Pediatría denuncia la pasividad del Gobierno con la especialidad

La demanda de que las 19 especialidades pediátricas se reconozcan no es nueva. Pero ahora la Asociación Española de Pediatría (AEP) está dispuesta a dar un golpe en la mesa y exigir al próximo Gobierno que las reconozca oficialmente en pro de reducir costes sanitarios.

Alicia Serrano | 26/10/2011 00:00

Los pediatras llevan treinta años reclamando infructuosamente que se reconozca su labor y un programa de formación específico para cada especialidad pediátrica, pero las administraciones sanitarias hacen oídos sordos a sus peticiones. "España es de los pocos países europeos que no han oficializado el ejercicio de los pediatras, a pesar de que existe la normativa que lo haría posible. Es cierto que el Sistema Nacional de Salud (SNS) reconoce extra oficialmente las especialidades pediátricas. En la puerta de mi despacho cuelga que soy el jefe de la Unidad de Alergología pediátrica del Hospital Universitario La Fe... Soy una realidad, pero se me ignora oficialmente", explica Antonio Nieto, vicepresidente de la Asociación Española de Pediatría (AEP) y coordinador del Libro blanco de las especialidades pediátricas.

Aviso para navegantes
Este libro nace con el espíritu de demostrar al nuevo gobierno que salga de las elecciones del 20 de noviembre cómo la asistencia especializada en Pediatría disminuye los costes sanitarios, al reducir ingresos hospitalarios y visitas a urgencias, y aumenta la calidad asistencial de los niños. "Ello ya está siendo percibido así incluso en países como el Reino Unido, que decidió eliminar la presencia de pediatras en los centros de atención primaria y que está comenzando a reconocer que su modelo presenta graves carencias. De hecho, la mortalidad en nuestro país en los 70 era cuatro puntos superior que la suya, pero en 2008 las tasas de mortalidad cambiaron y la española se situó dos puntos por debajo de la inglesa".

España es de los pocos países que todavía no han oficializado el ejercicio de los pediatras, a pesar de que existe la normativa que lo haría posible

Los pediatras se lamentan de que, aunque es cierto que en el borrador del proyecto de troncalidad la Pediatría figura como un tronco independiente del que dependen el resto de especialidades, todavía queda mucho camino por recorrer. Hace falta definir qué especialidades cuelgan de Pediatría, regular los programas formativos y establecer los años que debería durar cada especialidad a partir de un tronco común. "Hace tiempo tuvimos una entrevista con un representante del Ministerio de Sanidad para pedir que se desarrollase el tronco pediátrico. Entonces nos dijo que no era posible trabajar con hipótesis, sino con realidades... El Libro Blanco es la respuesta a su solicitud, que haremos llegar al próximo ministro y que defiende la lo siguiente: tres años de tronco común en Pediatría, una rama de un año para atención primaria, otra para ejercer en pediatría hospitalaria y dos años para el resto de especialidades".

Al oficializar las especialidades pediátricas, Nieto defiende que se podría evitar la autotitulación y facilitar el salto profesional de los pediatras al extranjero, "que ahora están en desventaja".

OBSTÁCULOS

La AEP quiere alertar al nuevo gobierno sobre las consecuencias negativas que tiene la no oficialidad de las especialidades pediátricas: "Dificulta que se conozca el número de profesionales necesarios, impide garantizar que los hospitales cuenten con expertos en las diferentes patologías pediátricas y es un obstáculo para garantizar una formación homogénea en las regiones".

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