Vicente Bertomeu se compromete a presentar en 2012 los resultados de un estudio sobre la atención al paciente cardiaco en la Sanidad pública
Las Palmas de G.C. - Héctor Fajardo
• José Ramón González-Juanatey es el nuevo presidente electo
• La modificación de los Estatutos de la Sociedad propuesta por el Comité Ejecutivo crispó los ánimos en un sector de la Asamblea
El pasado viernes tuvo lugar, dentro del Congreso 2011 de la Sociedad Española de Cardiología (SEC), la Asamblea Ordinaria de la organización. En ella se elegía a los miembros que formarán parte del nuevo Comité Ejecutivo. En dichas votaciones fue elegido José Ramón González-Juanatey, que a partir de ahora trabajará conjuntamente con el Presidente de la entidad, Vicente Bertomeu. Ambos se comprometieron a presentar el próximo año, concretamente en Sevilla, lugar elegido para la celebración del próximo Congreso, los resultados de un estudio que analizará el tratamiento dispensado al paciente cardíaco en los hospitales públicos. Un estudio que servirá para profundizar en las deficiencias que puedan existir en el sistema estatal para así evitar que se conviertan en defectos endémicos. La asamblea de socios también fue el lugar elegido para que los miembros del Comité saliente plantearan una reforma estatutaria de la Sociedad. Dicha modificación afectará a las Secciones Científicas de la SEC, que pasarán a tener un peso relativo dentro de la Institución, y al funcionamiento del Comité Científico.
Este órgano no solo estará compuesto por algunos de los miembros de la Ejecutiva, sino además por los gestores de cada Sección. Sin embargo, su número es demasiado elevado, por lo que obligará a determinadas Secciones o bien a desaparecer, o a unirse a otras ya existentes y de mayor peso. De igual manera, se prevé la creaciones de nuevos órganos asesores como el Comité Institucional o el Interterritorial.
La principal crítica a esta reforma fue emitida por la ex Secretaria del Comité Ejecutivo del SEC, que aseguró que esta reforma podría dar demasiada autonomía a órganos integrados dentro de la Sociedad pero que no estaban formados en su totalidad por cardiólogos.
Por otra parte, algunos compañeros de ésta, también añadieron que la modificación estatutaria no era nada clara y que podría llevar a equívocos. Carlos Macaya, presidente saliente de la entidad, no entendió la percepción negativa que un sector de la Asamblea tuvo respecto a los cambios normativos y explicó que todo es fruto de un análisis profundo de la realidad de la SEC. Buscar influencia política El doctor Bertomeu indicó además que tras la realización de una extensa encuesta, "los propios socios coincidieron en que ya existen demasiadas Secciones, por eso no entiendo ahora esa oposición". Con respecto al Comité Científico, Bertomeu afirmó que la política científica de la entidad debe tener más peso y por ello debe tener también carácter ejecutivo". En relación al Comité Institucional, que tanto recelo levantó, confirmó que "su labor es tan solo asesora". El papel de dicho órgano estaría dentro del ámbito de la influencia política, tal y como confirmaron los partidarios de su creación. "Quiero que nos representen en el Ministerio, en las CCAA, en las universidades, en todos sitios", sentenció. Por último, Bertomeu añadió que su empeño está detrás de buscar cada vez mayor campo de influencia en la Sociedad Europea de Cardiología (ESC). Este propósito lo llevará a impulsar el nombramiento de coordinadores que se comuniquen constantemente con los españoles que trabajan en el resto de Europa. Los argumentos esgrimidos por Bertomeu y su equipo convencieron a la Asamblea. 58 personas votaron a favor de la medida y 7 en contra. 13 socios votaron en blanco.
En el análisis de la gestión del presidente saliente, Carlos Macaya, incidió en la incorporación de nuevos miembros protectores de la entidad, coicidiendo con la salida de otros que venían prestando hasta el momento esa financiación. La situación general de la Casa del Corazón es "de una plantilla de 33 trabajadores permanentes y el mantenimiento de 8 Departamentos dedicados no solo a labores de investigación, sino también al análisis de las TICs y del desarrollo de la Comunicación de la entidad".
Presupuesto para Becas Durante su discurso dio algunos datos de gran interés para los presentes, como que "a pesar de la crisis económica hemos mantenido el presupuesto para las Becas en investigación. De hecho, al menos el 60 por ciento de estos proyectos se han transformado en publicaciones en revistas científicas del primer nivel", aseguró Macaya. El compromiso de su equipo de Gobierno con la divulgación quedó patente en el nuevo impulso realizado a la Revista Española de Cardiología, una publicación, que en palabras del ya ex presidente, "se ha visto fortalecida gracias a las relaciones cada vez más estrechas con otras revistas del sector de Latinoamérica". Las cifras de la entidad sufrieron un descenso en los ingresos en el presente año, aunque cerrarán el ejercicio con beneficios. Hasta el día de hoy recibieron un total de 13.980.611 euros y han gastado 13.966.769 euros. Unas cifras nimias comparadas con las de 2010, donde se ingresaron 16 millones de euros y se gastaron poco menos de 15 millones. Lo que se trata de un superavit de más de mil millones. La situación es sin embargo muy distinta en la Fundación Española del Corazón (FEC), donde ha habido un descenso significativo de los ingresos y unos gastos demasiado altos. Evidentemente, tal y como aseguró Macaya, "las fundaciones no son empresas y su móvil es benéfico", aunque recordó que la falta de liquidez puede hacer quebrar este tipo de organizaciones. Antes de concluir su intervención también recordó los numerosas acciones que han sido impulsadas conjuntamente con entidades americanas y europeas, como la "Stent For Life", proyecto de la ESC que fue sustentado en parte por la SEC. O las reuniones mantenidas con su homóloga estadounidense en Whasington, con la intención de estrechar lazos de colaboración. Esta vista atrás dio paso al análisis del futuro de la Sociedad cuando Macaya le dio la palabra a Vicente Bertomeu, que basó su intervención final en el reto que suponía para él ponerse al frente de la entidad en esta etapa convulsa. "La situación actual nos lleva a convertirnos en una organización más austera, y al mismo tiempo, más eficiente para poder ser autosuficientes en los asuntos económicos". También tuvo palabras para referirse a la FEC, asegurando que "su situación debe cambiar. Las fundaciones tienen un carácter filantrópico por eso tienen un tratamiento fiscal favorable. Pero a veces hacemos más hincapié en lo segundo que en lo primero".
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