El médico de Madrid exige que se negocie todo ajuste laboral

Los médicos de Madrid reclaman a la consejería que pacte con ellos cualquier medida de contención que afecte a la organización de su trabajo, y que lo haga al margen de la mesa sectorial. Colegio y Amyts se amparan en razones exclusivamente clínicas para justificar su petición.

Francisco Goiri | 24/01/2012 00:00

Miguel Gª Alarilla, presidente del Colegio de Madrid, y Julián Ezquerra, secretario de Amyts. ()

En vísperas de la nueva ronda negociadora que los sindicatos tendrán hoy con la Consejería de Sanidad de Madrid, el Colegio de Médicos y la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de la región (Amyts) escenificaron ayer el primer acto público fruto del acuerdo de bases que ambas instituciones han suscrito contra la Ley de Acompañamiento de los presupuestos autonómicos (ver DM del 16-I-2012). No hubo grandes decisiones ni anuncios significativos, pero sí un mensaje muy claro a un interlocutor concreto, el consejero de Sanidad, Javier Fernández-Lasquetty: los médicos de Madrid exigen participar en cualquier decisión laboral que les afecte, y quieren hacerlo, a imagen y semejanza de lo que han conseguido los MIR de la comunidad (ver DM de ayer), al margen de la mesa sectorial, es decir, en el foro único de negociación que los facultativos del SNS llevan años reclamando. Colegio y Amyts estiman que la negociación de las medidas de contención que el Sindicato Médico está reclamando en todas las autonomías es el contexto idóneo para inaugurar de una vez por todas lo que el Foro de la Profesión ha dado en llamar la mesa del conocimiento."

García Alarilla y Ezquerra coinciden en que muchas de las medidas de contención se traducirán en una masificación de la asistencia sanitaria

El hecho evidente es que no hay dinero y que recortar, hay que recortar, pero los médicos exigimos participar en cualquier decisión que afecte a la reorganización del trabajo y atribución de tareas", dijo Miguel García Alarilla, presidente del colegio, leyendo literalmente el primer manifiesto conjunto de ambas instituciones tras la firma de su acuerdo.
Y las razones que los médicos esgrimen para exigir participar en las decisiones laborales, y hacerlo como un colectivo aparte, son exclusivamente clínicas, porque, como dijo Julián Ezquerra, secretario general de Amyts, "las medidas que ya se están aplicando o que se aplicarán en la región tendrán consecuencias directas en la masificación de la asistencia, y la consiguiente e inevitable merma de la calidad asistencial que los médicos queremos preservar a toda costa".

Amyts denuncia la contradicción de Aguirre, que anuncia recortes, al tiempo que dice que en Madrid subirá menos el IRPF que en otras regiones

Transparencia oficialEn consonancia con la exigencia que CESM ponía la semana pasada sobre la mesa (ver DM del 20-I-2012), el colegio madrileño y Amyts coincidieron ayer en que el primer paso para dialogar es que haya transparencia oficial en las cuentas. "Queremos saber qué presupuesto hay para sanidad, a qué partidas concretas se destina, cuánto gasto se acumula y qué parte de los impuestos se destina al sector. No se puede incurrir en contradicciones tan flagrantes como la de la presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, que anuncia una subida menor del IRPF que en otras regiones y, al mismo tiempo, decreta recortes", dijo el representante sindical.
Aunque Ezquerra reconoció expresamente el "talante negociador" del consejero, añadió que su compromiso verbal de no bajar más los salarios y mantener la plantilla sanitaria "sólo será creíble si se pone en marcha la OPE de Familia y Pediatría pendiente, agiliza y termina la de hospitales que está en curso, y, sobre todo, cumple el compromiso suscrito en la mesa sectorial [de 26 de noviembre de 2006] de convertir en interinas todas las plazas eventuales que tengan carácter estructural".

1.500 PROBABLES DESPIDOS DE EVENTUALES

"Cualquier recorte que afecte a la dimensión actual de la plantilla sanitaria madrileña tendrá un efecto inmediato en la calidad asistencial", y por eso Julián Ezquerra pidió ayer al consejero que "lo último que toque sean los contratos". Según los cálculos de Amyts, el 30 por ciento de la plantilla médica está ocupada por interinos y eventuales, y la aplicación de las 37,5 horas semanales podría traducirse en la desaparición de hasta 1.500 contratos eventuales: un simple cálculo matemático, fruto de asignar a la plantilla fija esas horas de más que ahora asumen los trabajadores temporales. Estimaciones al margen, sobre la mesa hay un dato objetivo que inquieta, y mucho, a colegio y sindicato: los médicos eventuales sólo tienen garantizado su contrato, al menos de momento, hasta el 31 de marzo, fecha tope que la consejería ha accedido a firmar. Ezquerra ve evidente el porqué de ese límite: "A finales de marzo, el 29, 30 ó 31, se harán públicos los Presupuestos Generales del Estado y, a partir de ahí, todos, incluido el Gobierno regional, sabremos a qué atenenernos. ¿Quién nos dice a nosotros que no hay directrices nacionales que afecten específicamente a las plantillas sanitarias?". Aunque la controvertida Ley de Acompañamiento sea una norma del Ejecutivo regional, Ezquerra tiene claro que la Consejería de Sanidad dispone de margen de maniobra para implantarla en el ámbito sanitario, "porque la propia ley especifica que su aplicación debe negociarse en el contexto sanitario". Lo que ya no tiene tan claro es el margen que le quedará al consejero de Sanidad tras la publicación de los Presupuestos Generales, "que limitarán mucho su actuación".

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