José A. Plaza | 15/03/2016 11:46
José Ramón Repullo, jefe del Departamento de Planificación y Economía de la Salud en la Escuela Nacional de Sanidad del Instituto de Salud Carlos III, ha dicho este martes que, aunque las cantidades absolutas de inversión sean muy diferentes, "las desigualdades sanitarias entre autonomías no son tan importantes en España, aunque sí están políticamente amplificadas".
Las cifras marcan diferencias relevantes, ha matizado, pero al introducir variables como edad, dispersión, cápita, etc, se reducen en parte. En una jornada sobre equidad y acceso a fármacos oncológicos, organizada en Madrid por la Fundación ECO, ha añadido que las desigualdades en salud (tasa de mortalidad, por ejemplo) sí son más importantes, no solo entre autonomías, sino entre barrios de una misma ciudad.
"Yo apruebo moléculas, tú búscate la vida"
"El Ministerio no tiene presión financiera. La tienen las autonomías, así que no podemos criticar que se defiendan". Repullo considera que prima el yo apruebo moléculas, tú búscate la vida en la relación entre Gobierno central y autonomías, por lo que opina: "Quizá el Ministerio debería asumir riesgos económicos, como las comunidades".
- Repullo cree que las desigualdades en salud -como tasa de mortalidad- son más acusadas que las desigualdades en inversión sanitaria
Como reflexión general, ha añadido: "En los años de crisis y austeridad atolondrada, se ha cortado grasa, músculo y grasa". A su juicio, "hay un uso abusivo del término innovación", ya que considera que "no todas las innovaciones deben estar conectadas con la investigación. La innovación en gestión, por ejemplo, puede mejorar indicadores clínicos".
Concretando en cáncer, ha dicho que adelantar el diagnóstico no siempre conlleva alterar el curso de la enfermedad o reducir la mortalidad, aunque sí ganar años de supervivencia, un indicador que, visto así, puede ser algo engañoso: "No nos hagamos trampas al solitario".
Empresas y precios
En torno a las compañías farmacéuticas, se ha mostrado preocupado por la evolución de su negocio, con una política de ventas y adquisiciones de pequeñas empresas que suele reducir su apuesta por la I+D. Ha pedido debatir más en torno a precios y cantidades en la producción y comercialización de fármacos, variando lo que gana una compañía cuando recupera lo invertido mediante una política de cobros según diversas variables.
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