Potenciar el SNS frente a la división en 17 sistemas, entre las propuestas de la FADSP ante el 20-N
Madrid (5/10/2011) - Redacción
La Federación incide en la necesidad de evitar el desmantelamiento del sistema público con medidas como potenciar el papel del Consejo Interterritorial, mejorar la financiación sanitaria en un punto del PIB o poner la AP como eje del sistema
Garantizar la sostenibilidad de la Sanidad Pública, mejorando su financiación en un punto más del PIB y que ésta tenga carácter finalista, profundizar en la integralidad del sistema frente a la fragmentación del mismo en 17 sistemas de salud autonómicos independientes "enfrentados entre sí por relaciones de competencia", potenciando el papel del Consejo Interterritorial "como órgano de colaboración de los servicios de salud autonómicos y del Ministerio de Sanidad" o poner la AP como eje del sistema figuran entre las recomendaciones realizadas por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) a los partidos políticos ante las próximas elecciones generales del 20-N.
En materia de sostenibilidad del sistema y de un SNS más sólido y cohesionado, la FADSP aboga además por recuperar el Plan Integrado de Salud contemplado en la Ley General de Sanidad, "que permita planificar los recursos en todo el estado en función de las necesidades y problemas de salud de la población y que garantice la adecuación, suficiencia y equidad en la distribución de los recursos". Y además, reforzar los fondos de cohesión y garantizar su distribución en función de los objetivos del Plan Integrado de Salud consensuado en el Consejo Interterritorial, para evitar situaciones de desigualdad o de insuficiencia de recursos, o incluir las prestaciones sanitarias de MUFACE en el Sistema Nacional de Salud.
Otro punto destacado a cumplir, para la FADSP, es el de garantizar el carácter público de los recursos sanitarios (titularidad, financiación y gestión) frente a la política de privatización de los centros sanitarios, manteniendo el carácter complementario de los recursos privados.
Incrementar la racionalidad y la eficiencia del sistema y de los centros sanitarios
Este punto incide en la necesidad de situar a la Atención primaria como eje del sistema, "combatiendo la medicalización, el elevado coste y los riesgos para la salud de una Sanidad basada en el uso intensivo de las tecnologías y los medicamentos en contraposición a la promoción de estilos de vida saludables y prevención de la salud, apoyándose en la extensión de la cultura de la salud y del autocuidado".
Para ello, se debe incrementar la capacidad resolutiva de la AP con un impulso decidido de la Estrategia AP 21, que contempla la mejora en el equipamiento y el acceso de los centros de salud a los recursos diagnósticos, evitando la derivación al hospital "con el consiguiente retraso en la atención, las listas de espera, incremento del gasto y la incomodidad de los pacientes".
Garantizar los cuidados y el acceso a la asistencia en sus domicilios a las personas en situación de dependencia con enfermedades crónicas y degenerativas; incrementar las plazas de enfermería; promover la utilización plena de los hospitales y de sus recursos en jornadas de mañana y tarde; articular y potenciar los centros de referencia supracomunitarios para evitar el derroche innecesario de recursos y garantizar la calidad de la atención más especializada; crear una Agencia Única de Evolución de Tecnología; potenciar la
Agencia Única de Compras; crear una Red de Centros para la Atención de Enfermos Crónicos; culminar el despliegue de las áreas sanitarias; o coordinar las redes asistenciales con los servicios de atención a la dependencia son otras medidas que sugiere la Federación.
En materia de gasto farmacéutico, la FADSP habla de "profundizar en su reducción", aplicando medidas que no supongan restricciones de derechos o el acceso de los ciudadanos a los medicamentos (precios de referencia, prescripción por principio activo o potenciación de los medicamentos genéricos).
Políticas incentivadoras
Continuar con los esfuerzos de desarrollo de la atención integrada; potenciar los servicios de Salud Pública; desarrollar una política de personal sanitario incentivadora que potencie el desarrollo de la Carrera Profesional, los incentivos económicos que estimulen la dedicación y la calidad de la atención, la estabilidad en el empleo y una remuneración justa; o potenciar la investigación en salud pública y biomedicina es algo necesario en el ámbito de los RRHH, según la Federación.
Promover la economía de escala en todos los ámbitos e incrementar las transparencia del sistema sanitario, publicando las listas de espera aplicado criterios y estándares homogéneos en todas las comunidades autónomas; establecer un Sistema de Información Sanitaria con indicadores homogéneos en todos los servicios de salud autonómicos; o desarrollar los órganos de participación y control social del sistema actualizando la LGS, para garantizar la calidad de los procesos asistenciales y su adecuación a las necesidades reales de los ciudadanos son otras medidas a aplicar, como lo es garantizar y consolidar derechos ciudadanos en el ámbito de la salud, como la interrupción voluntaria del embarazo en la red pública o el derecho a cuidados paliativos y a una muerte digna y sin dolor.
