colapso del paradigma civilizatorio que nos ha tocado conocer, entroncado en la hace rato exangüe Segunda Revolución Industrial? En todo caso, la solución a la crisis civilizatoria presente, dada su complejidad, no admite su reducción a meras propuestas tecnológicas.

La necesidad de separar el oro de la paja

En su libro "La venganza de la Tierra", James Lovelock, al tratar de las posibles soluciones de emergencia para transitar a través del colapso civilizatorio, insiste en la necesidad de redactar un libro especial destinado a los supervivientes, un libro con el conocimiento realmente pertinente para una humanidad disminuida que debe reconstruir la civilización sobre unas mejores bases éticas que las del patético paradigma civilizatorio que colapsa. En lo esencial, Lovelock señala que dicho libro ha de combinar el conocimiento de la Biblia, esto es, los límites de comportamiento y unos parámetros sanitarios, con el conocimiento científico, dos conocimientos que, en cualquier caso, no pueden perderse. Ahora bien, tal libro todavía no existe y carecen prácticamente de utilidad los conocimientos tecnocientíficos procedentes de diversos medios, como libros y programas de radio y televisión, entre tantos otros. Como bien fustiga Lovelock, ¿de qué les servirán a los supervivientes de una futura inundación o hambruna las ideas de un lobby ecologista, los comunicados de prensa de las multinacionales de la energía o los informes de los comités gubernamentales? En una palabra, para nada.
Page (1) 2 3 4 »

No hay comentarios: