El cambio de modelo de examen para acceder a médico de familia en Osakidetza reduce al 45 por ciento los aprobados
Bilbao (18/01/2012) - Nerea Garay
Colectivos de médicos vascos han mostrado su malestar por el cambio de modelo de examen para la OPE de Medicina de Familia
Colectivos de médicos vascos han mostrado su malestar por el cambio de modelo de examen para las Ofertas Públicas de Empleo (OPE) de Osakidetza para acceder a las plazas de médico de familia, "que perjudica a muchos profesionales que llevan muchos años trabajando en el sistema público vasco". Y es que el nuevo modelo puesto en marcha por el Departamento de Sanidad de Rafael Bengoa ha reducido al 45 por ciento el número de aprobados cuando en las dos ofertas anteriores, el porcentaje se acercó al 97 por ciento al tratarse de una batería cerrada de preguntas. El nuevo examen rebaja sustancialmente la valoración del euskera en los facultativos, una condición impuesta por el PP al Gobierno socialista.
De hecho, 493 facultativos de Medicina Familiar han superado el examen que, el pasado 17 de diciembre, realizaron para acceder a una de las 638 plazas convocadas por Osakidetza. Los 595 aspirantes restantes han suspendido, lo que supone el 45 por ciento de aprobados.
Al comparar estos datos con las dos anteriores ofertas públicas de empleo de la Sanidad vasca, el resultado sorprende. Y es que en 2008 el 98 por ciento de los opositores aprobó y en 2006, el 97 por ciento. La explicación a esta diferencia reside en el modelo de examen. En esta ocasión, la prueba se ha realizado mediante un temario abierto, en vez de una batería cerrada de preguntas, lo que permitía preparar las respuestas.
Según han criticado a EL MÉDICO INTERACTIVO colectivos de facultativos que trabajan en la Sanidad pública vasca, en el trasfondo de la medida se encuentra "la política del Departamento de Sanidad de reducir el peso del euskera en las oposiciones y también el favorecer la entrada en el sistema sanitario de facultativos de otras Comunidades en detrimento de los que llevan tiempo ya trabajando en los centros vascos de forma interina".
Quitar peso al euskera
En este sentido, el director de Osakidetza Julián Pérez ha reconocido que el nuevo examen busca un doble objetivo. De un lado, se trata de conseguir que en esta primera criba, antes de puntuar el currículo y el euskera, pasen los más preparados y no quienes mejor han memorizado las 1.000 respuestas.
Desde Osakidetza argumentan la modificación del sistema de puntuación en la necesidad de contar con los mejores profesionales. Y esto es lo que realmente molesta a un colectivo amplio de facultativos. "La Sanidad vasca hasta hace tres años estaba situada a la cabeza de las mejores sistemas de salud del Estado. Es en esta última legislatura cuando hemos descendido hasta niveles insospechados; las listas de esperas han crecido de forma escandalosa; crece el descontento entre los profesionales y entre la ciudadanía. La gestión desde el Departamento está siendo nefasta y encima nos dicen que la OPE busca a los mejores profesionales. Es una broma de mal gusto", aseguran molestos a EL MÉDICO INTERACTIVO
De hecho, 493 facultativos de Medicina Familiar han superado el examen que, el pasado 17 de diciembre, realizaron para acceder a una de las 638 plazas convocadas por Osakidetza. Los 595 aspirantes restantes han suspendido, lo que supone el 45 por ciento de aprobados.
Al comparar estos datos con las dos anteriores ofertas públicas de empleo de la Sanidad vasca, el resultado sorprende. Y es que en 2008 el 98 por ciento de los opositores aprobó y en 2006, el 97 por ciento. La explicación a esta diferencia reside en el modelo de examen. En esta ocasión, la prueba se ha realizado mediante un temario abierto, en vez de una batería cerrada de preguntas, lo que permitía preparar las respuestas.
Según han criticado a EL MÉDICO INTERACTIVO colectivos de facultativos que trabajan en la Sanidad pública vasca, en el trasfondo de la medida se encuentra "la política del Departamento de Sanidad de reducir el peso del euskera en las oposiciones y también el favorecer la entrada en el sistema sanitario de facultativos de otras Comunidades en detrimento de los que llevan tiempo ya trabajando en los centros vascos de forma interina".
Quitar peso al euskera
En este sentido, el director de Osakidetza Julián Pérez ha reconocido que el nuevo examen busca un doble objetivo. De un lado, se trata de conseguir que en esta primera criba, antes de puntuar el currículo y el euskera, pasen los más preparados y no quienes mejor han memorizado las 1.000 respuestas.
Desde Osakidetza argumentan la modificación del sistema de puntuación en la necesidad de contar con los mejores profesionales. Y esto es lo que realmente molesta a un colectivo amplio de facultativos. "La Sanidad vasca hasta hace tres años estaba situada a la cabeza de las mejores sistemas de salud del Estado. Es en esta última legislatura cuando hemos descendido hasta niveles insospechados; las listas de esperas han crecido de forma escandalosa; crece el descontento entre los profesionales y entre la ciudadanía. La gestión desde el Departamento está siendo nefasta y encima nos dicen que la OPE busca a los mejores profesionales. Es una broma de mal gusto", aseguran molestos a EL MÉDICO INTERACTIVO
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