Los sindicatos profesionales de Osakidetza denuncian “un alarmante deterioro de la Sanidad pública vasca”
Nerea Garay
Médicos y enfermeras inician una campaña de concienciación de la ciudadanía y convoca asambleas en los diferentes centros de trabajo para valorar las medidas a adoptar
Bilbao (26/28-2-11).- Los problemas en Osakidetza no dejan de crecer. Las aguas bajan cada vez más revueltas en la mayor entidad -la plantilla supera los 35.000 empleados- del País Vasco. Tanto, que los sindicatos profesionales que agrupan a médicos y enfermeras han denunciado en una rueda de prensa, con presencia de numerosos representantes de las centrales, “un alarmante deterioro de la Sanidad pública vasca".
El Sindicato de Enfermería de Euskadi (Satse), el Sindicato Médico de Euskadi (SME) y la Federación de Facultativos de Hospitales de Euskadi (FFHE) no se han andado por las ramas en sus duras críticas ante una situación que se está haciendo “insostenible”.
Además de considerar que se está produciendo "una pérdida de calidad" en la atención a los pacientes, responsabilizan de esta situación directamente "al consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, y a su equipo". Consideran que mientras el proyecto 'estrella' de la legislatura -la nueva forma de tratar a los enfermos crónicos- "sigue sin cuajar, el día a día de la actividad sanitaria se resiente". “Se resiente porque los que están dirigiendo la Sanidad son gestores que nunca han atendido un paciente y no saben lo que ocurre a pie de cama”, censuró con vehemencia Kepa Urigoitia, secretario general del Sindicato Médico de Euskadi (SME).
Los profesionales reclaman al departamento "un cambio de rumbo". Los tres colectivos que representan a la inmensa mayoría de los facultativos y enfermeros de Osakidetza recalcaron su enfado por "un cúmulo de cosas". "Es un malestar que se va acumulando porque no se ve un horizonte de esperanza", apuntaron, al tiempo que señalaron “sentirse engañados y ninguneados por una administración que pasa olímpicamente de los profesionales que están manteniendo el sistema y que están impidiendo a base de un gran esfuerzo que la atención no esté aún peor”, apuntaron.
Conscientes de la situación de crisis, los profesionales de Osakidetza muestran su comprensión respecto a que se hayan producido recortes, pero "sin que la penuria justifique el deterioro de nuestra Sanidad". En este sentido, critican que no se cubran las sustituciones inferiores a medio año, lo que supone aumentar la carga de trabajo del resto de la plantilla y, con ello, "se resiente gravemente la labor de las personas, que es el pilar central de la atención a los ciudadanos". “Todavía recordamos las promesas del lehendakari López cuando era candidato. Prometió la creación de varios miles de puestos de trabajo, además de incrementar los presupuestos de sanidad. No sólo no ha cumplido su palabra, sino que las medidas adoptadas han ido en dirección contraria a lo que dijo”, recalcó Urigoitia.
Además de por las cuestiones de fondo, las formas de los responsables del Departamento vasco de Sanidad también son causa de malestar entre los empleados. Así, se refieren a la "inexistencia de negociación colectiva" cuando el Acuerdo de Condiciones de Trabajo, pactado con el anterior Ejecutivo vasco, "caducó en 2009".
Mesa sectorial para el entretenimiento
"La mesa sectorial de Osakidetza, cuyo finalidad primordial sería pactar un nuevo acuerdo, se usa para entrenernos", apuntan los medios en referencia a la falta de entendimiento con los responsables de Recursos Humanos, tanto el dimitido Esteban Ruiz como su sucesor en el cargo, Tomás Mendoza, quien accedió al cargo a mediados de enero. «Las reuniones que hemos tenido no han servido para nada», añade Urigoitia, enfadado porque “las órdenes que tenía al director de Recursos Humanos era ésa: pasar el tiempo sin solucionar los problemas”.
Además de para negociar un nuevo convenio, los trabajadores del Sistema Vasco de Salud reclaman que "se cumplan los compromisos en materia de empleo". En concreto, se refieren a la convocatoria de la oferta pública (OPE) anunciada para este año, pero que aún está sin pactar con las organizaciones sindicales.
Las críticas alcanzan, incluso, a la información que la consejería de Sanidad remite al Parlamento vasco. “Tanto en el número de trabajadores como en las listas de espera que presentan faltan a la verdad. Maquillan los datos y siguen engañando a la población”, indican.
Sobre la estrategia de la cronicidad, tal y como apuntó el responsable de la Federación de Médicos de Hospitales Pedro Aizpizua, “no se puede desvestir un santo para vestir otro. Desde 2.009, los directivos de Osakidetza hablan repetidamente de actuaciones, pretendidamente pioneras, orientadas a cambiar el centro de gravedad asistencial, trasladándolos desde los procesos agudos al paciente crónico. Paradójicamente, los cambios anunciados no terminan de llegar y de momento, sólo son palabras huecas, encaminadas a que los gestores políticos y los dirigentes administrativos de la sanidad vasca puedan aparecer en los titulares de los medios de comunicación”.
¿Qué piden los profesionales?
Azpizua deja claro que los facultativos de hospitales no están en contra de la aplicación de las nuevas tecnologías. “Todo lo contrario, pero la innovación tiene que estar al servicio del profesional y no al revés. Estamos trabajando con sistemas arcaícos que nos dificultan enormemente nuestro trabajo”, apunt.a
Encarna de la Maza, del Sindicato de Enfermería Satse, hizo suyas todas las críticas del SME y de la Federación, al tiempo que instó a la Consejería de Sanidad a cambiar de rumbo, “para frenar el declive. La enfermería está asumiendo una carga asistencial que en nada beneficia a los pacientes. No hay sustituciones ni tampoco se impulsa la formación continuada de los profesionales, imprescindible en sanidad”, subraya. “Si Osakidetza hiciera fijo al personal de Enfermería que trabaja todos los días del año con contrato no fijo se ahorrará un millón de euros”.
De la Maza fue también contundente en sus críticas al consejero Bengoa y a su equipo, que “no sólo facilitan datos erróneos al Parlamento, sino que también mienten al Defensor del Pueblo Vasco- Ararteko”. ¿Entonces qué se puede esperar de ellos?”, se preguntó en voz alta.
¿Qué demandan a los responsables de Osakidetza? “Que se sienten a hablar con los profesionales, que tengan voluntad de llegar a acuerdos y que en las reuniones que mantengamos en la Mesa Sectorial con ellos se llenen de contenidos”, sentencian.
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viernes, 25 de febrero de 2011
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