Para la FADSP, en todo caso, la Sanidad Pública española se enfrenta a un riesgo real de deterioro y privatización, dependiendo del resultado de las elecciones.
En materia de sostenibilidad del sistema y de un SNS más sólido y cohesionado, la FADSP aboga además por recuperar el Plan Integrado de Salud contemplado en la Ley General de Sanidad, "que permita planificar los recursos en todo el estado en función de las necesidades y problemas de salud de la población y que garantice la adecuación, suficiencia y equidad en la distribución de los recursos". Y además, reforzar los fondos de cohesión y garantizar su distribución en función de los objetivos del Plan Integrado de Salud consensuado en el Consejo Interterritorial, para evitar situaciones de desigualdad o de insuficiencia de recursos, o incluir las prestaciones sanitarias de MUFACE en el Sistema Nacional de Salud.
Otro punto destacado a cumplir, para la FADSP, es el de garantizar el carácter público de los recursos sanitarios (titularidad, financiación y gestión) frente a la política de privatización de los centros sanitarios, manteniendo el carácter complementario de los recursos privados.
Incrementar la racionalidad y la eficiencia del sistema y de los centros sanitarios
Este punto incide en la necesidad de situar a la Atención primaria como eje del sistema, "combatiendo la medicalización, el elevado coste y los riesgos para la salud de una Sanidad basada en el uso intensivo de las tecnologías y los medicamentos en contraposición a la promoción de estilos de vida saludables y prevención de la salud, apoyándose en la extensión de la cultura de la salud y del autocuidado".
Para ello, se debe incrementar la capacidad resolutiva de la AP con un impulso decidido de la Estrategia AP 21, que contempla la mejora en el equipamiento y el acceso de los centros de salud a los recursos diagnósticos, evitando la derivación al hospital "con el consiguiente retraso en la atención, las listas de espera, incremento del gasto y la incomodidad de los pacientes".
Garantizar los cuidados y el acceso a la asistencia en sus domicilios a las personas en situación de dependencia con enfermedades crónicas y degenerativas; incrementar las plazas de enfermería; promover la utilización plena de los hospitales y de sus recursos en jornadas de mañana y tarde; articular y potenciar los centros de referencia supracomunitarios para evitar el derroche innecesario de recursos y garantizar la calidad de la atención más especializada; crear una Agencia Única de Evolución de Tecnología; potenciar la
Agencia Única de Compras; crear una Red de Centros para la Atención de Enfermos Crónicos; culminar el despliegue de las áreas sanitarias; o coordinar las redes asistenciales con los servicios de atención a la dependencia son otras medidas que sugiere la Federación.
En materia de gasto farmacéutico, la FADSP habla de "profundizar en su reducción", aplicando medidas que no supongan restricciones de derechos o el acceso de los ciudadanos a los medicamentos (precios de referencia, prescripción por principio activo o potenciación de los medicamentos genéricos).
Políticas incentivadoras
Continuar con los esfuerzos de desarrollo de la atención integrada; potenciar los servicios de Salud Pública; desarrollar una política de personal sanitario incentivadora que potencie el desarrollo de la Carrera Profesional, los incentivos económicos que estimulen la dedicación y la calidad de la atención, la estabilidad en el empleo y una remuneración justa; o potenciar la investigación en salud pública y biomedicina es algo necesario en el ámbito de los RRHH, según la Federación.
Promover la economía de escala en todos los ámbitos e incrementar las transparencia del sistema sanitario, publicando las listas de espera aplicado criterios y estándares homogéneos en todas las comunidades autónomas; establecer un Sistema de Información Sanitaria con indicadores homogéneos en todos los servicios de salud autonómicos; o desarrollar los órganos de participación y control social del sistema actualizando la LGS, para garantizar la calidad de los procesos asistenciales y su adecuación a las necesidades reales de los ciudadanos son otras medidas a aplicar, como lo es garantizar y consolidar derechos ciudadanos en el ámbito de la salud, como la interrupción voluntaria del embarazo en la red pública o el derecho a cuidados paliativos y a una muerte digna y sin dolor.
Para la FADSP, en todo caso, la Sanidad Pública española se enfrenta a un riesgo real de deterioro y privatización, dependiendo del resultado de las elecciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario