Alianzas entre sectores, futuro de las patologías olvidadas

Mil millones de personas padecen alguna de las 17 patologías que la OMS califica de desatendidas, y el futuro debe responsabilizar a todos los actores en su erradicación. Hasta ahora la inversión y la investigación se centran en las patologías del primer mundo.

Enrique Mezquita | Isabel Gallardo Ponce | 05/01/2012 00:00

José María Fiandor, Jorge Alvar y Rogelio López-Vélez junto a Javier Granda, moderador de la mesa y colaborador de DM. (Enrique Mezquita)

"Para el abordaje de las enfermedades tropicales sólo se destina el 10 por ciento de los recursos sanitarios globales. De hecho, sólo el 1 por ciento de los 1.400 fármacos desarrollados entre 1975 y 1999 son para estas patologías", ha afirmado Jorge Alvar, responsable del programa de Leishmaniasis de la Organización Mundial de la Salud, en la mesa Descubrimiento de fármacos contra enfermedades en países en desarrollo: una responsabilidad de todos, organizada por GlaxoSmithKline en Madrid. Según él, en estas patologías sólo se investiga lo que pueda beneficiar a los viajeros que visitan zonas en las que estas enfermedades son endémicas. "Se viene arrastrando un desequilibrio absoluto del peso de esas enfermedades".

Sólo el 1 por ciento de los fármacos desarrollados entre 1975 y 1999 han servido para tratar alguna de las patologías olvidadas

La OMS considera como desatendidas 17 patologías que afectan a 1.000 millones de personas. De ellas, el 80 por ciento de los casos se sitúan en áreas tropicales y subtropicales. "Son enfermedades que afectan a casi un sexto de la población, pero se ignoran porque afectan a los grupos más vulnerables y sin fuerza política". Según Alvar, estas patologías son incapacitantes, cuentan con un gran estigma y tienen una baja prioridad en los programas nacionales. "En Sudán, por ejemplo, la leishmaniasis es la segunda causa de mortalidad y, sin embargo, no está reconocido en su programa de salud".

Patologías emergentes

Frente a ellas, las patologías emergentes, como la gripe A o el SARS, han creado zozobra social en Occidente y han obtenido grandes inversiones pese a su escasa propagación. "Se invierte más en investigación y desarrollo para solucionar un año perdido por enfermedad en diabetes que en las enfermedades tropicales". El compromiso político, de la industria y de las alianzas debe buscar la erradicación y la mejora de la salud en el mundo.
Otra patología desatendida en el mundo pero emergente en Europa es la enfermedad de Chagas, cuya prevalencia cada vez es mayor, especialmente en España. El reto se agrava ante el parón que ha sufrido la producción del tratamiento. "La escasez de benznidazol (ver DM del 13-X-2011) producida por la falta de disponibilidad en Lafepe, responsable de su fabricación, además de la eficacia reducida y la alta toxicidad de éste y del nifurtimox", la otra alternativa para su abordaje, sumado a las pocas herramientas para el diagnóstico, hacen "necesario el apoyo de la industria para obtener nuevos fármacos que permitan el tratamiento del Chagas", así como terapias alternativas, marcadores biológicos y otros métodos que ayuden a la detección y a establecer el pronóstico, ha explicado Rogelio López-Vélez, responsable de la Unidad de Medicina Tropical del Hospital Ramón y Cajal. Es esencial realizar una labor proactiva para difundir información y sensibilizar a la población sobre el Chagas, para mejorar su detección y abordaje.

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