"Preocupa más la demora diagnóstica que la cirugía"

Francisco del Busto, consejero de Sanidad de Asturias, opina que tras las elecciones generales hará falta un gran pacto para revisar la cartera y la política de recursos humanos.

Laura G. Ibañes. Madrid | laura.gutierrez@diariomedico.com | 23/11/2015 00:00

El consejero de Salud de Asturias, Francisco del Busto, la pasada semana en la sede de Diario Médico. (Skrycky)

Médico, excoordinador de Urgencias del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) y exgerente del área sanitaria Valle del Nalón, Francisco del Busto heredó la Consejería de Sanidad de Asturias con el reto de culminar la reordenación de áreas sanitarias, recobrar la calma tras la polémica por los retrasos en la puesta en marcha real del nuevo HUCA y poner en práctica los compromisos adquiridos por el Gobierno autonómico en su momento para acallar la huelga de tres meses que vivió su predecesor en el cargo por la forma de aplicar la ampliación de jornada decretada con carácter nacional.

Sus primeros meses al frente de la Consejería parecen dejar claro que no tiene tabúes ni premisas políticas de partido inamovibles. Con un gobierno socialista pendiente de pactos con IU y Podemos, ha llegado a decir, por ejemplo, sobre el área única: "En esto me siento más cerca del PP de Madrid que del PSOE de Aragón".

PREGUNTA. ¿Qué se puede esperar de los presupuestos para 2016?
RESPUESTA. Se presentarán en breve. Dependen del pacto con Izquierda Unida y con Podemos, pero la sanidad tendrá un incremento importante, superior al 6 por ciento, y sobrepasará ya los 1.600 millones de euros.

P. ¿Qué se priorizará con ese incremento?
R. El Capítulo I, porque tenemos compromisos de legislatura, como la recuperación de los días perdidos o de la paga extra. Pero también otros dos capítulos en los que queremos incidir: la salud mental y la atención primaria.

P. ¿A qué compromisos de legislatura se refiere en materia de personal?
R. Al concurso de traslados que ya está en marcha para los enfermeros y que lanzaremos en diciembre para los médicos, entre otras cuestiones.

P. ¿No habrá OPE?
R. En cuanto cerremos el concurso de traslados y sepamos qué nivel de interinos y eventuales tenemos podremos convocarlas. Actualmente estimamos que el 48 por ciento de las plazas son de interinos.

P. ¿Debería articularse una política de recursos humanos igual para todas las autonomías?
R. Tras las elecciones del 20 de diciembre debería haber un pacto por la sanidad en todas las grandes cuestiones; desde luego en recursos humanos, pero también en cartera básica y en las funciones del Consejo Interterritorial de Salud, como mediador no sólo entre las autonomías y el Ministerio sino también entre los profesionales.

P. Decía antes que quiere priorizar la atención primaria en los presupuestos. ¿A qué se refiere, a mayor capacidad de resolución o a mayores plantillas, ya que los sindicatos están criticando demoras en AP por las bajas sustituciones?
R. Las plantillas de atención primaria son las adecuadas a las necesidades asistenciales; eso no es óbice para que en determinados casos puntuales y lugares pueda haber una ratio de sustituciones que no se adecúe a las necesidades. Por eso lo primero que queremos hacer es conocer bien el número de tarjetas por médico y las características de la población a la que se atiende para adecuar mejor las sustituciones necesarias. Pero al hablar de potenciar AP me refería a empoderar más a los profesionales, dotarles de mayor capacidad diagnóstica, avanzando, por ejemplo, en teleconsultas. Hay que tener en cuenta que la cronicidad es lo que puede llevarse por delante a todo el sistema sanitario y a los crónicos se les atiende desde primaria.

P. Se ha criticado también el retraso en la publicación de las demoras. ¿Prevé cambios en la gestión de listas de espera?
R. Mi compromiso es sacar en el menor tiempo posible, esto es en 2016, un decreto que trate no sólo de tiempos máximos de demora sino de la gestión y la transparencia de las listas. Desde hace un mes se están ya publicitando las listas.

P. ¿Y qué dicen los datos?
R. Lo que dicen es que nos movemos en niveles malos de listas de espera quirúrgicas, comparables a los de otras autonomías, pero malos. Pero mi preocupación no es tanto la lista quirúrgica como la de consultas externas. Me preocupa más la demora de diagnóstico que la de cirugía, y en reducir la espera diagnóstica es en lo que trabajaremos.

P. ¿Derivando a la privada? ¿Con autoconcertación?
R. Con todos y cada uno de los elementos posibles. Los planes de choque no me gustan y queremos una solución estratégica.

P. ¿Eso incluye mantener los módulos de tarde para incrementar la actividad?
R. Creo que no debe haber una política general sino un análisis área por área; si los rendimientos son mejores añadiendo media hora por la mañana y se firma un pacto de objetivos y esos objetivos se cumplen, no tengo ningún interés en que se trabaje por la tarde. Pero todo debe evaluarse por servicios y por objetivos.

P. Habla de firmar compromisos y objetivos ¿Le gusta el modelo de gestión clínica del Ministerio?
R. En Asturias tenemos un modelo de gestión clínica propio, con más de 70 unidades. Yo soy un fiel defensor de los modelos de gestión clínica porque cuando un directivo no se cree el proyecto, el proyecto fracasa; pero cuando los profesionales no se sienten escuchados o apoyados por el directivo el proyecto también fracasa.

"El Interterritorial debería aunar posturas de autonomías y de profesionales"

El consejero Francisco del Busto opina que "los presupuestos para sanidad deberían ser más finalistas y todas las nuevas prestaciones deberían pasar por el Consejo Interterritorial para decidir sobre ellas".
Se queja de que en el caso de la hepatitis C, por ejemplo, quien decidió fue el Ministerio, "y a fecha de hoy no hemos visto todavía ni un duro y no sabemos ni siquiera a qué precio final pagaremos los fármacos".
Sólo esa partida lastrará sus cuentas en 22 millones de euros, a lo que habrá que añadir el sobrecoste por la subida del IVA. Tampoco parece cómodo con la supresión del Fondo de Cohesión sanitaria y cree que para resolver la atención a los desplazados "habría bastado con que el Ministerio hubiera dejado las cosas como estaban".
Experiencias como esa y problemas inminentes como el de los nuevos partes de gestión de la incapacidad temporal "sobre los que todavía hay muchas dudas" le hacen pensar en la necesidad de un Interterritorial vinculante "que aúne posturas no sólo de autonomías y Ministerio sino también de los profesionales".