La Plataforma de Salud de Navarra se manifiesta contra la reorganización de AP y pide la dimisión de la consejera Vera

Pamplona (25/09/2013) - Redacción

Denuncia el traslado de médicos y enfermeras de sus centros de salud "porque no sobra nadie"

El malestar por la reorganización de la Atención Primaria en la Comunidad foral de Navarra sigue creciendo. A las concentraciones que se celebran en los centros se suman ahora las manifestaciones. El pasado domingo más de dos mil personas hicieron suya la convocatoria de la Plataforma de Salud de Navarra y se manifestaron para protestar contra los recortes sanitarios del Gobierno de UPN, así como para censurar la reorganización de los centros de Atención Primaria. La convocatoria sirvió para escenificar el descontento de la ciudadanía y de los profesionales sanitarios con la gestión llevada a cabo por la consejera Marta Vera, cuya dimisión fue reclamada durante la marcha.
Los manifestantes, que portaban una pancarta con el lema "En defensa de la Sanidad pública. Pribatizaziorik ez". Los manifestantes también lucieron decenas de pegatinas contra los recortes y efigies de la presidenta Yolanda Barcina.
David Mendaza, portavoz de la Plataforma de Salud de Navarra, denunció la medida adoptada por la Dirección de Atención Primaria de trasladar médicos y enfermeras de varios centros de salud "con la excusa de llevarlos a unos centros que según ellos tenían unos cupos de TIS (tarjeta individual sanitaria) muy altos". "Los profesionales no sobran en sus centros. No es aceptable empeorar centros que a duras penas se acercaban a los ratios aconsejados para no resolver los problemas de los centros de destino", señaló.
Mendaza explicó que los centros de salud afectados (Burlada, San Jorge, Rochapea y Casco Viejo) "van a tener a sus profesionales con una mayor carga asistencial", lo que "va a hacer imposible realizar la labor de atención sanitaria que precisa la ciudadanía". Así, agregó, será "imposible realizar prevención" y "se crea un desbarajuste que va a impedir los objetivos de la Atención Primaria, que son justamente la prevención y el seguimiento de los pacientes por su médico de cabecera de forma rutinaria", una situación que para los enfermos crónicos, "se agrava más", y denunció que la Dirección de Atención Primaria ha aplicado "una política de hechos consumados", ya que "en pleno agosto eliminó los puestos de Burlada" y después convocó a la Comisión de Personal "para explicarnos estos cambios".