La nueva receta médica privada proporcionará a pacientes y médicos garantías de seguridad y trazabilidad y evitará falsificaciones

Madrid (11/01/2013) - Ana Montero

Los Consejos Generales de las profesiones prescriptoras, médicos, dentistas y podólogos, han presentado el nuevo modelo de receta médica privada, que entrará en vigor el 21 de enero, según lo establecido en el RD 1718/2010, por el cual, las recetas médicas privadas, tanto en soporte papel como electrónico, tendrán un formato homogéneo en todo el territorio nacional e incorporarán, como novedad, un código de verificación electrónica (CVE) que garantizará su autenticidad, la identidad del prescriptor y su habilitación para el ejercicio profesional

Tal y como ha explicado el Dr. Juan José Rodríguez Sendín, presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), los médicos que ejercen en la Sanidad privada contarán a partir del 21 de enero con un modelo unificado y homogéneo de receta para garantizar la seguridad y la autenticidad de la prescripción, según lo establecido en el Real Decreto 1718/2010, sobre receta médica y órdenes de dispensación. Así pues, a partir de esa fecha, todas las recetas que extiendan los médicos, odontólogos y podólogos de la Sanidad privada tendrán un formato homogéneo en todo el territorio nacional, que incluirá un código de verificación electrónica (CVE), y contemplará una serie de procedimientos que garanticen la autenticidad y la máxima seguridad.
Así pues, según han explicado los representantes de las corporaciones que han presentado esta plataforma única de prescripción, el Dr. Pedro Hidalgo, presidente del Colegio de Médicos de Badajoz y miembro del Observatorio de la Prescripción; el Dr. Alfonso Villa Vigil, presidente del Consejo General de Colegios de Odontólogos y Estomatólogos de España; y Manuel Meneses, vicepresidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Podólogos, junto al presidente de la OMC, la nueva receta privada, tanto en soporte papel como electrónico, incorpora medidas de seguridad que garantizan su autenticidad, la identidad del prescriptor y su habilitación para el ejercicio profesional y, en este sentido, aporta elementos de garantía para la sociedad; para el propio médico, que incluso puede anular la validez de las recetas en cualquier momento; para los empleadores de los médicos; y para los farmacéuticos.
"Estamos presentando un elemento de capital importancia para la salud de los españoles y para mejorar el uso adecuado de los medicamentos, de hecho, este nuevo modelo de prescripción introduce más garantías de seguridad de las que se han tenido hasta ahora", ha señalado Rodríguez Sendín. Al respecto, tal y como ha matizado, "hasta el 15 por ciento de las urgencias hospitalarias están provocadas por el manejo inadecuado de los fármacos, de manera que con este nuevo modelo de receta esto va a ser más difícil, porque siempre detrás de una prescripción se va a poder identificar al médico que la ha hecho".
En otro orden de cosas, tal y como ha manifestado el presidente de la OMC, esta iniciativa surge con vocación de cumplir con la Directiva de Sanidad Transfronteriza, "en un futuro, no muy lejano, quizá a finales de 2013, esta receta tendrá que valer, con esas máximas garantías, para cualquier país de la Unión Europea".

Un código de barras para evitar falsificaciones
Según han comentado los expertos, actualmente se estima que hay unos 45.000 médicos, 26.000 odontólogos y 6.000 podólogos colegiados que se dedican al ejercicio privado de su profesión y que, hasta ahora, no estaban obligados a utilizar un modelo concreto para recetar medicamentos a sus pacientes. Sin embargo, este Real Decreto 1718/2010 ha otorgado a los consejos generales de estas profesiones la competencia en exclusiva sobre la receta médica privada y les responsabiliza de la edición, gestión y control de la misma y de tomar y de introducir las medidas o sistemas necesarios que garanticen su autenticidad y dificulten el fraude.
En este sentido, para llevar a cabo este proyecto, en el que también ha colaborado el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, se ha desarrollado una plataforma tecnológica que genera un código de verificación electrónica (CVE), un código de barras, único para cada receta, a partir de los datos del prescriptor y del número de cada receta, que permite tener la trazabilidad de la misma. Además, esta plataforma ofrece la opción, si fuera necesario, de anular determinadas recetas o un lote por motivos terapéuticos o, en casos de pérdida o robo, guarda la información en una central de datos, donde se puede consultar el estado de la receta y verificar los datos del prescriptor. "En la receta se identifica al médico con todos sus datos, desde el domicilio a especialidad a la que pertenece y el número de colegiado, es válida en todo el territorio nacional y en todas las farmacias", ha apuntado el experto, quien también ha añadido que la receta incluirá, además de los datos del prescriptor; los del paciente, con nombre, apellidos, año de nacimiento y número de DNI, NIE o pasaporte; los datos del medicamento, que en caso de tratarse de estupefacientes, estarán sujetos a la normativa específica actual; y constará de dos partes, la receta en sí, en la que sólo se puede prescribir un medicamento, y una hoja de información al paciente.
"Esto evitará también posibles falsificaciones ya que, hasta ahora, las recetas privadas se rellenaban a mano y sin ningún control, ahora la firma es lo de menos, incluso el papel, que antes se creía que era la garantía, ahora la clave están en el código de barras que, una vez, leído, es irrepetible", ha asegurado el Dr. Hidalgo.
Del mismo modo, los expertos han señalado que el médico, dentista o podólogo prescriptor deberá solicitar el talonario o lote de recetas al colegio al que pertenece, pidiendo un talonario para cada especialidad y para cada centro donde realice su trabajo, y se prevé que el coste de cada receta sea de un céntimo de euro. En el caso de los médicos que puedan tener más de una especialidad y las ejerza, deberá solicitar las recetas, con cada una de las especialidades correspondientes. Además, deberá indicar la población donde ejerza y, en el caso de que pase consulta en distintas poblaciones o provincias, deberá incluir los datos del domicilio donde pase la consulta. Asimismo, como han especificado, la receta quedará bajo la custodia del farmacéutico por un periodo de tres meses y su validez será de diez días, una vez realizada la prescripción, al igual que ocurre con las recetas del sistema sanitario público.
Por su parte, Rodríguez Sendín ha querido aclarar que aunque estos nuevos modelos estarán disponibles a partir del 21 de enero, la obligatoriedad de su uso no se hará efectiva hasta que el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad no publique una Orden Ministerial que desarrolle el Real Decreto, "nuestra obligación es tener disponible el documento, la segunda parte, la Orden Ministerial, es deseable que esté disponible en un tiempo no superior a un trimestre", ha apuntado el presidente de la OMC quien, al ser preguntado por la postura del Colegio de Médicos de Cataluña ante este nuevo modelo de prescripción, ha respondido que hasta que el Ministerio no desarrolle el Real Decreto sí que se podrán utilizar otros formatos, como el que ha desarrollado para las recetas privadas esta comunidad.